Anatomia En Psicologia
SyNysterwolf3 de Julio de 2014
4.691 Palabras (19 Páginas)412 Visitas
UNIVERSIDAD YACAMBÚ
FACULTAD DE HUMANIDADES
VICERRECTORADO ACADÉMICO
PROGRAMA PSICOLOGÍA
MENOS BASURA Y MÁS VERDE: UNA AYUDA PARA LA COMUNIDAD BRISAS DE CARORITA II, MUNICIPIO IRIBARREN, PARROQUIA EL CUJÍ.
Albarrán María D.
Di Bartolomeo Mario
Gutiérrez Nathaly A.
Ravell Enrique
Reinoso María A.
Silva Paolla D.
Zambrano Daniela
JULIO 2013
Introducción
La contaminación ambiental es uno de los problemas más importantes que afectan a nuestro mundo y surge cuando se produce un desequilibrio, como resultado de la adición de cualquier sustancia al medio ambiente, en cantidad tal, que cause efectos adversos en el hombre, en los animales, vegetales o materiales expuestos a dosis que sobrepasen los niveles aceptables en la naturaleza, provocando un riesgo para la supervivencia y salud de estos.
En sentido general, el ser humano se ve afectado por distintos tipos de contaminación a diario, sin embargo, la problemática de la comunidad de Brisas de Carorita II está enfocada en la contaminación de los suelos, que básicamente consta de un deterioro de las áreas de esparcimiento social o áreas verdes, las cuales deberían tener un mantenimiento constante y se encuentran abandonadas Enfocándolo desde un punto de vista psicológico, sí existen impedimentos para el uso de áreas verdes, en especial áreas de recreación, esto conlleva a uno desequilibrio en la interacción entre las personas y el medio ambiente y esto a su vez, problemas de salud emocional en el ser humano.
Por esto, el siguiente proyecto se basó en la recuperación de un área verde ubicada dentro del espacio comunitario en la Urb. Brisas de Carorita II, Municipio Iribarren, Parroquia El Cují, donde el fin es habilitarla para que todos los habitantes de estas residencias, puedan aprovechar al máximo de sus beneficios.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Se conoce que el calentamiento global es un problema mundial originado por la contaminación ambiental que a su vez es consecuencia de la falta de conciencia de los seres humanos que en su afán por modificar el entorno y de generar producción y aumento de la economía, destruyen el propio hábitat. Esta situación se manifiesta en alteraciones de las condiciones medioambientales normales, ejemplo de ello son los cambios climáticos, fenómenos como El Niño y La Niña, el deshielo de los polos entre muchos otros. En palabras de Jiménez, (1992) “Quizá sea esta ‘ecocrisis’ la que mejor ha contribuido a esclarecer la irracionalidad de los modelos vigentes de producción-consumo y los estilos de desarrollo orientados por el crecimiento indefinido material” (p.16) Por ello, es imperativo y vital revisar los modelos de consumo y producción que actualmente se practican a nivel planetario.
Asimismo, Venezuela en las últimas décadas ha sido afectada por largos períodos de sequía y de lluvias que en ambos casos han destruido cosechas, destruido poblaciones enteras como el caso del deslave en el Estado Vargas en el año 1999, que según cifras de un comunicado de Protección Civil, dejó un saldo de 20.000 víctimas fallecidas, así mismo las inundaciones en Guasdualito Estado Apure, en julio del 2002 con 35 mil damnificados; el desbordamiento del Río Mocotíes en el Estado Mérida, en febrero del 2005, con 16 000 damnificados y más recientemente el caso del Estado Táchira. Se evidencia, entonces, el deterioro del medio ambiente es un tema sobre el cual poco se ha hecho en el país, y por lo tanto el desarraigo de valores ambientalistas es notorio en el modo de actuar de los ciudadanos en general.
El mismo Jiménez, (1992) plantea que se debe globalizar el problema ambiental y que su tratamiento debe ser integral, a su juicio:
Cualquier intento de analizar los problemas, causas y soluciones de la “ecocrisis” debe pasar necesariamente por una comprensión del estado crítico de la situación mundial. No obstante, cabe señalar que el proceso de expansión del sistema capitalista mundial ha tenido en la sobreexplotación del hombre y de la naturaleza sus fundamentos principales con todas sus secuelas de despilfarros naturales, contaminación. (p.16)
El modelo económico instaurado en Venezuela hasta finales del siglo pasado justificaría entonces, según lo expuesto por Jiménez, el anteponer la producción económica al cuidado medioambiental. Y es que el problema ambiental está fundamentalmente afectado por los modelos de producción y consumo imperantes en el mundo, por lo que se debe generar un cambio en la conciencia colectiva de la comunidad mundial. Ese cambio de conciencia debe estar influenciado por la educación y la cultura para la preservación armónica del planeta.
