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Ensayo con delimitación e investigación de campo (Acoso sexual)


Enviado por   •  19 de Mayo de 2017  •  Ensayo  •  3.049 Palabras (13 Páginas)  •  403 Visitas

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ACOSO SEXUAL A MUJERES DE 14 A 23 AÑOS  

EN MEXICO DF

OBJETIVO: Poder conocer que tanta de la población de las mujeres han sufrido algún tipo de acoso sexual durante su adolescencia-juventud.

HIPOTESIS: Más del 50% de las mujeres han sufrido algún tipo de acoso sexual.

INTRODUCCIÓN.

A lo largo de los años el hombre ha ido inventado muchas formas de abuso, que le sirven para usarlos en contra de quienes creen inferiores o más débiles. En este sentido las formas de abuso son variadas ya que puede ir desde el abuso físico como los golpes hasta un abuso que es casi imperceptible, el abuso “psicológico”.

Así pues, el abuso psicológico puede presentarse con palabras de menosprecio o insultos, que afecten directamente la psique de una persona, o llegar hasta el punto en el que se entra en el acoso y acoso sexual, que si bien son parecidos para nada son iguales.

De esta forma, y tomando el acoso sexual como tema prioritario decimos que, el acoso sexual consiste en el abuso de una persona que tiene poder o cierta autoridad sobre otra para permitirse, es necesario aclarar que este tipo de acoso no consiste solo en tocamientos sino también en insinuaciones o invitaciones de tipo sexual.

Lamentablemente muchas de las personas que sufren de este tipo de acoso ni siquiera se han dado cuenta, ya que su agresor puede ser una persona disimulada y por ello “disfrazar” sus intenciones.

ACOSO SEXUAL.

El acoso sexual se puede dar en el trabajo por algún jefe o compañero, en la escuela; frecuentemente por compañeros de mayor edad o bien en la calle por un completo desconocido.  Es importante estar alertas ya que este abuso comienza, la mayoría de las veces, de una forma sutil disfrazada con intenciones “buenas”, sin embargo puede terminar en violación o intento de la misma.

Algunas de las formas de acoso sexual se interpretan de la siguiente manera:

  • Tocar, agarrar y pellizcar cualquier parte del cuerpo.
  • Ser acorralado.
  • Envió de notas o fotografías sexuales.
  • Escribir grafiti sexual.
  • Hacer sugestiones, gestos, miradas, bromas o comentarios sexuales (esto puede incluir sonidos tales como ladrar).
  • Hacer proposiciones o decir rumores sexuales.
  • Quitarle la ropa a alguien o a si mismo.
  • Ser forzada a besar o a hacerle algo sexual a alguien.
  • Ser violada o un intento de violación.

Es importante recordar que el acoso sexual puede pasar una o más veces, por lo que no hay que confiarnos. Ser el objetivo de un acosador puede causar ausentismo en escuelas o actividades laborales e incluso falta de concentración y puede hacer que la víctima se sienta incomoda, apenada o amenazada. En la mayoría de los casos el acoso se presenta en personas desconocidas, pero no se descarta la posibilidad de presentarse entre personas que conoces como un compañero de escuela o trabajo o incluso un vecino.

En este sentido, a pesar de que el acoso sexual no se presenta solo de hombres hacia mujeres, cabe señalar que si son las más afectadas, en especial en la etapa del cambio de la pubertad a la adolescencia.

La mayor parte de las personas piensa que el acoso sexual es algo que no es muy común, que le pasa a una entre miles, pero lo cierto es que no es así; el acoso sexual se ha vuelto cada vez más común en nuestra sociedad.

“México-. El acoso sexual es la forma más frecuente de violencia hacia la mujer, destaca un estudio elaborado por la organización no gubernamental, el Observatorio Ciudadano contra la violencia hacia las mujeres.”

En México, de los casos que se presentan de acoso sexual el 99% son de un hombre que acosa una mujer. En este sentido hay que tener presente que el acoso se presenta con diferentes matices ya que no solo se presenta con acciones de índole sexual, también se puede presentar como hostigamiento verbal y visual con connotaciones sexuales.

El acoso sexual es además una indiscutida forma discriminatoria que se ejerce sobre las víctimas a causa de su “género” y afecta todo aspecto de la vida de las víctimas generando importantes consecuencias psicológicas, físicas, económicas y sociales.

La Organización Internacional del Trabajo realizó una investigación en 23 países y encontró que entre 15 y 40 por ciento de las trabajadoras habían sido víctimas alguna vez de hostigamiento sexual.

En algunas naciones, las empresas han pagado indemnizaciones millonarias por esta práctica. Las presiones económicas han obligado a las mujeres a migrar legal e ilegalmente en busca de empleo, pero esa situación las lleva a colocarse entre los grupos más vulnerables y expuestos a la explotación y abuso.

“A quien acose sexualmente a otra persona, con la amenaza de causarle algún mal relacionado con la actividad que se le vincula, se le impondrá de seis meses a tres años. Artículo 179 del Código penal de México DF.

Si el hostigador es servidor público y se aprovecha de esta circunstancia, además de la pena prevista en el párrafo anterior, se le impondrá destitución por un lapso igual de prisión impuesta.

Este delito se persigue por querella, es decir a petición de la parte ofendida.”

Dada la importancia y gravedad de este tema, se entregan las siguientes recomendaciones para poder identificar cuando el acoso se presente y qué hacer para detenerlo:

El acoso sexual consiste en emplear una conducta sexual indebida. Esto se puede manifestar en diversas formas, entre las cuales se incluyen:

- El contacto físico, tal como el que te agarren, pellizquen, o toquen tus senos, trasero u otras partes de tu cuerpo; o te den un beso en contra de tu voluntad;

- Los comentarios sexuales, tales como atribuir apodos (mujer sucia, prostituta, etc.), correr rumores acerca de tu persona, hacer bromas sexuales a costa tuya, dirigir gestos sexuales hacia ti o acerca de ti.

- Proposiciones sexuales, tales como sugerir encuentros sexuales contigo o pedirte citas amorosas repetidamente aunque tú ya hayas dicho que no;

- La comunicación indeseada, tales como llamadas telefónicas, cartas o correos electrónicos. Estos podrían ser de contenido grosero o amenazante, como también podrían ser elogiosas o acogedores pero aún incómodos para ti.

Estos son únicamente ejemplos; pueden existir otras conductas que no han sido descritas arriba pero que son consideradas como acoso sexual.

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