Escuela de derecho, criminalistica Informe

[pic 1]UNIVERSIDAD FERMIN TORO

VICE-RECTORADO ACADEMICO

FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICAS

ESCUELA DE DERECHO, CRIMINALISTICA

INFORME.     

Temas 8 y 9.

    AUTOR

José Aguilera

C.I. V-28.399.105

Barquisimeto, Abril del 2023. 

Interpretación previa de la escena del crimen.

La interpretación previa de la escena del crimen es una técnica utilizada en la criminalística para analizar y comprender la escena del crimen antes de que se realice cualquier tipo de recolección de evidencia. Consiste en una inspección cuidadosa del lugar del delito por parte de los investigadores, con el fin de identificar posibles pistas o evidencias que puedan estar presentes.

Durante la interpretación previa de la escena del crimen, los investigadores pueden hacer observaciones detalladas sobre el entorno, como la ubicación y posición de objetos, el tipo de daño o lesiones presentes, la posible ruta de entrada o salida del perpetrador, entre otros detalles que puedan ser relevantes para la investigación. Una interpretación previa cuidadosa de la escena del crimen puede proporcionar información valiosa sobre los eventos que ocurrieron y la posible secuencia de los mismos, lo que puede ayudar a los investigadores a determinar la identidad del perpetrador, el tipo de delito cometido y otros detalles importantes de la investigación

Vinculación Victima – Victimario.

La vinculación víctima-victimario es una técnica utilizada en la criminalística para establecer una conexión entre la víctima y el posible perpetrador de un delito. Esta técnica se basa en la idea de que la víctima y el perpetrador pueden estar conectados de alguna manera, ya sea a través de una relación personal, laboral, financiera, emocional, entre otras posibilidades.

Esta se utiliza en la investigación de delitos como homicidios, secuestros, extorsiones y otros crímenes graves. Los investigadores pueden utilizar una variedad de técnicas para establecer una posible conexión entre la víctima y el perpetrador, incluyendo el análisis de las relaciones personales y sociales de la víctima, la investigación de su historial financiero, la revisión de sus perfiles en redes sociales, el análisis de llamadas y mensajes de texto, entre otras técnicas.

Puede fungir como una herramienta valiosa en la investigación de delitos, ya que puede ayudar a los investigadores a identificar posibles sospechosos y a enfocar sus esfuerzos en las áreas más relevantes de la investigación. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta técnica no siempre es infalible y que pueden existir casos en los que la víctima y el perpetrador no tienen ninguna conexión aparente.

Sitio o lugar del suceso.

El sitio del suceso es el lugar donde se ha cometido un delito o un hecho que está siendo investigado por la policía o las autoridades judiciales. También se le conoce como escena del crimen o lugar del hecho. Este es un lugar clave en la investigación criminal, ya que puede proporcionar importantes pistas y evidencias que pueden ayudar a los investigadores a resolver el caso. Por esta razón, es fundamental que se preserven las condiciones del lugar del suceso y se recolecte toda la evidencia posible antes de que se altere o se pierda.

El sitio del suceso puede variar en tamaño y complejidad, desde una simple residencia o negocio hasta un área extensa al aire libre. En cada caso, es importante que los investigadores se tomen el tiempo necesario para realizar una inspección detallada y sistemática del lugar del suceso, y documenten cuidadosamente cualquier hallazgo relevante.

La evidencia recolectada en el sitio del suceso puede incluir huellas digitales, ADN, armas, objetos y otros elementos físicos que puedan estar relacionados con el delito. También puede incluir testimonios de testigos oculares y cualquier otra información que pueda ser relevante para la investigación.

Indicios.

Los indicios son elementos materiales encontrados en la escena del crimen que pueden ser utilizados como evidencia para ayudar a resolver un delito. Los indicios pueden ser cualquier cosa que tenga relación con el delito, como huellas digitales, cabello, sangre, huellas de pisadas, manchas, restos de cuerpos, objetos, entre otros elementos. Estos pueden ser directos o indirectos. Los indicios directos son aquellos que son directamente relacionados con el delito y pueden ser fácilmente identificados, como las huellas digitales o el ADN del sospechoso. Los indicios indirectos son aquellos que no están directamente relacionados con el delito, pero pueden ser utilizados para inferir o deducir información, como los patrones de tráfico en la escena del crimen que pueden indicar la ruta de escape del delincuente.

Es importante que los indicios sean cuidadosamente recolectados y preservados por los investigadores de la escena del crimen, para garantizar su integridad y evitar la contaminación o alteración de la evidencia. Los indicios pueden ser analizados y procesados en un laboratorio forense, donde los expertos pueden utilizar técnicas avanzadas para extraer información valiosa de los mismos.

Tipos de indicios.

Los indicios sostienen una clasificación de acuerdo a las características propias que se les atribuyan, siendo clasificados de la siguiente manera.

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