Sin embargo, y haciendo énfasis en los preceptos del nuevo modelo económico implantado en Venezuela a partir de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), es justo comenzar a crear conciencia ambientalista. Sucede pues, que en las comunidades venezolanas, sean de viviendas, áreas educativas o deportivas, se percibe una notable ausencia de valores relacionados con la preservación y cuidado del ambiente.
Así, se ha verificado que en las áreas comunes, específicamente de la comunidad de Brisas de Carorita II, como lo son los espacios que estaban destinados para la construcción de una cancha deportiva y áreas verdes, se observan constantemente desperdicios en el suelo, y no se cuenta con papeleras en las cercanías de dichas áreas; se conoce también que aunque los terrenos poseen un potencial grande para orientarlo a producir un impacto positivo al ambiente, están abandonados, en su mayoría, por la comunidad. En ese sentido, tal como lo afirman Sosa y otros (2010);
Las Instituciones de Educación Superior (IES), a través de sus funciones sustantivas de educación a nivel superior, de investigación básica y aplicada y de la capacitación y la divulgación del conocimiento, están llamadas a jugar un papel estratégico para la preparación de ciudadanos ambientalmente activos y comprometidos en el análisis y la solución de los problemas ambientales. (p. 34)
Tal afirmación de los investigadores citados resulta medular para la formulación de políticas educativas en educación universitaria pues tiene una profunda raíz ética y humanística, en tanto que coloca a la universidad ante la responsabilidad de asumir la formación de un profesional preparado para enfrentar los problemas derivados de la interacción destructiva que ejerce el ser humano con su entorno,.
Ante esta situación planteada, cabe preguntarse:
¿Cómo despertar conciencia ante una población de adultos, adolescentes y niños que conforman ésta comunidad?
Es por ello, que mediante la implementación de las herramientas que se describirá a continuación, se espera obtener resultados satisfactorios en pro de contribuir a la disminución de la problemática ambientalista que se maneja en la comunidad de Brisas de Carorita II
OBJETIVOS
Principal:
Fortalecer una cultura ambientalista dentro del espacio comunitario en la Urb. Brisas de Carorita II, Municipio Iribarren, Parroquia El Cují.
Específicos:
Diagnosticar la problemática existente en cuanto una cultura ambientalista.
Realizar un plan de acción en base a la cultura ambiental.
Concientizar a la comunidad de la Urb. Brisas de Carorita II, en cuanto a una cultura ambiental.
JUSTIFICACIÓN
El presente proyecto encuentra justificación básicamente en la ausencia de una cultura educativa que busque fomentar proyectos económicos y sociales, orientados a la conservación ambiental y al desarrollo sostenible, modelo que contribuya a una mejor calidad de vida para toda la población. Así mismo, busca promover de manera directa y dinámica la educación y culturización ambientalista, enfocada a la comunidad de la Urb. Brisas de Carorita II
En palabras de Ángel (2001):
“La cultura como la estrategia de adaptación al medio, no es comprensible, sino como resultado de la evolución bilógica y, por lo tanto, como parte de la naturaleza. Es la mano prensil, la vista estereoscópica, el lenguaje articulado y la capacidad de almacenamiento cerebral lo que permite construir la cultura… La cultura es distinta, no necesariamente superior a las otras formas evolutivas.” (p.243)
Ante lo expuesto, y considerando la cultura como el conjunto de modos de vida y costumbres de una sociedad, se puede acertar en el hecho de promover una cultura distinta, verde, y con miras a un nuevo mundo, con mayor desarrollo humanista. Por otra parte, cabe destacar que es importante fomentar una motivación entre los habitantes y que se apliquen nuevas herramientas, didácticas y al aire libre, que cumplan funciones a su vez en cuanto al mantenimiento y embellecimiento natural.
Siendo las cosas así, resulta de una clara trascendencia las campañas didácticas ambientales para los integrantes de la comunidad de ésta urbanización, como herramienta para la incorporación de ejes de integración en el desarrollo de la productividad de proyectos, apoyados en el ámbito educacional, en especial que dichos proyectos incorporen de manera eficaz el trabajo ambientalista.
Por su parte, Bermúdez (2003) señala que: “la cultura establece un nuevo orden en la naturaleza que reemplaza
...