EL OCTAVO DÍA

Para esto se intenta establecer la educación como el proceso en que el sujeto accede a su facultad de hacer signo, adquiriendo el lenguaje simbólico, en una relación altero-céntrica con su criador, en experiencias de placer/displacer llamadas afectos que constituyen lo que llamará su realidad.

Georges es un joven adulto con Síndrome de Down que está institucionalizado porque su madre, quien cuidaba de él, ha muerto, y su hermana y cuñado han decidido no cuidar de Georges personalmente. Su edad biológica es la de joven adulto, pero su edad psicológica y social responde a la de un niño y en ocasiones a la de un adolescente, ya que su capacidad de adaptabilidad, sus roles y hábitos sociales son equivalentes a los de una persona muy inferior a la que es realmente.

Él vive en un mundo de fantasía que interrelaciona con la realidad y posee ideas muy propias de cómo funciona el mundo, ejemplo de ello, la introducción que se hace al inicio del filme, donde de manera muy específica se relata cómo fue creado el mundo, desde la percepción de este vivaracho muchacho. Esos momentos donde realidad se cruza con fantasía son vitales para Georges, porque crean un nexo con su pasado y con las decisiones que tomará en su accionar futuro, esto se convierte algunas veces en un conflicto para él, como por ejemplo, cuando escapa del instituto y empieza a vagar sin rumbo, al no tener noción de la realidad y no saber dónde se encuentra. En cosa de segundos se ve perdido en una gran ciudad y sin saber realmente a dónde ir.

A pesar de su condición, Georges no es acomplejado, por el contrario, da ejemplo constante de su enfoque de las cosas, aun haciendo bromas como “¿Yo, Mongol?” riéndose de Harry por haberlo insinuado. Transmite energía y alegría a cualquiera que se le acerque. Inspira júbilo a sus compañeros del instituto y los motiva a “relajarse”, incluso más allá de lo que sus capacidades cognitivas otras personas pudieran juzgar les es permitido pero para ellos resultan más como aventuras que posibles riesgos; muestra de ello es cuando hurtan una camioneta para lograr cumplir “la misión de celebrar el cumpleaños de Julie”.

Desde el punto de vista social, Georges está catalogado como una persona con discapacidad, desde otra perspectiva se podría simplemente decir que es un ser humano con “habilidades diferentes”, que con actos simples y un gran carisma logra demostrarle no sólo a Harry, sino que al mundo entero, el significado de vivir plenamente y lo fantástico que es la vida cuando se eliminan las etiquetas y los obstáculos triviales.

Demuestra empatía por todo ser viviente que se acerque a él. No importa si es una hormiga que intenta seguir su jornada, un perro de la calle que rápidamente adopta como suyo o un extraño al que conoce inmediatamente después de un evento desafortunado.

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