LAS GRANDES BATALLAS DE LA VIDA

LAS GRANDES BATALLAS DE LA VIDA

Herbert Julián, “Canción de tumba”, 2014, México: Debolsillo, 206 pp

“Dice que empezó a leer cuando tenía cinco a seis años”1, Julián Herbert es un escritor del México actual que se hizo famoso con su novela “Canción de tumba”, en  la cual hace una retrospección sobre su vida, en el momento en que su madre: Guadalupe Chávez, ingresa al hospital por la enfermedad de leucemia, y comenzó a escribir la novela.

      La historia narrada intradiegéticamente permite introducir al lector al ambiente y espacios señalados. Julián el autor narra el lugar en que nació, acerca de sus hermanos, cada uno de diferente padre. Su madre Guadalupe Chávez se dedicaba a la prostitución, era la única manera en que ella se podía desarrollar económicamente para el sustento de su familia, trabajo en varios prostíbulos, por ejemplo en “El zombi” ubicado en Lázaro Cárdenas, Michoacán. En ese lugar los trabajadores, tenían un equipo de futbol cada mañana después del trabajo el equipo entrenaba sin falta, Julián los espiaba a escondidas; mientras su madre dormía, los jugadores se molestaban de ver que él los observaba, pero con el tiempo lo hicieron la mascota del equipo, salieron a concursar a nivel estado aunque fracasaron.

      La familia de Julián fue con el tiempo fueron mudándose de estado en estado en la República Mexicana, en los cuales había más zonas de prostitución, Monterrey, Coatzacoalcos, hasta que finalmente permanecieron en Saltillo. Hubo un tiempo en que Julián quiso que su madre dejará de trabajar y que los hijos se hicieron cargo de los gastos; pero no funcionó y ella volvía a su trabajo. Julián le tenía algo de rencor ya que ella los mantuvo en un ambiente en el cual no era sano desarrollarse, incluso menciona que un par de ocasiones quisieron abusar de él, tanto en los prostíbulos como las terribles nanas que los cuidaban, pero su hermano mayor lo enseñó a que no pudiera ser violado, aspecto que no se detalla en la narración.

     Los hijos fueron creciendo y tomaron caminos distintos, pero Julián fue él que estuvo más al tanto de su madre. A pesar de sus malas decisiones como engancharse con la cocaína, tener hijos que no supo cuidar y educar por falta de madurez. Personalmente expreso que su madre lo único que quería era sacarlos adelante y aunque por ella no se desarrollaron plenamente, hizo su mejor esfuerzo, ejerciendo una actividad la cual la llevó al destierro de la sociedad, esta novela hace recordar que todas las personas siempre van a tener algo que reprochar, a sus padres, hermanos o familiares, siempre existirá la crítica hacia ellos aunque hayan hecho lo mejor por sus vidas.

     La novela también refleja que a pesar de que su madre no haya sido la mejor, él nunca la abandono, si tuvieron peleas como en todas las familias, pero él da una lección sobre el amor que hay en madre e hijo. En sus padecimientos él fue el que siempre estuvo para ella, así como cuando ella lo cuidaba de pequeño; él la veía como una persona inquebrantable en el aspecto que cuando trabajaba en un prostíbulo solo se dedicaba a bailar, aunque le ofrecieron una buena cantidad de dinero no tenía relaciones sexuales.

     La actividad de su madre era contradictoria porque con todo y que se movía en el bajo mundo también los restringía a decir groserías fuertes; pero los reprendía si desobedecían. Él veía a su mamá como a cualquier otra: amorosa, responsable y con preocupación sobre la vida de sus hijos, lo que implica que la protagonista con todo y que ejercía una actividad desprestigiada contaba con una formación humana, que intentaba plasmar en sus hijos.

     En esta obra se presentan algunos valores implícitos como la responsabilidad de su madre, con narrador y sus hermanos, y la responsabilidad de procurar a su madre toda su vida, aún en las enfermedades. El cariño de familia recíprocamente, el cuidarse los unos a los otros, e incluso el deseo del progreso por superar la práctica de su madre.

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