El Lenguaje

El lenguaje, ¿nuestro lenguaje?

ELABORADO POR: Juan Manuel

González Ocampo

¿Qué sabemos del lenguaje? ¿Hasta donde abarca todo eso a lo que llamamos lenguaje? ¿Qué influencia tiene el lenguaje en la educación? Son preguntas muy interesantes, que abarca demasiados temas de estudio. Es muy importante conocer nuestra lengua, pero es más importante darle un buen uso a nuestro lenguaje, experimentar y darle paso a lo nuevo.

En las siguientes cinco cuartillas expondré las diversas inquietudes que se manifiestan dentro de todo lo que implica el lenguaje. Mencionaré diversos autores involucrados también en el trabajo que implica comprender al lenguaje y lo complejo que resultó ser darle una interpretación en la realidad y por la crisis y el desfallecimiento que ha sufrido.

Todo lo que nos rodea, ciertamente, tiene que ver con el lenguaje José María Valverde nos menciona que “el lenguaje es el horizonte general de todo” y tiene razón, sin el lenguaje nada podría ser posible, las ciencias, la música, el arte, etc., ya que éstas parten del lenguaje mismo. En sí todo lo que nos rodea parte de un lenguaje y por tanto también nosotros partimos de un lenguaje, éste mismo es la raíz la cual se ocupa de diversas formas de generar cualquier tipo de lenguaje.

El lenguaje se ha convertido en un objeto propio, tomando mayor importancia de lo que se le podía haber dado, pasando a ser una disciplina autónoma llamada filosofía del lenguaje. Tan importante ha sido la interpretación del lenguaje que muchas teorías filosóficas se encargan de estudiar las cosas desde una base, buscando el principio de todo, que es el lenguaje, como por ejemplo la teoría del conocimiento ha pasado de ser critica de la razón a ser critica del lenguaje, la antropología filosófica ha pasado a considerar al hombre como una entidad lingüística y a estudiar las correlaciones entre lenguaje y cultura, y así podemos mencionar algunas más que parten de este mismo estudio incluyendo al lenguaje parte de éste.

El lenguaje pasa a ser parte de todo éste gran objeto de estudio ya que estamos pasando por una crisis del lenguaje en donde a dejado de ser cómodo, a dejado de ser nuestro propio lenguaje y nos encontramos en un punto en el que nuestro lenguaje se ha convertido en el horizonte del todo y esto quiere decir que desconocemos muchas cosas de nuestro lenguaje lo cual nos lleva a ignorar gran parte de éste, ciertamente utilizamos la parte del lenguaje mas lastimada, repetida, las mas escuchada, la parte que ya no nos dice nada, desde el punto en el que solo oímos lo que entendemos, solo oímos lo que ya sabemos. Todo esto viene siendo consecuencia del uso inadecuado que le hemos dado al lenguaje, llevándonos al desfallecimiento de nuestro lenguaje, llegando al punto en el que ya no avanza se estanca y se convierte en un círculo vicioso.

Menciona Jorge Larrosa “el lenguaje no es una cosa entre las cosas, sino la condición de todas las cosas” creo que es muy claro al decir que es la condición de todas las cosas porque como ya mencionaba anteriormente a partir del lenguaje parten todas las cosas y es a partir de este mismo lenguaje por el que nombramos las cosas. Pero García Calvo menciona algo muy interesante sobre el lenguaje, “cuando se utiliza el lenguaje es él el que está hablando, no puede propiamente hablarse de él, y si se habla de él, es que ya no es aquel que estaba hablando” desde mi punto de vista interpreto esto como por ejemplo en una conversación entre varias persona, se utiliza el lenguaje, ya que es el medio por el cual se comunican, expresan emociones, etc., en el momento en el que se habla del lenguaje y comenzamos a referirnos a éste deja de ser, para convertirse en objeto, en una cosa. El lenguaje es lo que condiciona las cosas, llegando al punto en el que llega a convertirse en una de ellas.

El lenguaje está en todo, es parte de todo, el lenguaje es incondicional, el lenguaje forma parte de la educación misma ya que mediante éste adquirimos la gran habilidad de poder escribir, leer, hablar y entender. Es tan importante el uso del lenguaje dentro de la educación para poder ir adquiriendo conocimientos, construirlos y expresarlos mediante el lenguaje, convirtiéndose en el punto de partida para poder realizar lo antes mencionado. Para que esto se lleve a cabo es necesario hablar e interpretar de la misma manera el lenguaje.

Nietzsche dice “El hombre, ese animal inteligente que invento el lenguaje y el conocimiento, constituye, en la naturaleza, una excepción lamentable, vaga, fugitiva, inútil y arbitraria. El lenguaje y el conocimiento son solo humanos, demasiado humanos, meros instrumentos de supervivencia de un ser causal, y para nada trascendentes a la vida humana. El lenguaje y el conocimiento no son otra cosa que productos del instinto de conservación de ese animal débil y poco robusto que es el animal humano y expresiones de su vida sobre la tierra, de sus modos particulares de existencia”. Nietzsche habla del ser humano como un ser que utilizó e invento (por decirlo de alguna manera) el lenguaje para denominar las cosas aun así no sean tal y como las denominamos. Según esto hemos tenido la necesidad de denominar y ponerle nombres a las cosas para reconocerlas, para reconocer a que nos referimos y también para referirnos a algunas cosas que denominamos como buenas y malas, siendo que en realidad ¿Por qué decimos que algo es bueno o es malo? ¿Por qué decimos que algo es mentira o es una verdad? Cuando simplemente resultan ser nada más que simples metáforas, quién nos afirma que en realidad las cosas son así. Conviene decir que por la necesidad de haber creado un nombre, una designación para todas las cosas, ya estamos familiarizados con los conceptos a los que nos referimos y de alguna u otra forma no hay quien nos diga por qué en realidad todo tiene nombre, porque se le designo y por que no puede llamarse de otra forma.

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