Filosofia. La escuela de Francfurt

1. La escuela de Francfort tuvo su origen en el instituto para investigación social fundada en Francfort (Alemania) a principios de la década de 1920. Gracias al nombramiento de Horkheimer como director el instituto fue adquiriendo cada vez más importancia y asumió los rasgos de una escuela dedicada a elaborar aquel programa que ha pasado a la historia de las ideas con el nombre de “teoría critica de la sociedad”. La escuela de francfort tuvo lugar en una época de posguerra de la primera conflagración bélica mundial, este periodo paso por la experiencia del Fascismo Y DEL Nazismo en occidente y del Estalinismo en la Unión Soviética, más tarde conoció el vendaval de la segunda guerra mundial y asistió al desarrollo generalizado e irrefrenable de la sociedad tecnológica avanzada.

Cuando Hitler tomo el poder el grupo de Francfort se vio obligado a exiliarse, primero en Ginebra, luego en Paris, y finalmente en Nueva York. Después de la Segunda Guerra Mundial Adorno y Horkheimer regresaron a Francfort. En 1950 renació el Instituto para la investigación social, donde surgieron sociólogos y filósofos como Alfred Schmidt, Oskar Negt y uno de los más conocidos Jürgen Habermas.

1. En términos de Hokheimer la teoría social critica es considerada “como un todo”. El teórico crítico es aquel teórico cuya única preocupación consiste en un desarrollo que lleve a una sociedad sin explotación, persigue a la organización y transformación del hombre. La teoría critica quiere se comprensión totalizante y dialéctica de sociedad humana en su conjunto y de los mecanismos de la sociedad industrial avanzada, con el fin de estimular la transformación racional que tenga en cuenta al hombre, su libertad, su creatividad y su armonioso desarrollo

1. La dialéctica negativa de adorno consiste en la no afirmación de la identidad entre razón y realidad. Adorno centra su interés en la dialéctica de la negación, en la dialéctica negativa, en la dialéctica que niega la identidad entre realidad y pensamiento, de este modo descarta las pretensiones de la filosofía con respecto a aferrar la totalidad de lo real, revelando su sentido oculto y profundo. Solo afirmando la no realidad de ser pensamiento podemos aspirar a desenmascarar  los sistemas filosóficos que pretenden eternizar el estado presente de la realidad y bloquear todo acción transformadora y revolucionaria. La tarea de la dialéctica negativa consiste en sacudir las falsas seguridades de los sistemas filosóficos poniendo de manifiesto lo no idéntico que reprimen y prestando atención a lo individual y a lo diferente que dejan de lado. La dialéctica negativa en otras palabras no es una dialéctica idealista que disfraza la realidad con armónicos esquemas conceptuales, sino más bien una dialéctica materialista para la cual la realidad no es en absoluto racional.

1. Se perdió la confianza en la razón objetiva porque la ilustración queda paralizada por el miedo a la verdad, pero lo que importa no es la verdad de las teorías sino su fundamento.

La industria cultural convirtió el lema en su contrario ya que esta se halla formada esencialmente por medios de comunicación de masas (cine, televisión, radio, revistas, etc.). A través de estos medios de comunicación de masas impone valores, crea necesidades, establece un lenguaje que de alguna manera la ilustración se convierte en algo contrario porque persigue el objetivo de quitar temor a los hombres y convertirlos en amos.

El progreso tecnológico y sus recursos técnicos que pueden servir para la mente del hombre generan un proceso de deshumanización porque amenaza en destruir la noción del hombre, su imaginación, autonomía e independencia de juicio.

1. La razón aporta ante la sociedad industrial contemporánea instrumentos que sirven para orientar la vida del hombre porque pueden individualizar, construir o perfeccionar los instrumentos o medios adecuados al logro de fines establecidos y controlados por un sistema.

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