INCIDENCIA DE LA CAPACIDAD RESOLUTIVA RESPECTO A LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL EN EL CENTRO DIAGNÓSTICO INTEGRAL “FE Y ALEGRÍA” EN LOS ADULTOS MAYORES. CUMANÁ, 2021

República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria

Universidad Nacional Experimental Rómulo Gallegos

Facultad de Medicina

Sede “Dr. José Gregorio Hernández”

Maturín, Edo Monagas

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INCIDENCIA DE LA CAPACIDAD RESOLUTIVA RESPECTO A LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL EN EL CENTRO DIAGNÓSTICO INTEGRAL “FE Y ALEGRÍA” EN LOS ADULTOS MAYORES. CUMANÁ, 2021.

             Docente:                                                                           Bachiller:

       Dr. José Sucre                                                                  Daniel José Rivero

              Área:                                                                          C.I: 30.804.329

Metodología de la Investigación                                                    Sección 9

Octubre, 2021.

CAPÍTULO I

EL PROBLEMA

CONTEXTUALIZACIÓN DEL PROBLEMA

        Las enfermedades cardiovasculares, entendidas en términos generales como todas aquellas patologías que afectan al corazón, arterias y vasos, pertenecen al grupo de padecimientos crónicos no transmisibles cuyas características de elevada prevalencia las convierte en un problema de salud pública que afecta tanto la calidad de vida de las personas como el funcionamiento de la sociedad en general; en esencial, una de las enfermedades cardiovasculares más prevalentes es la hipertensión arterial, teniendo está  a su vez caracteres distintivos de las demás enfermedades cardiovasculares.

        Según la Organización Mundial de la Salud (2019), las enfermedades cardiovasculares en general “se refieren a las condiciones que implican el estrechamiento o bloqueo de los vasos sanguíneos, causada por daño al corazón o a los vasos sanguíneos por aterosclerosis” (p.15). Estos a su vez con dicha definición hacen hincapié en todas aquellas enfermedades de origen cardiaco que se relacionan a su vez con los vasos sanguíneos del mismo.

        Teniendo en cuenta lo anteriormente postulado, se es de dar a entender que finalidad del presente estudio es dar a conocer la incidencia que tiene la capacidad resolutiva de los centros asistenciales en cuanto a una de las enfermedades cardiovasculares más prevalentes “la hipertensión arterial” con orientación hacia los adultos mayores. Teniendo como meta incrementar de forma exponencial los conocimientos sobre dicha capacidad resolutiva se hará un estudio en adultos mayores que además de llegar a sufrir de hipertensión, también tienen su propia concepción del cómo es la capacidad resolutiva en cuanto a la hipertensión del centro asistencial; dicha investigación de carácter cualitativo se dará a cabo en la ciudad de Cumaná del Estado Sucre. Aludiendo al tema principal podemos definir a la hipertensión como una enfermedad cardiovascular que en pocas palabras se basa en una presión bastante alta que ejerce la sangre sobre la pared arterial mediante el proceso de sístole, y por consecuente las paredes de las arterias tienden a tener una tensión más alta; según la Organización Mundial de la Salud (OMS), (s.f) “La hipertensión es un trastorno por el cual los vasos sanguíneos tienen persistentemente una tensión elevada. La sangre se distribuye desde el corazón a todo el cuerpo por medio de los vasos sanguíneos. Con cada latido, el corazón bombea sangre a los vasos. La tensión arterial se genera por la fuerza de la sangre que empuja las paredes de los vasos sanguíneos (arterias) cuando el corazón bombea. Cuanto más alta es la tensión, más dificultad tiene el corazón para bombear.” Según estas afirmaciones la hipertensión no es más que la fuerza con que la sangre choca contra las paredes arteriales.

        Por su parte, la hipertensión arterial se clasifica en dos tipos: Hipertensión Primaria e Hipertensión Secundaria. La hipertensión primaria no suele tener causas adyacentes ni identificables, solo se tiene conocimientos que se va produciendo por el pasar de los años. La hipertensión secundaria por contraparte se suele originar por una enfermedad subyacente, este tipo de hipertensión tiende a aparecer repentinamente y causa una presión arterial más alta que la hipertensión primaria. Diversos trastornos y medicamentos pueden producir hipertensión arterial secundaria, entre ellos: Apnea obstructiva del sueño, enfermedad renal, tumores de la glándula suprarrenal, problemas de tiroides, ciertos defectos congénitos en los vasos sanguíneos, ciertos medicamentos (como las píldoras anticonceptivas, los antigripales, los descongestionantes, los analgésicos de venta libre y algunos medicamentos con receta médica)  y drogas ilícitas (como la cocaína y las anfetaminas). Estos factores a su vez van ligados a ciertos factores de riesgo como: raza, antecedentes familiares, edad, etc.

        En cuanto a sus síntomas, se tiene conocimiento que en muchos casos está enfermedad puede ser asintomática, siendo que la mayoría de las personas con presión arterial alta no tienen signos ni síntomas propiamente dichos, incluso si las lecturas de presión arterial alcanzan niveles peligrosamente elevados (200/90 mmhg por ejemplo); si en dado caso llegase a presentar síntomas los más comunes son dolor de cabeza, dificultad para respirar y sangrado nasal, pero estos signos y síntomas no son del todo específicos y por lo general, no se presentan hasta que dicho trastorno alcanza una etapa grave o potencialmente fatal, aludiendo esto último a las consecuencias de la misma si no se trata con prontitud, pudiendo causar: trastornos del ritmo cardiaco, arritmia, infarto del miocardio, entre otros.

        Con orientación a su tratamiento, primeramente se ha de tener en cuenta que el mejor tratamiento para la hipertensión es cambiar el estilo de vida, tal como exclamo Benjamin Franklin en una de sus frases más celebres “los mejores doctores dan poca medicina”; por tanto es posible que el médico te recomiende hacer cambios en el estilo de vida, que incluyen: seguir una dieta saludable para el corazón con menos sal, hacer actividad física con regularidad, mantener un peso saludable (según los estándares), limitar la cantidad de alcohol que bebes, entre otros factores inhibidores en la salud humana, si bien, en ocasiones no solo cambios en el estilo de vida son suficientes, por lo cual se debe acudir a medicamentos para bajar la presión arterial, y estos recetados son dependientes tanto de tu salud general como de la gravedad de la hipertensión y usualmente se usan dos o más medicamentos con sinergia en busca de un mejor resultado. Los medicamentos que se utilizan para tratar la presión arterial alta suelen ser los siguientes: Diuréticos, Inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (ECA), Antagonistas de receptores de la angiotensina II y Bloqueadores de los canales de calcio. Como ya se hizo mención, se usan comúnmente dos o más de estos medicamentos para generar una sinergia y finalmente un mejor tratamiento, esto se deja en manos de un profesional de la salud ya que ciertos medicamentes en vez de realizar un efecto de sinergia, puede causar uno antagonista o agonista.

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