El enfoque sistémico en las ciencias ambientales

Enfoque Sistémico sobre la Movilidad Actual

Daniel Macías

Facultad de Ciencia y Tecnología, Universidad del Azuay

4A-IAM Ecología

Ing. Johanna Ochoa

09 de junio de 2021

Introducción

Existen varios modos de transporte, pero el más peligroso en términos de impacto negativo sobre el medio ambiente se considera el automóvil. Y si hace unas décadas no todo el mundo podía permitirse un vehículo personal, hoy en día se ha convertido en un medio de transporte necesario y bastante asequible para muchas personas. Como resultado, la proporción de contaminantes emitidos a la atmósfera por los automóviles alcanzó el 50%, en comparación al 15% en la década de 1970. Las grandes ciudades pueden inclusive llegar a alcanzar entre el 65-70%. Además, las emisiones aumentan en un 3% aproximadamente cada año, lo que es motivo de preocupación. Según National Geographic (2019) “El 92% de la población mundial viven en lugares en los que se excede en nivel máximo de contaminación atmosférica permitido por la OMS (Organización Mundial de la Salud)”.

Desarrollo

La contaminación ambiental es la presencia de cualquier tipo de material o energía que sea un riesgo, produzca daños, molestias e incluso muertes en la naturaleza. Los componentes que emanan por medio del escape los automóviles durante su funcionamiento van afectando a la atmósfera, aumentando la densidad de las capas inferiores y causando un efecto invernadero. Según la Organización Meteorológica Mundial (2018) “Los niveles de gases de efecto invernadero alcanzaron un nuevo récord en 2018, un año en el que los niveles de dióxido de carbono (CO2) llegaron a 407,8 partes por millón (ppm), frente a las 405,5 ppm de 2017”.

Una vez definida estas variantes podemos hacernos la pregunta ¿En qué y cuánto afecta a la ecología? El efecto invernadero es una amenaza real. Sus posibles consecuencias incluyen el aumento de los niveles de los mares, el calentamiento global, derretimiento de glaciares, que dentro de ellos contienen toneladas de material orgánico y que, si sale de su cápsula, los niveles de contaminación se dispararán, por otra parte, tenemos también los desastres naturales, desgastamiento en la flora y fauna, e incluso causa crisis económica.

Debido al campo de movilidad, y no al transporte terrestre únicamente, sino a los diversos sistemas, como por ejemplo al fluvial, el mismo que causa grandes daños en las masas de agua, destruyendo mediante fuga de productos químicos nocivos volúmenes realmente importantes de agua. Aguas subterráneas, de lagos y ríos se ven afectados, empobreciendo muchos de los ecosistemas ya que no solo mueren peces, sino otros animales y plantas que viven alrededor de estas aguas. Se sabe que la naturaleza es una cadena que dependen unos de otros, en la cual, si cortamos un eslabón de dicha cadena, la misma que desempeña un papel muy importante desde el organismo más pequeño hasta el más grande, todo el sistema ecológico queda afectado inclusive pudiendo llegar a colapsar.

En cuanto al sistema de transporte aéreo, aunque muchos no lo saben, este medio de transporte es el más contaminante. “La aviación comercial es responsable de alrededor del 2-3% de las emisiones globales de carbono”, según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (2021). Aunque parezca algo sin sentido, en el campo automotor, según estudios en el 2016 existían alrededor de 1.32 millones de vehículos en el mundo sin contar vehículos pesados ni todoterreno (Wards Intelligence, 2016). Por otro lado, el número de aviones para ese año era de apenas 39.620 (Global Market Forecast for 2016-2035, 2016). Es decir, 29 aviones por cada mil vehículos. Pero, ¿Por qué contaminan más? Como mencionamos anteriormente, en el proceso de combustión, no toda la mezcla estequiometria aire-combustible es quemada, por lo que los motores mediante la fase de escape emanan CO2, los mismos que causan los Gases de Efecto Invernadero. Ahora imagínense un vuelo de Londres a Nueva York que consta aproximadamente de 5.564 km, un avión emite un estimado de 0.7 Toneladas de CO2 por pasajero (Organización de Aviación Civil Internacional, 2019). Sin embargo, la altura de vuelo de un avión es directamente proporcional a los niveles de contaminación.

Una alternativa que muchos piensan es la mejor, es la de los vehículos eléctricos, sin embargo, no es algo que realmente es cierto en su totalidad. Si vamos desde el punto en donde tomamos la energía para hacer funcionar un vehículo eléctrico, los niveles de contaminación son grandes ya que no todos los países tienen fuentes de energía renovables, sino, fuentes de energías que utilizan combustibles fósiles o nucleares. Por otra parte, tenemos los materiales que componen el vehículo, muchos de ellos vienen del petróleo, y no se diga los niveles de contaminación que emiten las baterías, no debido a lo emitido mientras funciona en el vehículo, sino al ser reciclada la misma. Según Nissan (2020):

...