Cromosoma de la inteligencia

Cromosoma 6:                                                                   INTELIGENCIA

Robert Plomin reunía en cada verano a un grupo de adolescentes superdotados de toda América quienes tenían un CI de casi 160 a finales de 1997. Asumiendo que tenían los mejores genes influyendo en su inteligencia, tomó muestras de sangre y analizó directamente el cromosoma 6, encontrando así en su brazo largo una secuencia que se diferenciaba ligeramente de otras. Ésta secuencia se encuentra en la mitad del gen IGF2R. En EEUU, Goddard tomó la prueba de inteligencia inventada por Alfred Binet aplicado a autóctonos y extranjeros, resultando estos últimos en su mayoría con bajos resultados. Robert Yerkes convenció al ejército para que tome las pruebas a los reclutas de la PGM teniendo, junto con la de Goddard, una gran influencia en la aprobación de una ley restringiendo a los futuros inmigrantes. Hasta antes de la SGM la idea de herencia de la inteligencia empezó a perder fuerza, ya que los trabajos anteriores pasaban por alto los factores ambientales. Howard Gardner abogó por la inteligencia múltiple reconociendo cada talento como una habilidad aparte. Robert Sternberg anunció que existía 3 tipos distintos de inteligencia: analítica (que era como un “examen escolar”), práctica (nace directamente de la vida cotidiana) y creativa (influyendo estas dos). Charles Spearman en 1904 explicó que habían dos tipos de inteligencia: generales (distintas inteligencias relacionadas aprendidas) y la específica (habilidad de resolver ideas nuevas no antes vistas). Entre 6 y 18 años la inteligencia aumenta rápidamente, los niños pueden absorber más cosas de las que les enseñan en el colegio. Es por eso que esos “genes de la inteligencia” no pueden funcionar en el vacío, necesitan una estimulación ambiental para desarrollarse. Thomas Boutchard realizó trabajos especialmente con gemelos para demostrar ese poder de instinto el cual fue llevado a la luz con el experimento de Beth y Amy, gemelas separadas al nacer, ambas en familias totalmente distintas, pero que luego de un encuentro de 20 años el estudio verificó lo contrario a lo que la educación les enseñó: el poder del instinto. Según el estudio de Boutchard arrojó que el 20% de la inteligencia semejante de dos gemelos puede explicarse por el útero que compartieron. Eso explica la gran diferencia de inteligencia compartida que presentan hermanos que tienen un 5%. La naturaleza, y no la crianza, es lo que exige que no tomemos decisiones fatalistas acerca de la inteligencia de los niños especialmente cuando son pequeños. En la infancia es alrededor de 45% y en la adolescencia 75% la inteligencia heredada reflejada de los padres a sus hijos. A medida que uno se hace mayor, poco a poco va expresando su propia inteligencia innata y deja atrás las influencias que fueron estampadas en él, es por eso que en los niños algunos CI serán altos pero sólo temporalmente. Lo malo de la inteligencia heredad es que no se sabe cuál con exactitud será heredada. Retomando a los trabajos de Plomin, la IGF2R no solo era la de la inteligencia sino que también estaba relacionada con el cáncer de hígado, pero estas solo eran secundarias, su importante acción era el tráfico intracelular de enzimas fosforiladas lisosomales desde el aparto de Golgi y la superficie celular a los lisosomas. Este gen es sumamente largo por los que presenta a veces por intrones lo que probablemente esté relacionado con la diferencia de inteligencia de una persona a otra. EL CI no se hereda sino la capacidad para desarrollar un CI elevado en ciertas condiciones ambientales. Separar esto en naturaleza y crianza es imposible. El efecto Flynn afirma esto. James Flynn observó que el CI está aumentando constantemente en todos los países a un ritmo medio de casi 3 puntos por década. Esto posiblemente se debe a la mejora de la nutrición infantil. Ulric Neisser cree que la causa del efecto Flynn es la intensa saturación de vida cotidiana moderna con sofisticadas imágenes visuales, demostrando que el mundo moderno es un entorno que alienta el desarrollo de una forma de la inteligencia. El niño busca y crea su propio entorno, por lo que si tiene una inclinación por la mecánica entonces practica habilidades mecánicas. En resumen de todo un siglo de debate, la inteligencia puede estar relacionada con la crianza tanto como la naturaleza (genes).

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