Sexting y ciberbullying

Sexting

     El sexting es compartir información privada por distintas plataformas digitales (redes sociales, aplicaciones de mensajería, etc.), ya sea texto (donde se expongan secretos personales, hechos vergonzosos, etc.), fotos o videos con desnudos completos o parciales, sin tomar en cuenta los riesgos potenciales de la viralización de esos contenidos y el impacto que puede tener en su vida personal en el futuro a corto o largo plazo.

     Los más vulnerables a este tipo de prácticas son los adolescentes, ya que se combina la curiosidad propia del despertar sexual, es deseo de ser percibido por los demás como una persona atractiva, la propia psicología transgresora de esa edad y el constante acceso a la red. Todo esto se combina en que no son totalmente conscientes de los peligros potenciales que existen y de la amplitud del impacto que puede tener en su vida estas acciones.

     El problema ante la viralización de imágenes es muy complejo, ya que no sólo circulan por páginas de internet sino que también por mensajería y redes sociales. Con lo cual, una vez viralizada, el contenido es casi imposible hacerlo borrarlo.

Ante un caso de sexting algunas de las medidas a tomar podrían ser las siguientes:

• Debatir con los alumnos para formar conciencia de los peligros que implican este tipo de actividades.
• Mostrar las distintas estrategias que se utilizan para robar este tipo de datos sensibles y la forma de reforzar su seguridad tanto en la red como en los dispositivos, ya que estos pueden ser robados junto con la información que contienen.
• Generar conciencia y repudio ante las acciones de reenviar o compartir imágenes privadas donde se duda del consentimiento de la persona que aparece en él.

Ciberbullying

     Es el acto de discriminación y hostigamiento hacia menores de edad. El medio por el cual se ejerce son las redes sociales, aplicaciones de mensajería, etc. Para que sea considerado cyberbullying se deben dar dos factores importantes:

* Debe ser una acción que sea sostenida en el tiempo;

* Que la intencionalidad sea difamar o discriminar mediante la publicación de contenidos digitales, por ejemplo, memes.

     Uno de los principales inconvenientes de este tipo de prácticas es el anonimato y la accesibilidad de quien las practica, ya que pueden realizarse a toda hora y desde cualquier ubicación, sumado a la viralización del contenido y que distintos usuarios se sumen al hostigamiento.

Se pueden destacar cuatro tipo de actores en esta situación:

•  El acosador;
• El acosado;
• El ayudante del acosador;
• Los espectadores de los hechos.

     Los roles no son fijos y en poco tiempo un niño/a o adolescente puede pasar por varios de ellos.

     Al igual que en el sexting, y en todas las actividades de la red, una vez que se inicia la difusión de materiales es casi imposible borrarlo de la red.

     Ante un caso de cyberbullying algunas de las medidas que se podrían tomar son las siguientes:

• Concientizar acerca de la difusión de información sensible en la red, ya que la misma puede ser utilizada en este tipo de prácticas y que el perfil digital del sujeto está estrechamente vinculado a su perfil real.
• Desalentar este tipo de prácticas, no sumarse a la difusión y debatir en la toma de consciencia en que cualquiera puede ser víctima de este tipo de actividades.
• Enseñar técnicas y estrategias para proteger la privacidad de la información como bloqueos, perfiles personales privados, encriptación, etc.

     Ya, como una digresión personal, creo que el factor fundamental en este tipo de actividades es el social. La magnitud del impacto de este tipo de prácticas depende en gran medida de las personas y sus acciones. Es fundamental e imperioso formar consciencia que cualquiera de nosotros puede ser víctima y que la imagen que hoy difundimos, mañana podría ser la nuestra o de algún ser querido, entender que de lo social depende la gravedad del acoso. Haciendo una analogía con la pandemia actual, aislarse de estas acciones y no reproducirlas es la mejor forma de detenerlas.

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