EL SUPERHOBRE COMO EL FIN DEL CAMINO
Enviado por Stephani Vr • 11 de Febrero de 2018 • Ensayo • 1.220 Palabras (5 Páginas) • 116 Visitas
INTRODUCCIÓN
El siguiente ensayo, basado en la obra de Friedrich Nietzsche “Así hablaba Zaratustra”, tendrá como tema principal la transición que hace el hombre para poder convertirse en el superhombre utópico del que se habla en la obra mencionada anteriormente, así como las implicaciones que conlleva este proceso de transformación y el acabamiento del hombre para poder culminar con esta evolución. Primeramente se hablará del último hombre y de manera en que se concibe en la narración tratada, así como la superficialidad que implica; seguido por la transición por la que debe pasar para poder ser el superhombre, el ocaso, cuya fase esta intrínsecamente relacionada con la soledad, y para finalizar, el superhombre como única meta y las características que el individuo superhombre tiene, tales como la libertad.
EL SUPERHOBRE COMO EL FIN DEL CAMINO
APARTADO I: EL ÚLTIMO HOMBRE
El hombre es la habitación del ser porque habita en él y se vuelve una revelación. Para Nietzsche, el hombre es un ser miserable e inmundo, un puente entre la bestia y el superhombre. Por otro lado, el último hombre es el asesino de Dios, ya que no cree su existencia, para el corazón del último hombre dios es una falsedad, por ende los actos morales que este realiza no tienen limite. El hombre moderno en la medida que está vacío busca el espectáculo, su cuerpo refleja una pobreza de alma, este sujeto se guía por la razón y no por su corazón, por lo que todo a su alrededor se torna superfluo y ve a los otros seres como objeto, ya que sólo forma relaciones de empatía de género o compañerismo y en realidad no conoce la amistad ni mucho menos el amor, de manera que no puede morar en sí mismo para encontrarse, por consiguiente no encuentra la más alta esperanza. En la presente era todos quieren lo mismo, las mil metas, tal y como en un rebaño y quien se atreve a pensar diferente lo tratan como a una persona demente. Son embargo, lo que vuelve interesante al hombre es que es un puente y no una meta, un tránsito y un acabamiento.
APARTADO II: EL OCASO
Encontrarse a sí mismo es lo mismo que el sentido de la tierra, es decir disfrutar las maravillas de la naturaleza, hacer una fiesta con la vida, hay que encontrar el sentido de la tierra, en otras palabras, se debe conocer lo que se gusta y lo que no para de esta manera no terminar enajenándose y en su lugar se debe extinguirse viviendo, pero al encontrarse a sí mismo todo se convierte en oscuridad a causa de que la metamorfosis al otro ser es el ocaso, la oscuridad porque el ser cambia totalmente a tal grado que es irreconocible para él mismo y para los otros, y le repudia todo lo que fue en el pasado. Justo en ese momento, el hundimiento se convierte en soledad, pero no es una soledad destructiva sino una que ayuda a comprender al ser que habita en el hombre, a amar al otro y a sí mismo y a la sabiduría que se encuentra en el corazón del hombre libre. La soledad es la huida de la enfermedad, el último hombre, porque hay una reunión consigo mismo y nacen los más profundos sentimientos, se crea el silencioso y largo callar que es el proceso de dar a luz a un pensamiento o idea. Pero se debe andar con mucho cuidado, ya que el individuo que está rumbo al superhombre puede perderse en el camino al querer convertirse en el hombre utópico sin haber purificado su alma libre, ya que aunque se es ya libre quedan fragmentos del gusano del cual se huye, por ello la purificación del espíritu es necesaria.
Hundirse en el ocaso es estar dispuesto a correr riesgos por aquello que se ama, se presentan situaciones desconocidas por lo tanto todos los sentidos deben permanecer alertas, la perspectiva debe abrirse, se debe transformar en niño: símbolo de pureza e inocencia de la infancia, desde la que se recrea la nueva tabla de valores y juicios morales, entonces las raíces que habitan en lo oscuro dan fruto gozoso, el caer, hundirse en el ocaso, se convierte en un elevarse.
APARTADO III: EL SUPERHOMBRE
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