Vatel

La preparación de un banquete no solo incluye -para Vatel- tener la comida lista; va desde preparar platillos únicos y excéntricos, llenos de color y glamour hasta organizar el banquete como toda una magna fiesta, donde el arte (pintura, escultura, danza, teatro, etc) juega un papel de trascendencia para la perfecta presentación y degustación de los alimentos en un entorno propio de un cuento de hadas. En pocas palabras, sin importar quién es el comensal principal, el Chef Vatel pone todo su empeño y dedicación para lograr el objetivo, un banquete perfecto, brillante, fantasioso y elegante en todos los sentidos ya que los detalles a la hora de presentar los alimentos eran minuciosamente vigilados y procurados.

Vatel era como pez en el agua en la cocina, en ese entonces, las cocinas parecían un gran mercado, lleno de alimentos frescos que los proveedores entregaban para la elección del cocinero. Por supuesto, tener los mejores ingredientes implica el correcto manejo de negociación con los proveedores, no solo para obtener lo mejor, sino también para obtener lo mejor al mejor precio con las mejores “promociones”

En la cocina (su mundo) Vatel era el Jefe, y como en cualquier cocina, el chef tiene que aprobar todo. Los cocineros debían mostrar al chef los platillos preparados para su aprobación en presentación y sabor.

Personalmente lo que la película me mostró es una serie de características ideales que cualquier Chef debe tener para lograr el éxito como lo obtuvo Vatel, las cuales listo a continuación....

Vatel

Vatel fue aprendiz de un gran chef de su época; con el tiempo, el logro convertirse en uno de los mejores Chefs de la región, reconocido por su don en gran arte de la comida.

Vatel no solo fue un exitoso cocinero de la realeza, sino un jefe, un supervisor, un líder involucrado con su personal, un hombre organizado y creativo, un buen administrador y excelente maestro para quienes desean aprender el mundo de la transformación de los alimentos.

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