Reporte De La Enseñanza Pedagogica

EL TACTO EN LA ENSEÑANZA

El significado de la sensibilidad pedagógica.

Max van Manen.

LA PRÁCTICA DE LA PEDAGOGÍA.

La comprensión pedagógica es compleja, contiene elementos reflexivos e interactivos por lo que es importante que el docente se mantenga al margen, saber cuándo y cómo comprometer activamente al niño.

El tacto incluye una sensibilidad de saber cuándo dejar pasar algo, cuando evitar hablar, cuando intervenir o cuando hacer como que nos damos cuenta de algo. Una forma especial de contenerse es la paciencia, la facultad de esperar una reacción. La paciencia ha sido descrita como una virtud fundamental que todo profesor y todo padre deben poseer, la paciencia permite al educador integrar al niño en el curso de las cosas necesario para crecer y aprender.

Forma parte de la naturaleza de la infancia que el niño quiera crecer y volverse más independiente, y forma parte de la naturaleza de la pedagogía que los padres y profesores quieran que el niño crezca, progrese y aprenda. En consecuencia en lugar de contenerse, el adulto suele a veces empujar y forzar un poco las cosas y pues resulta difícil saber cuándo hay que contenerse y esperar.

El tacto se manifiesta con respecto a las experiencias del niño. Se debe estar abierto a las experiencias del niño, esto significa que hay que evitar tratar las situaciones de una manera estándar y convencional. Significa que uno tiene que tratar de ver más allá de las perspectivas que tiene el adulto, el profesor y el padre respecto a las experiencias del niño.

El tacto se manifiesta siendo sensible a la subjetividad. Intentar tratar al otro como un sujeto no como un objeto. El tacto pedagógico trata de ayudar a los estudiantes a desarrollar un interés intrínseco en todos los aspectos de las materias y esto nos indica que debemos de ser receptivos a las experiencias subjetivas del propio aprendizaje del alumno. Un educador tiene que saber dónde está el niño, como ve el niño las cosas, como es que este estudiante tiene dificultad en cruzar la calle para así entrar en los dominios del aprendizaje.

El tacto se manifiesta como una influencia sutil. Algunas veces, los profesores no nos damos cuenta de cómo influimos en nuestros alumnos, incluso en aquellos que menos imaginamos. La influencia es tan sutil que en la rutina de la vida diaria no llegamos a notarlo. Siempre hay formas de tocar a los alumnos que otros pueden haber dado por perdidos.

El tacto se manifiesta como seguridad en las diferentes situaciones. Existe un buen tono para cada situación, saber controlar con seguridad las situaciones imprescindibles es todo un reto, es en situaciones complicadas y difíciles cuando el profesor tiene que controlar y ser capaz de demostrar su seguridad y su tacto. Un profesor que generalmente actúa con tacto ha aprendido a confiar

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