El tema del sujeto y el poder se centra en la discusión, de las relaciones de poder las cuales están impregnadas en nuestra historia y nuestro presente y cuya existencia se avizora también en nuestro futuro

El tema del sujeto y el poder se centra en la discusión, de las relaciones de poder las cuales están impregnadas en nuestra historia y nuestro presente y cuya existencia se avizora también en nuestro futuro.

Se dice que las relaciones de poder están en entornos sociales, como lugares de trabajo, generando tenciones en espacios íntimos como espacios de la familia y de pareja.

Para empezar el autor del texto aborda a  Michel Foucault  para acercase a las relaciones del poder, quien desarrollo un trabajo denominado Genealogía del poder, que desarrollo a partir de la década de 1960, con la cual plantea que lo interesante de esta propuesta de análisis, consiste en mirar lo obvio y repetitivo que, por ser tanto, difícilmente puede ser percibido y menos aún analizado y aunque existe la dificultad de aprehenderlo por estar tan a la vista, posee una importancia singular, puesto que permite y posibilita una forma de dominio, al mismo tiempo que forma parte de una tecnología de poder, es decir que todas esas relaciones cotidianas son parte constitutiva del instrumental que usa el poder para lograr su ejercicio.

También podemos hablar de cómo a través del tiempo hemos estado marcados por momentos históricos del poder los cuales ha hecho que identifiquemos nuestros orígenes y los cuales nos ha puesto un sello para identificarnos como sociedad. de la misma manera con el tiempo se ha observado diferentes tipos de lucha con lo cual el filósofo Michel Foucault ha señalado, en su obra el sujeto y el poder,' tres tipos específicos y diferentes de lucha que ha marcado nuestra historia

• primer lugar: denominada luchas políticas, con lo cual los sujetos tienden a rechazar y a oponerse de una forma determinada a la dominación, ya sea étnica, social o religiosa, porque esta lucha marco a la sociedad feudal.
• Segundo lugar: luchas económicas, donde los sujetos rechazan una forma específica de explotación entre la fuerza de trabajo y el producto de dicho trabajo. Esta forma de lucha predomino en siglo XIX y tuvo al proletariado como clase portadora y ejecutadora de las mismas.

• Tercer lugar: las luchas que han predominado en nuestras sociedades actuales, esas en que los sujetos combaten todo aquello que los ata a sí mismos y de esta manera los somete a los otros. luchando principalmente por refutar y rechazar las formas de subjetividad impuestas por la modernidad a los sujetos y que hacen de ellos sujetos en el sentido literal del término, sujetados, atados, amarrados a una identidad (social, nacional, de grupo o de clase social) a la cual se vieron obligados a estar conformes con ello.

Con respecto a estas luchas podemos decir que en el siglo XIX las luchas económicas fueron las que predominaron dándole su sello a este siglo.

Por consiguiente, dice el autor del texto que se intenta rechazar y, al mismo tiempo, se busca alcanzar un tipo de subjetividad nueva y diferente, buscando la producción de un tipo distinto de experiencia.

Dando a entender que tipos de lucha, política y económicas existen y que están luchando en contra del tipo de sujeto y subjetividad que se intenta imponer.

Sin embrago se dice que en la actualidad el sujeto intenta o quiere rebelarse frente a unas condiciones o normas con las cuales nos acostumbramos a vivir en el entorno y la sociedad que nos rodea, acciones con las que crecemos y con las debemos permanecer hasta la muerte, y con ello teniendo como finalidad conducir y guiar nuestra vida y nuestra forma ser, a lo cual es llamado como una conducta “normal”

De acuerdo a  lo anterior dicho mencionare un ejemplo que el autor plantea: y es referente a el pastor y sus ovejas con el cual dice que el pastor tiene como objetivo guiar y conducir, a su rebaño bajo su dominio, y por lo cual lo relaciona con el cristianismo proponiendo al pastor como miembro para guiar y conducir a su rebaño teniendo como necesidad el  saber y conocer lo más íntimo de cada sujeto respecto a pensamientos, sentimientos y secretos. Es ahí de donde nace el papel predominante y fundamental de la confesión, teniendo como objetivo de ser guía para la salvación eterna. Respecto a esta ideología permaneció con gran relevancia entre finales del siglo XVII Y comienzos del siglo XVIII.

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