Ciencia y lenguaje

“La ciencia y el lenguaje nos han llevado a la búsqueda de conocimiento, son lo que nos diferencian de los demás seres vivos y nos llevan a la razón.”

El ser humano es el único ser capaz de articular el lenguaje, es por medio de ésta herramienta que ha logrado avanzar y comunicarse diferente de los otros seres desde la antigüedad, por medio del lenguaje se ha podido destacar en muchos campos, tales como el análisis de los seres vivos que nos rodean y de nosotros mismos, lo que nos permite acceder el mundo abstracto al que opta el ser humano.

“El ser humano habla. Hablamos en la vigilia y en el sueño. Hablamos sin parar, incluso cuando no pronunciamos ninguna palabra, sino que escuchamos o leemos; hablamos tanto si nos dedicamos a una tarea o nos abandonamos al ocio. Hablamos constantemente de una forma u otra. Hablamos porque hablar es connatural al ser humano. El hablar no hace de un acto particular de la voluntad. Se dice que el hombre es hablante por naturaleza. La enseñanza tradicional dice que el hombre es, a diferencia de la planta y la bestia, el ser vivo capaz de hablar.” Heidegger.

Esta, como otras afirmaciones pone en evidencia al lenguaje como esencia del ser humano, que desde siglos anteriores nos ha llevado a buscar la respuesta a las preguntas “cómo y por qué”, por lo tanto el lenguaje es y ha sido un constante devenir filosófico, cobrando en la actualidad una importancia fundamental para la filosofía y la ciencia; también es fundamental el papel que ocupa en el conocimiento de la realidad, es decir en la ciencia misma. Entonces a partir del siglo XX se empieza a estudiar más a fondo la problemática del lenguaje donde se establece que el lenguaje no es solo un medio de comunicación sino el símbolo  del espíritu y de la visión del mundo del hablante.

Autores tales como Frege y Wittgenstein, centraran al lenguaje como el centro de la filosofía, y promueven el positivismo lógico y que los problemas filosóficos son en realidad, problemas lingüísticos, también esta Pierce quien postula: “la expresión y el pensamiento son una sola cosa”, entonces es cuando el mundo se cuestiona: si hay lenguaje sin pensamiento o hay pensamiento sin lenguaje, lo cierto es que si hay el uno o el otro, se evidencian procesos de pensamiento; la lengua actúa de medio de conexión de tal manera que rodea nuestro contacto con la realidad. El lenguaje, pues, se vuelve fundamental siempre que queramos abordar cualquier ámbito del conocimiento.

El lenguaje, pues, funciona como verdadero director de la ciencia. Podríamos decir que a través del lenguaje  y la forma de expresarse se construye el objeto de la ciencia; la ciencia contribuye al avance de la forma de vida de la humanidad y es básica para la superación del ser humano, la comprensión de la vida y para mejorar nuestra calidad de vida, por lo tanto la terminología de una ciencia, es de importancia vital para alguna disciplina porque el desarrollo de la misma dependerá del correcto uso de aquella terminología y cada avance científico es una formulación correcta de palabras e ideas. La configuración de una terminología y su tejido conceptual en la que sus componentes han sido definidos adecuadamente, constituye la ciencia; todo pensamiento genera una determinada expresión ya que la ciencia, el pensamiento y el conocimiento son la expresión del pensamiento y el lenguaje y viceversa.

Los avances de la ciencia hacen que haya un cambio en la forma en que todos los seres humanos vemos al mundo, es por esto, también que se da un cambio significativo en el uso del lenguaje, se crean pero también se recrean palabras y vocablos que pasan a definir fenómenos, objetos e incluso seres que nos rodean, es decir, se produce un cambio en toda nuestra realidad. Esta estrecha relación entre concepto y término es expresada por Pierce de la siguiente manera: “Los símbolos son el tejido y la trama de toda investigación y de todo pensamiento, y la vida del pensamiento y la ciencia es la vida inherente de los símbolos”.

El lenguaje, a pesar de contener el pensamiento, al mismo tiempo ha sido considerado un elemento de alteración y cambio para la ciencia, pues como señalaba Wittgenstein “Una fuente importante de nuestro fracaso en entender es que no poseemos una visión clara de nuestro uso de las palabras”. Muchas veces se generan conflictos y discusiones a nuestro alrededor, que en si no tienen un significado o un trasfondo importante, solo es que muchas veces se genera un profundo desconocimiento de cómo funciona el lenguaje. Es por esto que filósofos tales como Leibniz, Frege, e incluso Wittgenstein han llegado a cuestionarse que “La imprecisión de algunos vocablos y la ambigüedad generada por la polisemia o la elipsis en el lenguaje natural han supuesto, en contextos como el científico, grandes limitaciones.” Y algunos han planteado que en la ciencia es oportuno utilizar otro tipo de lenguajes tales como el matemático o utilizando símbolos lógicos para evitar errores y malentendidos en el ámbito de la ciencia, así como la banalización de la información, pero debemos tener en cuenta que estos lenguajes están primeramente basados en el lenguaje natural y  que en muchos casos dependen de esta, lo cual representa una limitación para el lenguaje y demuestra esta como muchas otras limitaciones del ser humano, también, muchos conceptos no se pueden expresar bajo dicha simbología, son solo una representación de la lengua natural ya establecida.

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