Homeopatia

La homeopatía es un método al que muchas personas llegan a recurrir, ya sea por creencias, recomendaciones o simplemente en vista de que han probado diferentes medidas medicinales y por alguna razón no les ha llegado a funcionar. En México este tipo de “medicina” es muy popular, por lo general siempre se llegará conocer a algún familiar que use este tipo de medidas para su salud, a causa de la ignorancia generada por el mal uso de la información. Antes de adentrarnos más a fondo en este tema deberemos explicar algunos de los temas que lograremos ver más adelante. Uno de los puntos que se tendrá en cuenta es sobre como la corriente filosófica de Kent tiene un gran impacto en la homeopatía, no obstante, apoyaremos a la corriente escéptica con respecto a la misma, debatiendo los puntos de vista de dicho filosofo con respecto a su perspectiva para ver esta disciplina.

 Esta pseudociencia es un método terapéutico que se basa en la ley de similitud o de los semejantes, esto tiene origen a finales del siglo XVIII de la cual nos afirma y asegura que una sustancia que provoca determinados síntomas en una persona sana, en pequeñas cantidades, es capaz de curar los mismos síntomas o similares a una persona enferma. Según esta terapia, se ha de usar la misma sustancia que causa sus síntomas, pero diluida en agua hasta proporciones infinitesimales, esto es porque la mayoría de remedios homeopáticos no contiene ni una molécula del supuesto agente sanador, como reconocen algunos de los propios fabricantes por lo que podríamos deducir que, a dosis tan bajas, como las que se utilizan, las sustancias pierden su eficacia y no se genera ninguna reacción por lo que prácticamente están consumiendo productos que no tienen la calidad  suficiente para “curar “dicha enfermedad. De esta manera, los únicos efectos vistos serían producto del placebo, y no de la medicina homeopática como tal.

Esta teoría es considerada como una reliquia de la medicina antigua, comenzó a finales del siglo XVIII, donde este tipo de pseudociencia fue muy bien recibida por muchos médicos y pacientes, que vieron en ella una alternativa a una medicina agresiva, con grandes expectativas, pero muy pocos resultados. Una de las corrientes filosóficas en las que se basa dicha disciplina es el vitalismo dado que se adapta a la visión que ellos creían con respecto a la enfermedad y, aunque ha sido expulsada del pensamiento científico, ha reaparecido con fuerza en las nuevas terapias. Así mismo según Samuel Hahnemann, quien llego a ser considerado un innovador, a tal nivel en el que era reconocido como un profeta y mesías de la medicina. Donde hacía mención a que la fuerza vital «sostiene todas las partes del organismo en una admirable armonía vital». El organismo depende por completo de esa fuerza: «Desde el momento en que le falta la fuerza vital, no puede sentir, ni obrar, ni hacer cosa alguna para su propia conservación». El origen de las enfermedades es el debilitamiento o la pérdida de la armonía de esa fuerza: «Sólo la fuerza vital desarmonizada es la que produce las enfermedades (...) En otras palabras lo que nos quiere decir la función de la energía vital, es sobre como el ser humano regula el organismo dándonos la función para regularla y ser capaces de obtener una auto curación. Es a lo que denomina Natura Medicatrix (el poder curativo de la naturaleza). Por otra parte, aquí es donde podemos empezar a debatir acerca de la ideología que se tiene, en primer lugar, los productos homeopáticos erróneamente afirman ser realmente eficaces en dolencias o síntomas de gripe tos, diarrea, migraña entre otros. Esto es totalmente una falacia la homeopatía no se encuentra haciendo nada o beneficiando de alguna forma al cuerpo humano, ya que independientemente si la persona que padece estos síntomas se toma los productos ,de este tipo de medicina se curara sin necesidad de consumir este producto, esto es debido porque este tipo de padecimientos se generan por un virus y el cuerpo al principio sentirá molestias, pero  después de un tiempo el sistema inmunológico efectuara su trabajo y la persona contrarrestará el virus, actúa como lo habíamos explicado en un comienzo un efecto placebo.

En otros casos, cuando la enfermedad es más complicada y de difícil curación. Es entonces cuando la homeopatía actúa como un acompañante a la medicina tradicional. Podría llegar a considerarse como una estrategia, debido a que en este caso los remedios homeopáticos no se harían responsables directamente si el tratamiento no llega a funcionar, caería la responsabilidad en la medicina tradicional, caso contrario en el que si llegue a funcionar se haría alusión al hecho de utilizar los otros remedios.

Para lograr entender un poco mejor la medicina homeopática y lograr argumentar de una manera más completa, es observando a través de una visión filosófica, uno de los filósofos que apoyo esta corriente fue James Taylor Kent. Las ideas que nos presenta este filosofo son un poco más confusas que las anteriores así mismo las observaremos desde un carácter más reflexivo y de un plano espiritual. El ser humano esta jerárquicamente interrelacionado como un todo. “El centro de mando del ser humano parte desde el cerebro y de ahí a todos y cada uno de los órganos. El centro jerárquico superior es la psique con la voluntad, el entendimiento y finalmente el sentimiento. La enfermedad se crea y se cura a partir de este centro “Para Kent lo primordial para la consulta es la importancia de los síntomas mentales o psíquicos.  “El hombre existe en todos sus aspectos, desde su más profundo ser Espiritual hasta su externa Naturalez”. En el caso de este filosofo se puede detectar como se basa en una clase de dogma, hago referencia al dogmatismo porque Kent recalcaba la filosofía y los principios de la homeopatía por encima del simple hecho de que es un sistema terapéutico en el que el progreso del paciente es siempre más importante que las creencias religiosas del practicante. Básicamente otra forma de explicar el punto de Kent es como una forma de gobierno del hombre en la cual existe un trió, un primero, un segundo y un tercero que dirigen a saber: el cerebro, el cerebelo y la médula espinal” “Desde un punto de vista interno tenemos: voluntad y entendimiento, que junto con los afectos forman la unidad interior del hombre, la Fuerza Vital, inmaterial y formativa: y luego el cuerpo que es material” “La voluntad y el entendimiento operando en orden, producen buena salud”. Las frases anteriormente mencionadas es una explicación más detallada de lo que eran los principios de la homeopatía para Kent.

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