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Lenguaje Escrito


Enviado por   •  17 de Junio de 2012  •  1.740 Palabras (7 Páginas)  •  582 Visitas

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TEMA DE ESTUDIO

El presente Documento Recepcional, se propuso bajo la línea temática “experiencias de trabajo”, la decisión de realizarlo se debe a que como docente me surgió el interés de conocer y apoyar con bases teóricas y metodológicas, el proceso que los niños de tercer grado de preescolar del Jardín de Niños “Club de leones” siguen para iniciarse en la práctica de la escritura, respondiendo así a las necesidades e intereses de los niños.

La comunidad de Progreso de Obregón donde desarrollé esta experiencia cuenta con una biblioteca pública que los padres de preescolar no aprovechan para llevar a sus hijos y leerles un cuento o libro, cabe suponer que es por la falta de hábito por la lectura de los progenitores.

El jardín de niños donde desarrollé mi trabajo docente en la última etapa de mi formación inicial como educadora, es una institución de organización completa, ubicada en una zona urbana, en el municipio de Progreso de Obregón; cuenta con seis salones, uno para cada grupo, oficinas de dirección y administración, sala audiovisual, sala de música, biblioteca, cocina, patio cívico con foro, áreas verdes, una alberca (que poco hacen uso de ella) y baños para niños y niñas. Dentro del jardín laboran una directora, siete educadoras, tres conserjes, una secretaria, tres maestros de apoyo en clases de música, educación física e inglés, atendiendo dos veces por semana a cada grupo, en el caso de inglés se realiza en horario de 8:00 a 9:00 hrs. El personal docente del jardín de niños debe cumplir con una normatividad en relación al horario de entrada y salida que es de 8:30am a 12:30pm aunque generalmente se prolonga más tiempo el horario de salida; existen tres puertas de acceso de los niños y dos educadoras tienen a su cargo la guardia, una de ellas abriendo a las 8:50am y cerrando a las 9:00am en punto; antes de comenzar las clases; semanalmente cada educadora le corresponde realizar la rutina o activación física colectiva.

Esta institución atiende a niños de un rango de tres a cinco años de edad, en un horario de 9:00am a 12:00pm, cubriendo una matrícula de 182 niños, distribuido de la siguiente manera:

3° “A” 20 niños y 15 niñas 2° “A” 16 niños y 12 niñas

3° “B” 15 niños y 16 niñas 2° “B 9 niños y 17 niñas

3° “C” 17 niños y 17 niñas 2° “C” 12 niños y 16 niñas

Particularmente mi intervención docente la desarrollé con el grupo de tercer grado, grupo “B”, el cual está formado por 15 niños y 16 niñas que oscilan entre los cinco y seis años de edad. Al realizar observaciones en algunas actividades y en situaciones variadas pude darme cuenta que los niños tenían deseo de aprender y pedían actividades retadoras relacionadas con la escritura ya que logré observar que autónomamente escribían en su libreta. Ante esto, mi intervención docente como practicante debía contribuir a familiarizar a los niños con materiales escritos (portadores de textos) así como producir sus propios textos. Pude observar que el ambiente alfabetizador que existía en el aula era bueno, contaba con letreros de los días de la semana, de biblioteca, de los nombres de los niños en sus casilleros, el nombre de cada uno de los materiales y contaban con un periódico mural donde se escribía el mes correspondiente. Dada la importancia del lenguaje como un campo transversal y considerándolo como una herramienta indispensable en la adquisición de conocimientos, así como las capacidades, habilidades y necesidades que identifiqué en el grupo, decidí realizar mi intervención docente bajo la competencia de expresa gráficamente las ideas que quiere comunicar y las verbaliza para construir un texto escrito con ayuda de alguien, partiendo del diseño y aplicación de actividades para favorecer este campo formativo y su articulación con los demás campos de formación en los niños.

Para tener un referente más amplio del grupo que atendí indagué sobre el ambiente familiar de los alumnos; respecto a la escolaridad de los padres de familia, la mayoría tienen primaria y secundaria, aunque algunos no concluidas, son pocos quienes ingresaron al nivel medio superior logrando obtener una profesión, cabe mencionar que la mayoría de las madres se dedican al hogar, pocas son las que salen a trabajar y más se observa en algunas madres solteras, que dejan a sus hijos al cuidado de los abuelos u otros familiares. Cuando se realizaban reuniones, las inquietudes de los padres eran que “cuándo sus hijos iban a escribir y leer porque ya iban a pasar a la primaria” y no querían que a sus hijos los hicieran a un lado por el simple hecho de no saber leer ni escribir. Como practicante aprovechaba en esas reuniones y les mencionaba que en preescolar no específicamente se les tiene que enseñar a leer y escribir, sino iniciarlos en la práctica de la escritura.

Al inicio de curso y en las observaciones que realicé pude percatarme de la forma que la educadora titular abordaba el proceso del aprendizaje de la escritura de los niños, esto haciendo uso de copias en las que los niños hacían planas de algunas letras o el remarcado de algunas de ellas, copiar letreros que se encontraban en el aula y el trazado de las vocales; este tipo de actividades regularmente las dejaba de tarea limitando a que los niños conocieran algunas de las funciones y características

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