El mito Aymara-Inca de la creación
Enviado por fer_3000 • 3 de Marzo de 2015 • Ensayo • 878 Palabras (4 Páginas) • 887 Visitas
En su paciente trabajo de creación Apu Kollana Awqui concibió a los animales: llamas, peces vicuñas, zorrinos pájaros y a todos les dio un dominio. Más tarde engendró a otro ser que estaría a cargo de lo que había creado: modeló en piedra una imagen como él y sopló poniendo agua dentro de la piedra, lo llamó jaque (hombre). Pasó el tiempo y para que jaque no estuviera solo extrajo savia de las plantas más hermosas y con ella amasó y modeló una imagen; sacó la costilla más pequeña al hombre y la metió dentro de la imagen: con un soplo creó a warmi (mujer). Les dijo al jaque y a la warmi que poblaran el altiplano, teniéndolo como el sitio más sagrado. Después Apu Kollana Awqui se dirigió a una montaña muy alta a continuar ordenando las costumbres y las maneras de vivir de los seres que había creado.
Dicen los antiguos que el creó un linaje de gigantes que habitaban en un universo oscuro los cuales, dadas esas particulares condiciones obscuras de vida, decayeron en sus costumbres y tradiciones, motivo por el cual el soberano decidió destruirlos con un diluvio llamado Unu Pachaquti, que quiere decir "el agua que transformó el mundo". A quienes sobrevivieron los convirtió en piedras.
Una vez pasado el diluvio y secada la tierra el soberano determinó poblarla por segunda vez creando luminarias que diesen claridad. Para ello fue al gran lago Titicaca y mandó que desde allí salieran el Sol, la Luna, las estrellas y subiesen al cielo para iluminar el mundo. Dicen los abuelos que durante mucho tiempo la luna tuvo más claridad que el Sol, por lo que éste echó un puñado de ceniza en su cara bajando su intensidad y obscureciendo su superficie.
Cuentan que desde el sur apareció Tunupa o Wiraquchan el enviado de Wiraqucha quien mostraba gran autoridad. Vestía una túnica andrajosa que le llegaba hasta los pies, traía un báculo como los que llevaban los chamanes-astrónomos antiguos y llevaba a cuestas un bulto en el que transportaba los dones con los que premiaba a los pueblos que lo escuchaban.
Luego se dirigió a Tiawanaku obrando maravillas por el camino, invitando a los habitantes a salir de sus Pacarinas, lagos, valles, cuevas, peñas y montes y a medida que esto sucedía pintaba a cada pueblo el traje y vestido que habrían de llevar dando a cada nación sus cantares, semillas y la lengua que habrían de hablar.
Así, peregrino por todos los Andes dando nombres a todos los árboles, flores, frutos y yerbas, enseñando a la gente las que eran buenas para comer, medicinar e indicando el tiempo en que habrían de florecer y fructificar. Imitando a los astros que viven en correspondencia y reciprocidad en el universo, promovió amorosamente formas y conductas de vida elevada, enseñó a cultivar rompiendo la tierra con la punta de su báculo y con su palabra hacía nacer el maíz y demás alimentos.
En ese
...