Bromatología y recursos forrajeros

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE CHIAPAS

FACULTAD DE MEDICINA VETERINARIA Y ZOOTECNIA CAMPUS II

MATERIA: Bromatología y recursos forrajeros

ALUMNA: Méndez Medina Aurora Noemí

DOCENTE: Vázquez Aguilar Diego

TAREA: Ensayo de la importancia de las propiedades físicas y químicas del suelo y la relación que tiene con la producción forrajera.

Introducción

Las propiedades físicas y químicas del suelo nos plantean opciones y problemáticas para el cultivo, al igual que nos permite también un mejor conocimiento de prácticas agrícolas, así como manejo adecuado de los residuos resultantes de los cultivos. La determinación de las características físicas del suelo es importante para explicar también sus procesos químicos y la evolución de los cultivos. En este trabajo abordaré las propiedades físicas y químicas del suelo y su relación con las plantas y cultivos.

Desarrollo

Importancia de las propiedades físicas del suelo:

La Textura del suelo se refiere al tamaño se sus partículas sin tomar en cuenta su composición. Es fundamental ya que determina su valor económico. Se divide en arenas, limos y arcillas. Las arenas tienen partículas más grandes, su principal función es como estructura, facilita el movimiento de aire y el agua de drenaje. Aquí se encuentran los principales minerales del suelo. Los limos al tacto son suaves, se diferencian de la arena por el tamaño. Las arcillas son las partículas más pequeñas que componen la textura del suelo. El paso de agua y aire es menor en comparación de las otras texturas e influye en el movimiento y almacenaje de agua. La estructura del suelo es el resultado de la combinación de arenas, limos y arcillas. Se distinguen bastantes tipos de estructuras de suelo, de los que resaltan: Laminares (con infiltración lenta), Prismáticas (con infiltración moderada) y Granulares (con infiltración rápida). En su estado natural, el suelo se compone de tres fases: solida (compuesta de minerales y materia orgánica), liquida (el agua que se encuentra en el suelo) y gaseosa (el aire que se encuentra en el suelo). La fase solida es la predominante y se distribuye dejando así espacios libres llamados “vacíos” que pueden ser ocupados por aire o agua. La relación correcta entre estos elementos ayuda a determinar su viabilidad y si hay suficientes nutrientes para lo que se planee cultivar. El color del suelo se puede relacionar con varios factores, tomando como ejemplo: la fertilidad de este, problemas de drenaje y altos contenidos de materia orgánica. Los colores pueden dividirse en matiz (colores claros), luminosidad (colores medios) y pureza (colores oscuros). Existen diferentes técnicas para conocer desde los tipos de suelo, hasta su composición que van de las más sencillas a las más científicas y profesionales, para que los productores los conozcan y sepan qué tratamientos o qué fin darle a su suelo y así no desperdiciar recursos y tiempo.

Importancia de las propiedades químicas del suelo:

Cualquier organismo vivo necesita condiciones óptimas en su sitio de formación, así como sustancias autosuficientes. El suelo requiere una gran cantidad de nutrientes, entre estos: Fósforo, nitratos y sustratos. Las propiedades químicas son aquellas que permiten reconocer ciertas cualidades del suelo cuando hay cambios químicos, las principales son: La materia orgánica, La fertilidad y el PH del suelo. Se les llama materia orgánica a los residuos de plantas y animales en descomposición y que proporcionan al suelo algunos nutrientes que los cultivos necesitan para su desarrollo y para su producción. Las materias orgánicas ayudan a mejorar la calidad del suelo para un mejor desarrollo de los cultivos. Dependiendo de la constitución del suelo, dependerá también el uso que se dé a las materias orgánicas. Por ejemplo, si es suelo es arenoso podría mejorarse con varías aplicaciones de composta, y en un suelo arcilloso se puede hacer más suave y liviano. Algunos de sus beneficios pueden ser: la tierra se vuelve más fácil de trabajar, oscurece los suelos, favoreciendo así la absorción de mayor radiación solar, previene la erosión porque evita la dispersión de partículas minerales y ayuda a almacenar alimentos para los cultivos. La Fertilidad es una propiedad que hace referencia a la cantidad de nutrientes que aporta el suelo, cumpliendo cada uno de estos una función fundamental: El Nitrógeno ayuda al desarrollo de las plantas, aporta su color verde y ayuda a la introducción de buenas cosechas, siendo también el principal para la formación de las proteínas. El Fósforo ayuda y promueve el buen crecimiento de las plantas, hace que las raíces sean fuertes y abundantes, apoya con la formación y maduración de frutos y es indispensable para la formación de semillas. El Potasio ayuda a la formación de tallos fuertes, protección de enfermedades a las plantas y mejora la calidad de las cosechas. El Calcio facilita la obtención de alimentos del suelo por parte de la planta. El Magnesio es el elemento principal para la producción de clorofila. Los suelos pueden ser ácidos o alcalinos, aunque algunas veces también puede ser neutral. Esto puede expresarse según su valor de PH. La Salinidad del suelo se refiere a la cantidad de sales que se encuentran en el suelo. Se dice que un fertilizante puede ser una sal. Un suelo se considera salino cuando tiene un exceso de sales solubles, lo que impide el desarrollo normal de las plantas.

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