Venustiano Carranza

Nace en Cuatro Ciénegas, Coahuila, el 29 de diciembre de 1859. Fueron sus padres el coronel Jesús Carranza Neira y doña María de Jesús Garza.

Hizo estudios de primaria en su pueblo natal, los que prosiguió en el Ateneo Fuente de Saltillo y en la Escuela Preparatoria de la ciudad de México. Comenzó la carrera de Medicina, que hubo de abandonar por problemas de salud.

Se inicia en el servicio público como Presidente Municipal de Cuatro Ci énegas, primero en 1887 y, por segunda vez, de 1894 a 1897.

Miembros de su familia se levantan en armas cuando en 1893 el gobernador José María Garza Galán intenta una segunda reelección. El movimiento culmina con la renuncia de Garza Galán.

Fue Diputado local, Diputado Federal suplente, Senador por Coahuila y en 1908 Gobernador Interino.

Apoyado por Francisco I. Madero y contra la opinión de Porfirio Díaz, en 1909 lanza su candidatura al Gobierno de Coahuila, siendo derrotado por la maquinaria electoral de la dictadura. Tras la firma de los Tratados de Ciudad Juárez, Madero le nombra Ministro de Guerra y Marina.

Es designado Gobernador provisional del Estado de Coahuila en 1911, y electo para el mismo cargo el 17 de septiembre de ese mismo año.

Mientras la capital se convulsiona por el cuartelazo contra el régimen constitucional de Don Francisco I. Madero, recibe información de la renuncia del Presidente y del Vicepresidente, José María Pino Suárez, así como de la usurpación del cargo por parte de Victoriano Huerta.

Inmediatamente convoca al H. Congreso del Estado de Coahuila de Zaragoza, que el 19 de febrero de 1913 desconoce a Huerta como Jefe del Poder Ejecutivo y faculta a Carranza para formar un ejército que restablezca el orden constitucional.

Surge así el Ejército que posteriormente sería denominado Constitucionalista, antecedente del actual Ejército Mexicano. Por ello, cada 19 de febrero rendimos homenaje a nuestras Fuerzas Armadas.

El 26 de marzo de 1913, al frente de un grupo de valerosos soldados, en la Hacienda de Guadalupe lanza el histórico “Plan de Guadalupe”, que desconoce al gobierno usurpador de Huerta y a los Poderes Legislativo y Judicial de la Federación; crea el Ejército Constitucionalista y designa a Don Venustiano Carranza como su Primer Jefe. Inicia así la Revolución Constitucionalista a la que se sumaron miles de mexicanos de ciudades, pueblos y rancherías, empuñando las armas para luchar por un México justo y democrático.

Librando grandes batallas en todo el territorio nacional, con el apoyo y la simpatía de cada vez más mexicanos, triunfa la Revolución. Luego de la firma de los Tratados de Teoloyucan, el 13 de agosto de 1914, Don Venustiano Carranza entra victorioso a la ciudad de México.

En un intento de solucionar las diferencias

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