Drogas del sistema circulatorio

Farmacología

RESUMEN

Fármacos que afectan al sistema cardiovascular

El desarrollo de compuestos terapéuticos que influencian al sistema cardiovascular ha sido de gran interés y ha desafiado a los científicos a través de los años. Así, actualmente existe un grupo amplio de medicamentos en el mercado con estructuras químicas heterogéneas que deben evaluarse individualmente respecto a toxicidad, reacciones de hipersensibilidad y reacciones adversas (Amos, 1983).

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, los distintos fármacos que afectan al sistema cardiovascular pueden clasificarse en (OMS, 2016):

1. Diuréticos

Pertenecen a la familia de los fármacos anti hipertensivos. Reducen la presión arterial principalmente por el agotamiento del sodio, reduciendo el volumen sanguíneo y el gasto cardíaco. Algunos pueden actuar como vasodilatadores directos (indapamida). Entre sus efectos adversos están hipocaliemia,  alteración de la tolerancia a la glucosa, aumento de lípidos séricos y de la secreción de renina. Ejemplos: metolazona, frusemida, etc (Pasley, 2009).

2. Glucósidos cardíacos

Son fármacos utilizados en el tratamiento de la insuficiencia cardíaca congestiva. Producen un incremento de la contractibilidad del miocardio acorde a si el corazón está en estado normal o en insuficiencia; bradicardia dependiendo del estado del miocardio y la salida cardíaca se incrementa en insuficiencia. Entre sus efectos adversos están las arritmias y efectos gastrointestinales. Los más comunes son digitoxina y digoxina (Khilnani, 2007).

3. Fármacos anti arrítmicos

Estos fármacos influencian la automaticidad o conducción cardíaca. Algunos actúan directamente con canales de Na, Ca o K; mientras que otros alteran el tono autonómico en el corazón, disminuyendo o potenciando influencias adrenérgicas o colinérgicas. Finalizan una arritmia y previenen la re iniciación del desorden. Sin embargo, también pueden causar arritmias. Ejemplos: lignocaína, bloqueadores beta-adrenérgicos, bloqueadores de canales de calcio, etc (Pasley, 2009).

4. Terapéuticos anti hipertensivos 

Disminuyen y mantienen la presión arterial entre sus límites normales con mínimos efectos adversos. Incluye a los vasodilatadores y los alfa agonistas de acción central. Los vasodilatadores bajan la presión arterial relajando los músculos arteriolares lisos, reduciendo la resistencia vascular sistémica. Los últimos disminuyen el tono simpático estimulando alfa2 adrenoreceptores en la médula oblongata. Ejemplos: Hidralazina, Metildopa, etc (Pasley, 2009).

5. Inhibidores de la enzima de conversión de angiotensina (ACE)

Estos fármacos disminuyen la presión arterial principalmente inhibiendo la enzima peptidil dipeptidasa, responsable de la conversión de angiotensinas I a angiotensina II, un potente vasoconstrictor. Pueden causar hipotensión severa, falla renal aguda, tos seca, hipercaleimia y angioedema (Khilnani, 2007).

6. Antagonista del receptor de la angiotensina II

Se utilizan como una alternativa a los fármacos ACE, cuando existen efectos secundarios graves. Usualmente se usan en combinación con ACE  para el tratamiento de insuficiencia cardíaca. Ejemplos: Losartan, valsartan (Jones y Gautam, 2004).

7. Fármacos Anti-anginas

La angina provoca dolor por un inadecuado flujo sanguíneo coronario que no satisface las demandas de oxígeno del corazón. Las principales drogas son a base de nitratos y nitritos que liberan óxido nítrico (NO) que estimula a la guanil ciclasa y Se forma GMPc que activa proteínas kinasas y se fosforilan proteínas implicadas en la disminución de [Ca++] intracelular, lo que se traduce en vaso dilatación. También están los β-bloqueantes que al bloquear los receptores β disminuyen la frecuencia y la contractilidad cardíaca (Rosenfeld, 2007).

8. Adrenergénicos o Simpaticomiméticos

Las drogas simpaticomiméticas, son fármacos que imitan o simulan las acciones del sistema simpático o adrenérgico. Algunas actúan directamente activando los receptores adrenérgicos, a veces selectivamente. Otros fármacos actúan indirectamente, de tal manera que sus efectos dependen del estímulo a la liberación de catecolaminas endógenas que producen. Tienen efectos vasculares, cardiacos y sobre algunos tejidos musculares lisos (Malgor – Valsecia, 2010).

9. Anticoagulantes.

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