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TALLER DESCARTES


Enviado por   •  5 de Diciembre de 2016  •  Documentos de Investigación  •  1.782 Palabras (8 Páginas)  •  257 Visitas

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DESCARTES

IDEA:

La idea surge en descartes como una necesidad de entender el mundo, no como lo entendería Nicolás Copérnico; el inmenso libro del universo donde cualquiera es capaz de leer y entender lo que existe, sino como un universo fabulado, o dicho de otro modo: construido con el conocimiento que establece una verdad  la cual le es afín.  El mundo se construye en afinidad con las ideas y sentimientos de quien pieza; no de imágenes y nociones pre figuradas en el alma. Nuestras ideas y nuestros sentimientos sobre las cosas no se forman de acuerdo con una teoría de la semejanza, sino basados en una desemejanza profunda entre las cosas y nuestras ideas y sentimientos. Nuestro conocimiento del mundo no es una copia del mundo, sino la

Fabulación de un mundo nuevo deducida de la observación de los efectos sensibles a partir de una figura inteligible. (Miguel, 2011, p.XXII).

No buscamos la inteligibilidad del objeto; construimos la inteligibilidad y asì, el objeto mismo para un mundo inventado. «Don Quijote lee el mundo para demostrar los libros, mientras que Descartes, fabula el mundo» a partir del «orden» que él engendra siguiendo una rigurosa deducción del espíritu a partir de las intuiciones primeras.  (Miguel, 2011, p. XLIX)

Lo fabulado caeria en un solipcismo si no se establecen criterios solidos para el ejercicio de inteleccion. Descartes da a entender el mundo en terminos  de claridad y distincion apoyado en un proceso analitico-sintetico, generando una condicion de entendimiento que descartes Expresaba Clara y Distinta.

 Las ideas en el alma se entienden si son claras y distintas, esto quiere decir que el espacio que denomina alma o espíritu y es el espacio de toda representación (Miguel, 2011. P. XXII), es donde todo se manifiesta de manera confusa y oscura dado que es el estado del yo expontaneo, es decir, antes de que sea formulado el silogismo “pienso, luego soy”; antes, todavia de que se pueda expresar el sentimiento que el alma tiene de si misma. Cuando el alma deviene espiritu, es cuando se han posibilitado las representaciones que expresan los estados interiores del “yo que piensa”  

Y aunque el entendimiento no pueda entenderse al igual que el ojo no puede verse, en el alma y el espíritu, podemos conocernos a nosotros mismos.

La primera forma de entendimiento es la  intuición; una acción del entendimiento que consiste en una percepción clara y distinta que logra aprehender el concepto no sólo en su contenido, sino en su peculiar individualidad (Miguel, 2011 p. XXVII), esto es interpretado por Descartes  como la germinación a partir de la fuerza productora del propio entendimiento que, gracias a la luz natural de que está dotado, es capaz de hacer salir de su propia interioridad algo nuevo: «Así, cada cual puede intuir con el espíritu, que existe, que piensa, que el triángulo está  determinado por tres líneas solamente; la esfera, por una sola superficie y otras cosas semejantes, que son mucho más numerosas de lo que creen muchos. Se conduce entonces a la intuición a través de la deducción para fabular verdades expresables con suficiente claridad y distinción.

IMAGEN:

Existe una función representadora de la idea, la imagen, lo cual exterioriza su estado interior.  Se  Distinguen dos significados del término representación: el que alude a la idea misma como imagen y el que alude a la idea como intelecto que apunta a una realidad exterior a la idea. La idea misma como imagen alude al pensamiento intuitivo, propio de lo entendido por descartes, como Naturaleza (la forma natural de intelección sin discriminar todavía el “yo” metafísico) de la cual hay que realizar un estudio de la luz (tanto en el sentido literal como en el metafórico) de ahí que la idea será tenida en cuenta como una mirada directa al objeto iluminado. Los objetos del mundo racional, pueden ser interpretados en la intuición, que se ha de trabajar paulatinamente con un método que busca la verdad, aunque ésta misma sea el producto de un trabajo metódico. La intuición, no el testimonio fluctuante de los sentidos, ni el juicio falaz de una imaginación incoherente, sino una concepción del puro y atento espíritu, tan fácil  y distinta, que no quede en absoluto duda alguna respecto de aquello que entendemos.  (Descartes, 2011 p. 29) 

Como intelecto, la idea puede interpretarse en términos de “la mirada de un objeto o el cuadro de una realidad, que es exterior a la idea, Descartes interpreta el conocimiento como un trabajo de transposición de los movimientos que capta el cerebro: «Son los movimientos en virtud de los cuales se forma la imagen los que actuando de forma inmediata sobre nuestra alma, en tanto que está unida al cuerpo, han sido instituidos por la naturaleza para generar en ella tales sentimientos».  (Miguel, 2011 p. XXXV)

FICCIÓN:

El filósofo es generador de fabulas, de ficciones que lleguen a la verosimilitud, generando formas Inteligibles que encuentren su correlato con las formas Sensibles. Éstas a diferencia de la mitología, no se basan en formas pre-racionales del pensamiento que podrían abrir contextos para la especulación metafísica; conducen, más bien que tiendan a la comprobación de la teoría creada por el método que busca la verdad. Descartes en uno de los tres apéndices que escribe para el discurso sobre el método, “la Dióptrica”  ha pretendido hacer demostraciones geométricas para los distintos métodos de pensamiento que busca la verdad. Parte de suposiciones acerca de las propiedades de la luz que más adelante ha de ir comprobando con el fin de adquirir conocimiento natural de las propiedades físicas a la luz de la razón.  

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