Inventario de adolescentes del MMPI-A

INTRODUCCION

Existen pocos instrumentos creados específicamente para evaluar a este estrato; dos de ellos son el Inventario Multifásico de la Personalidad de Minnesota (MMPI), el cual ha sido adaptado a la población mexicana (Lucio, Ampudía y Durán, 1998), y el Cuestionario de Sucesos de Vida (CSV) (Lucio y Durán, 2003).

Estudios recientes han utilizado el Inventario Multifásico de la Personalidad de Minnesota para adolescentes (MMPI-A) en diferentes áreas, como los que abordan los problemas relacionados con el uso de alcohol y drogas, que han concluido que este instrumento es confiable para medir dichos problemas (Aharoni, 1999; Sirigati, 2000).

Czar, (2001) estudió diferentes patologías con una muestra de delincuentes juveniles y halló que las escalas del MMPI-A discriminaban entre las patologías padecidas por esta muestra.

En otro estudio (Hammel, 2001) se examinaron las escalas de contenido y de validez con una muestra de delincuentes de sexo femenino; los resultados mostraron que tales escalas son útiles para evaluar las características de este grupo.

También cabe mencionar que hay estudios realizados con diferentes grupos étnicos, como el de Sirigati (2000) con una muestra italiana, en el cual se concluyó que existen diferencias culturales en cuanto al uso del inventario con esta muestra,

Asimismo, Gómez, Johnson, Davis y Velásquez (2000) realizaron un estudio con un grupo de adolescentes afroamericanos y mesoamericanos que habían delinquido por primera vez, concluyendo que el MMPI-A puede ser utilizado en diferentes muestras de adolescentes de diferentes países y que es confiable en ellos, aunque requiere de adaptaciones para su uso.

Aunque existen datos sobre la confiabilidad y la validez del MMPI-A, es necesario hacer más investigaciones al respecto que abarquen diferentes muestras de adolescentes de habla hispana para lograr ampliar los datos que sustenten a este inventario.

Lucio, León, Durán, Bravo y Velasco (2001) llevaron a cabo una investigación en una muestra de 1,071 adolescentes para determinar los sucesos de vida en dos grupos de adolescentes de nivel socioeconómico alto y bajo, con edades de entre 13 y 18 años (media de 15).

Concluyeron que hay diferencias entre el modo de evaluar los sucesos estresantes entre los diversos grupos dependiendo de su edad y nivel socioeconómico.

                                            LOS METODOS

SUJETOS

La muestra estuvo compuesta por 105 adolescentes mexicanos que fueron seleccionados al azar de entre 1.200 personas extraídas de dos escuelas.

Las personas de cada cinco, también se eligen al azar. Se utilizó un método de muestreo aleatorio simple (Campbell y Stanley, 1966). Se excluyeron nueve cuestionarios por no cumplir con los criterios de inclusión, los cuales se utilizaron en el MMPI-A y CSV; Por tanto, la muestra final estuvo formada por 96 sujetos, de los cuales el 61,5% eran mujeres y el 38,5% eran hombres. Tienen edades comprendidas entre los 16 y los 18 años, con una media de 16,7.

INSTRUMENTOS

MMPI-A es una herramienta de autogestión con 39 escalas de validez, clínica, contenido y complemento, traducida y estandarizada para adolescentes mexicanos por Lucio et al. (1998). Es una herramienta de lápiz y papel que consta de 478 piezas. Su revisión incluye nuevos datos para la estandarización, reescritura y reemplazo de entradas antiguas, creación de puntajes t estandarizados, desarrollo de nuevas métricas de asimetría y métricas F (Fp) adicionales, así como el desarrollo de nuevas métricas de contenido (Butcher, Williams, Graham et al., 1992). Para investigar la relación entre los rasgos de personalidad y los eventos de la vida y cómo pueden afectar a los adolescentes a medida que se desarrollan, se utilizó CSV (Lucio y Durán, 2003). que consta de 129 ítems y una pregunta abierta, evalúa de manera confiable siete dominios: Familia (Fam), Social (Soc), Personal (Per), Trastorno de conducta (Pco), Logro y fracaso (LyF), Salud (Sal) y Escuela (Esc). La confiabilidad general del instrumento es 0.89 (Lucio y Duran, 2003).

  PROCEDIMIENTO

Los 105 participantes de este estudio se reunieron en grupos de 25 adultos jóvenes, con dos solicitantes cada uno. Para evitar valores atípicos, se utilizaron las mismas aplicaciones para todos los grupos. Respondieron a MMPI-A en la primera sesión y CSV en la segunda sesión una semana después. Luego, los instrumentos se leyeron con un lector óptico, luego se registraron con software de computadora y se analizaron usando el Paquete Estadístico para Ciencias Sociales (SPSS) (Nie, Hull, Steinbrener, Jenkins & Brent, 1985).

Se obtuvo la correlación de Pearson entre los dominios del Cuestionario de Eventos Negativos de la Vida y las escalas del Inventario Multifásico de Personalidad de Minnesota (MMPI-A), para encontrar la relación entre el método de los rasgos de personalidad, la presencia de problemas y los eventos de la vida que pueden afectar al adolescente. durante su desarrollo.

                                                 RESULTADOS

Las correlaciones halladas entre sucesos de vida y las escalas de validez del MMPI-A de un grupo de mujeres adolescentes se muestran en la Tabla 1.

Tabla 1. Correlaciones entre sucesos de vida y las escalas de validez del MMPI-A de un grupo de mujeres adolescentes (n = 59).

*Nivel de significancia al .01.

En cuanto a los sucesos del área personal negativa, se encontraron también algunas correlaciones con áreas que indican reconocimiento de malestar y psicopatología; la correlación más alta ocurrió entre la personal negativa y la esquizofrenia.

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