Australopithecus
Enviado por stela_flor • 29 de Septiembre de 2013 • 4.962 Palabras (20 Páginas) • 384 Visitas
Australopithecus
Solo hasta 1925 se descubrió el primer fósil de un australopiteco. Este primer fósil consistía en el cráneo de un infante que mostraba un rostro y dentadura simiesca, pero el molde del cerebro le mostró a Raymond Dart, su descubridor que no era un simple simio, y que su encéfalo tenía rasgos anatómicos más cercanos a los nuestros que a los de un simio. Dart decidió bautizar esta nueva especie como Australopithecus africanus (El término australopitheco proviene de los términos griegos Austral = Del sur y Pithecus = simio) El fósil descrito por Dart se conoce como el Niño de Taung, nombre de la región minera sudafricana de la que le llevaron el fósil. Sin embargo, el descubrimiento de Dart no fue acogido por la comunidad científica de su época ya que esta consideraba que la evolución de un cerebro grande fue la característica que propulsó la evolución del hombre. Los colegas de Dart daban más importancia a fósiles más recientes y de gran cerebro como el Homo erectus de Asia. Nuevos descubrimientos en África probarían que la postura bípeda precedió a la evolución de un cerebro grande y que estos "chimpancés de andar humano" tenían un lugar en nuestro árbol genealógico.
La palabra australopithecus designa al género ya extinguido de primates homínidos, tal como se denomina a la familia biológica que incluye tanto a los grandes simios como al hombre.
Cabe destacar, que para simplificar su expresión, el término ha sido castellanizado como australopiteco.
El origen del australopiteco se remonta a aproximadamente cuatro millones de años, en África, especialmente en aquellas zonas de clima tropical y su desaparición física se produjo alrededor de dos millones de años atrás.
Los partes de un australopiteco (al igual que para todos los vertebrados) que mejor fosilizan son sus partes óseas y sus dientes. Aparte de estos se han hallado pisadas fósiles y el molde del cerebro formado dentro de un cráneo, en el caso del niño de Taung. Dado que los paleontólogos tienen que vérselas principalmente con huesos y dientes es importante que recordemos un poco de la anatomía ósea del cráneo.
Los Australopithecus según su antigüedad se clasifican en diferentes subespecies.Australopithecus Anamensis, Afarensis, Africanus, Garhi, Sediba. Muy parecidos entre sí y con pequeñas diferencias: los molares se hacían más planos, o aumenta un poco su capacidad craneal, mayor peso, etc
Al igual que los chimpancés los Australopithecus eran fructívoros, comían fruta que recogían de los árboles, además, cazaban ciertos animales pequeños (tal y como hacen los chimpancés) que les servía como un aporte extra de proteínas en sus dietas. Algo necesario para desarrollar el cerebro. Pero la diferencia entre los Australopithecus y los chimpancés fue que al poder caminar de una manera bípeda empezaron a salir de la selva a las sabanas de África para, caminando, recorrer largas distancias y recolectar su alimento. Origen del Bipedismo.
RASGOS FÍSICOS
El cráneo.
• Aumento del volumen cerebral.
Progresivo aumento de la capacidad craneana. El Australopithecus tenía una capacidad craneana de 500 cc, mientras que el Homo sapiens sapiens la tiene de 1800 cc a 2000 cc.
• Aumento de las circunvoluciones cerebrales.
Aumentan la complejidad y el neocortex (células cerebrales). Se ha llegado a esta conclusión estudiando moldes endocraneales, donde se pueden ver las improntas que deja el cerebro dentro del cráneo.
• Desaparición de la cresta sagital.
Ésta existe en individuos con fuertes músculos masticados que se sujetan en ella. Desaparece progresivamente a medida que se van haciendo omnívoros.
• Desaparición de los arcos superciliares.
(torus supraorbitae). Progresiva desaparición de la moldura que existe sobre los ojos, bajo las cejas.
• Progresiva recesión de la cara.
Es decir, paso del prognatismo al ortognatismo (cara plana). Para definir estas características se utilizan el siguiente método de medición:
Se traza una línea desde encima de la nariz, entre las cejas, hasta el centro de los incisos superiores. Se traza otra línea que pase horizontalmente por la parte inferior del hueso nasal hasta la parte posterior de la cabeza. Ambas líneas forman un ángulo entre sí. Si el ángulo se aproxima a 90º hablaremos de ortognatismo, mientras que si es menor de 90º hablaremos de prognatismo.
Hay unos umbrales. La raza negra, por ejemplo, es más prognata, sin que esto quiera decir que esté menos desarrollada, porque está dentro del umbral del ortognatismo.
El ortognatismo permite la visión estereoscópica, al estar los ojos en el mismo plano.
Este proceso se va dando a medida que el cerebro va aumentando.
Resto del esqueleto: bipedismo.
• Cambios en la columna vertebral.
Adquiere una forma sinuosa que la hace más flexible.
• Ensanchamiento de la pelvis
La pelvis, ahora, sirve de base para el peso del resto del esqueleto. Además, como cada vez se dan a luz a crías con el cráneo más grande, en las hembras el tamaño del canal de parto debe ampliarse.
• La rodilla y el pie se modifican.
El pulgar se articula junto a los otros dedos. Pies menos flexibles y con más arco.
En cualquier caso, y como anécdota, el arco suele ser mayor en las mujeres que en los hombres, porque facilita el cambio del centro de gravedad de su cuerpo durante el embarazo.
• Desplazamiento del foramen magnum.
A medida que se va adoptando una postura más erecta, el foramen magnum se va desplazando hacia la base del cráneo.
RASGOS DE COMPORTAMIENTO
• Aparición del lenguaje.
Se desarrolla la estructura física que posibilita la articulación de sonidos y, al mismo tiempo, se desarrolla la zona del cerebro donde reside la capacidad de hablar.
Es difícil saber en que momento empezarían a comunicarse mediante palabras, porque se han perdido las partes físicas relacionadas con el lenguaje. Pero estudiando los moldes endocraneales del hemisferio izquierdo, en el que reside la capacidad del lenguaje, se ha observado que hay dos zonas concretas que se van desarrollando progresivamente a partir del Australopithecus.
No se ha podido llegar a ninguna conclusión sobre el momento en que aparecería el lenguaje, porque se va desarrollando poco a poco y no se sabe si lo suficiente para hablar. Es posible que un Neanderthal tuviese una capacidad de articulación como un niño entre 6 y 9 años.
Fabricación de instrumentos.
• Consumo de carne cada vez mayor.
Nos vamos haciendo omnívoros,
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