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Enviado por CEGAelGamer • 5 de Abril de 2014 • 2.763 Palabras (12 Páginas) • 162 Visitas
GRUPOS ÉTNICOS DE VERACRUZ
OTOMÍES, TEENEK, NAHUAS, TEPEHUAS Y TOTONACAS.
OTOMÍES
HIDALGO, GUANAJUATO, QUERÉTARO, MICHOACÁN, PUEBLA,
VERACRUZ, MORELOS, TLAXCALA, ESTADO DE MÉXICO.
El término otomí deriva del nahua y significa “cazadores que llevan flechas” y fue aplicado genéricamente por los aztecas a varios grupos étnicos a los que consideraban inferiores y bárbaros. Actualmente el grupo otomí es uno de los más numerosos y habita en la región Noreste del Estado de México, el Centro de Hidalgo y algunas zonas dispersas de los Estados de Veracruz, Guanajuato, Querétaro, Michoacán, Puebla, Morelos y Tlaxcala.
Es interesante mencionar que el otomí es una de las lenguas más antiguas de México; éste es uno de los grupos indígenas en el que más notoriamente predomina el monolingüismo.
El cultivo más importante entre los otomíes es el maguey, pero producen además: maíz, frijol, nopal y chile, que constituyen la base de su alimentación. La escasa productividad agrícola y la carencia de industrias en la zona habitada por los otomíes ha provocado que los varones emigren y se contraten como peones en propiedades agrícolas en Tula, Hidalgo, en Querétaro y en San Luis Potosí.
Las casas son tan variadas y diferentes como las zonas en las que habitan. Entre los habitantes de las regiones más fértiles las casas se construyen generalmente de adobe con techos de teja, cartón o asbesto. En algunas zonas las casas son de paredes de barro y pencas de maguey con techos de palma. En otras, las paredes de las casas son de madera con techo de dos aguas de tejamanil. Tienen uno o dos cuartos y adicionalmente un granero interior. Algunas veces tienen un baño de temazcal. Los techos son de dos aguas. Se hacen de teja, lámina de cartón, de asbesto o metal. Los pisos son de tierra. Actualmente los materiales tradicionales se están reemplazando por materiales industriales como el ladrillo.
La ganadería es una actividad secundaria, pero suelen tener en sus solares ovejas, cabras y algunos cerdos. Algunas familias tienen una yunta de bueyes para labrar la tierra.
Utilizan ollas y trastos de barro, cucharas, bancos y cajones de madera. Duermen sobre petates o camas de tablas.
La unidad básica social la constituye la familia nuclear, de padres e hijos. Es usual que el novio, antes de casarse, preste servicio prematrimonial en casa de los futuros suegros por un determinado período, aunque regularmente los hijos varones, al casarse, se van a vivir temporalmente con sus padres hasta que nace el primer hijo, momento en el que se independizan y construyen un nuevo hogar. En caso de separación, los hijos normalmente quedan a cargo de la madre, la cual regresa al hogar paterno.
TOTONACAS
PUEBLA Y VERACRUZ
Los totonacas ocupan alrededor de 30 municipios en total, siendo los más poblados los de Papantla y Espinal en la costa, los serranos de Coxquihui y Zozocolco, en Veracruz y los de Cuetzalan y Olintla en el estado de Puebla. En toda la zona es muy alta la densidad de población mestiza y de otros grupos étnicos.
Para los totonacas la vivienda es un lugar sagrado y, al igual que el poblado, representa la imagen del mundo en cuyo centro debe estar el “pus santo” que es un altar o mesa de las ofrendas. Los cuatro ángulos de la casa representan los cuatro puntos cardinales. Antes de construir celebran un rito dedicado al “Dueño de la Tierra” que consiste en enterrar una ofrenda de mole y pollo en cada esquina del terreno para pedirle permiso. Posteriormente, en época de enfermedades, colocan una veladora en cada una de las esquinas y otra en el altar, al centro, para proteger la casa. Las velas se llevan a bendecir el día de La Candelaria (2 de febrero) y con éstas se sustituyen las anteriores.
Las casas, tanto de la sierra como de las zonas bajas, son similares. Generalmente, constan de un solo cuarto de planta cuadrangular o rectangular, construido con otate o tablas de madera.
Por la puerta de la casa entran y salen vivos y muertos y por eso, los días 1 y 2 de noviembre decoran el camino de entrada y la puerta misma con flores y hojas de tepejilote, lo que le facilita a los muertos el trabajo de encontrar la casa.
En el interior tienen espacio para estancia, cocina y dormitorio. El altar es el sitio más importante y está formado por una mesa alta, puesta en el centro de la habitación, a la que se le construye un techo de carrizo, forrado de papel o de plástico, el cual representa la cúpula celeste.
El mobiliario es escaso y rústico, y está formado por pocos elementos como asientos de madera o sillas bajas con asiento de hule o palma, y bancas largas de madera. Duermen sobre petates.
El brasero de la cocina también es un lugar importante y central. Hay vasijas y cazuelas de barro suspendidas de las vigas, un metate, un fogón de tres piedras y afuera, hay un granero y una porqueriza. Anexo en la casa también hay un temazcal rectangular, al que consideran una puerta sagrada por la que los enfermos regresan purificados al mundo de los vivos.
Actualmente, cada vez más, reemplazan los materiales originales de construcción y prefieren emplear, en su lugar, adobe o ladrillo para las paredes y teja para hacer sus techos.
TEPEHUAS
VERACRUZ, HIDALGO y PUEBLA
La palabra tepehua, en náhuatl, significa “dueño del cerro” o “el que vive en el cerro”. El nombre dado por los aztecas se conserva, aunque los tepehuas actualmente no radican en las montañas.
Actualmente habitan en los municipios de Ixhuatlán de Madero, Tlachichilco y Zontecomatlán en el Norte de Veracruz. El municipio de Huehuetla, ubicado en el Noreste de Hidalgo y en algunas localidades del municipio de Pantepec, Puebla. Conviven con otros grupos indígenas, en Veracruz con nahuas y otomíes, en Hidalgo con otomíes, y con totonacas en Puebla. El idioma tepehua se asemeja al totonaco, lo que facilita la comunicación entre los hablantes de ambos grupos.
La casa tepehua suele ser de un solo cuarto, cuadrado o rectangular, según la región. Las paredes se hacen de acuerdo a los materiales disponibles en la zona, piedra o varas verticales, en cuyo caso, usan paja, lodo y estiércol para dar solidez al embarre. El techo es de dos aguas, alto, de paja, zacate o palma, redondeado en los extremos. Tienen una o dos puertas, pero no ventanas. Recientemente, algunas viviendas lucen un portal que se usa como área de descanso, recibidor o para realizar actividades como el desgrane del maíz y elaboración de prendas de vestir. En el cuarto interior
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