Un Moore- unidad 2 y 7

Moore:

El feudalismo occidental contuvo ciertas instituciones que lo distinguieron de otras sociedades en el sentido da favorecer las posibilidades democráticas. El aspecto más importante fue que se desarrollara la noción de la inmunidad de ciertos grupos y personas al poder del soberano, así como la del derecho de resistir a la autoridad injusta. Justo con la del contrato como un compromiso mutuo libremente convenido por personas libres, derivada de la relación feudal de vasallaje, todo ese complejo de ideas y prácticas constituye un legado decisivo de la sociedad europea medieval a las modernas concepciones occidentales de una sociedad libre.

La persistencia de un régimen burocrático preindustrial hasta tiempos modernos ha creado condiciones desfavorables a la democracia del tipo occidental. En los siglos XVI y XVII se establecieron poderosos gobiernos, en todos los países de primer orden, a saber Inglaterra, Francia, Rusia, China, Japón e India. Las instituciones monárquicas fuertes cumplieron al principio una función indispensable: refrenar la turbulencia de la nobleza.

Otra precondición decisiva para la democracia moderna, ha sido el establecimiento de cierto equilibrio entre la corona y la nobleza, en que el poder real predominaba, pero dejando un alto grado de independencia a la nobleza. En Inglaterra, la guerra de las dos rosas diezmo a la aristocracia rural, hizo considerablemente más fácil el establecimiento de una forma de absolutismo real bastante más moderada que en Francia. Vale la pena recordar que el logro de tal equilibrio ha sido el fruto de métodos violentos y revolucionarios.

La tesis marxista de que una clase urbana vigorosa e independiente ha sido un elemento indispensable en el desarrollo de la democracia parlamentaria. Sn burguesía no hay democracia.

En el sistema europeo de la Edad media, el señor feudal retenía para sí cierta porción de su dominio. Los campesinos se la labraban en compensación de que le señor los protegía y administraba justicia. Los campesinos explotaban otra porción de la tierra señorial, donde cultivaban plantas comestibles para las necesidades familiares y tenían sus moradas. El desarrollo del comercio en las ciudades y las exigencias tributarias de los gobernantes absolutistas  acarrearon que le señor necesitara más y más dinero. La aristocracia rural inglesa tendió a adoptar una forma de agricultura comercial que implicaba soltar a los campesinos para que se las arreglaran por sí mismos. En las zonas donde paso a practicar el comercio, los campesinos debían entregar una parte de su producto, que  después el noble venda. La tercera variante, la reacción feudal, redujeron a los campesinos anteriormente libres a la servidumbre para cultivar y exportar granos.

En muchas regiones de Francia, la agricultura comercial altero poco la sociedad campesina, pero saco más del campesinado, con lo que contribuyó al avance de fuerzas revolucionarias. En los EEUU, el esclavismo de plantación fue un aspecto importante del desarrollo capitalista.

La transformación del campesinado en algún otro tipo de formación social parece augurar lo mejor a la democracia. Los campesinos han venido a ser parte de sistemas democráticos fracias a la práctica de formas bastantes especializadas de agricultura comercial.

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