REFLEXIÓN SOBRE LA VIABILIDAD DE LA ENSEÑANZA POR COMPETENCIAS EN LA EDUCACIÓN AMBIENTAL"

El trabajar bajo el enfoque por competencias aún se torna un tanto difícil para muchos docentes, esto radica en que la formación que muchos tuvimos fue bajo enfoques más tradicionalistas y conductistas, por tal motivo esta transición esta transición de modelo educativo se hace más complicada, que si bien sigue observándose el mismo objetivo, el enfoque desde donde se aborda es el que dificulta de algún modo este proceso.

El trabajar desde este enfoque por competencias tiene grandes beneficios, siempre y cuando si se aplica como debe de ser, muchos docentes creen que, dentro de este esquema el alumno debe ser autodidacta en su totalidad, aprendiendo lo que le llama la atención y que le es significativo, y no está errado del todo, pero en este aprendizaje el alumno necesita un guía para poder movilizar y entender todo ese conocimiento, para que vaya aprendiendo a su ritmo y bajo estrategias que le permitan desarrollar y aplicar todos los conocimientos adquiridos.

Creo que abordar la educación ambiental desde este enfoque por competencias es muy viable y positivo, ya que permitirá al alumno y al docente crear conciencia ambiental y ecológica en ellos mismos primeramente y en su entorno inmediato, para posteriormente aplicarlo a su medio social, con una fundamentación teórica bien cimentada que les permitirá desarrollarse y desenvolverse de manera fluida y específica sobre el tema, generando así en las personas que componen su entorno, una ética ambiental, que ayude a mejorar las condiciones del lugar donde viven y se desarrollan diariamente y en sus contextos y sociedad a la que pertenecen.

Independientemente de las diversas concepciones, se debe de educar al niño en un ambiente donde sea el alumno quien construya sus aprendizajes, se comunique, fortalezca sus valores y aplique en su vida diaria lo que le es significativo y que le puede apoyar para salir adelante. Lo cual es posible abordar con una didáctica crítica, analítica y reflexiva, en otras palabras a través de las competencias, ya que de esta manera él podrá solucionar los problemas que aquejan al medio ambiente y que le afectan a corto y mediano plazo.

Entonces, podemos concluir que manejar la educación ambiental desde una enseñanza por competencias es totalmente viable, siempre y cuando el docente tenga la formación profesional desde este mismo enfoque, por competencias, ya que de no ser así, podría generar ciertas dificultades dentro del desarrollo de los temas y en el cumplimiento de los objetivos planeados.

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