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La Filosofía Se Puede Enseñar


Enviado por   •  12 de Noviembre de 2014  •  3.113 Palabras (13 Páginas)  •  177 Visitas

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INTRODUCCIÓN: en el presente ensayo hice un análisis sobre ¿si se puede enseñar filosofía? Pero enfocándome a la cuestión de la enseñanza en la universidad principalmente. Primero hice unas observaciones sobre lo que actualmente se vive en las instituciones, apuntando algunos de los posibles errores que yo noto, después mi ensayo se divide en tres apartados titulados, maestro, alumno e institución donde nuevamente señalo las características de cada uno de ellos si bien, a lo largo del desarrollo del ensayo muestro porque pienso que no es posible la enseñanza de la filosofía en las universidades propongo un posible modelo que a mi manera de ver posibilitaría más el acercamiento a la filosofía.

Este estudio podrá servir para ampliar el panorama tanto del alumno como del maestro si se replantea su situación, y aprovecha la estancia en la universidad como un pretexto para afinar sus facultades en la práctica cotidiana.

DESARROLLO:

A lo largo del curso me di cuenta la complejidad del problema que representa la enseñanza universitaria poniendo especial atención en la filosofía, que parece ser una cuestion muy difícil dealcanzar cuando se encuentra regida bajo el mando de una institución estatal que determina los perfiles del alumno, así como lo que se le debe enseñar, presuponiendo que se ha hecho un previo análisis objetivo a la hora de diseñar los planes y que es por demás apuntar que dichos planes no los diseña un filosofo

Sin embargo lo que es evidente no puede refugiarse bajo los velos de la utopía, lo que yo puedo ver en la enseñanza institucional en la actualidad es que la mayoría de las carreras que se imparten en las universidades tratan de responder a “las necesidades” de una comunidad, que está determinada a su vez por las necesidades de un sistema capitalista, transformando despiadamente a la naturaleza con la sobrexplotación, persiguiendo el afán de facilitar las dificultades y limitaciones de los hombres, ahorrar tiempo y esfuerzo, incrementar la producción anulando así la libertad del sujeto y haciendo que pierda fuerza toda esa enseñanza que pretende humanizar más que mecanizar. El papel del saber se vuelve instrumental en relación con los fines del modelo de reproducción social que se va trazando Lo que menos se espera que contengan los programas son temas que atenten contra la estabilidad del estado estos por el contrario tienen que ajustarse completamente a los cánones ya establecidos y formar parte del gran mecanismo sin cuestionar lo que ya está dicho

En fin, este aparato regulador no solo se escoge los temas, de la misma forma que las asignaturas, las horas destinadas a las clases, los criterios de evaluación etc. A veces no puedo dejar de pensar a la escuela como una gran fábrica, donde entra una materia en bruto, que será moldeada a nivel ontológico esperando que el resultado sea un hombre de provecho (que produzca) para la sociedad. Esto es lo que de común se dice, sin embargo ninguna sociedad quiere que seas sabio, esto va en contra de sus fundamentos, las personas que son sabias no llegan fácilmente a ser explotadas, si son inteligentes no tan fácil pueden ser manipuladas, no pueden ser obligadas a vivir mecánicamente, ellos buscarán su individualidad, la libertad viene de la mano con la sabiduría, y ninguna sociedad quiere que seas libre por más que así lo diga. Por que usar la inteligencia implica volverse un peligro para el sistema, renuentes a todo tipo de opresión, manipulación, y explotación, estos hombres no puede vender su vida, no puede ser un sirviente

En las escuelas se nota el poco interés que se les brinda a las materias de humanidades, al contar con un número sumamente reducido de estudiantes, y con sólo los grupos necesarios; para ejemplificar esto pensemos en la FES Acatlan y la facultad de filosofía que cuenta con solo dos grupos, correspondientes al turno matutino y vespertino, las aulas con un mobiliario muy elemental, si se le compara por ejemplo con las instalaciones de los salones de arquitectura o de medicina, las materias que se dedican al estudio de las ciencias son la nueva apuesta de la modernidad para formar ciudadanos, que pongan toda su fuerza y atención en el desarrollo y “avance” de la sociedad y la cultura. El estudio de las humanidades se ve desplazado por los nuevos requerimientos sociales, hombres especializados que ocupen los millones de puestos para seguir alimentando al gran monstruo. Las carreras de humanidades comúnmente se encuentran desacreditadas tanto en la vida laboral como por la opinión pública, argumentando su poca actividad práctica, cuando más bien lo que las humanidades aspiran es ir en busca de ese hombre que sea más realista, y se de cuenta de que no estamos solos, de que necesitamos ayuda de otros, siendo respetuosos con los demás sin tratar de hacer distinción de ningún tipo, y aunque suene muy trillado, ayudarnos y comprendernos, procurando nuestra felicidad y la del otro para hacer más ameno nuestro paso por la vida.

Si bien sostengo que la filosofía no puede enseñarse en la institución, no pretendo que se elimine de ella, de principio puede sonar casi hasta contradictorio pero la institución haciendo a un lado su intento fallido por enseñar filosofía, sirve como una gran herramienta, primero porque posibilita este primer acercamiento con los temas filosófico partiendo de los años de la juventud, siendo esta una etapa crucial en el futuro desarrollo de cada ser humano, abriendo la posibilidad de depositar esa semilla que más adelante puede convertirse en una hermosa flor si su raíz llega a penetrar hasta lo más hondo del alma. La institución como tal permite al alumno que desarrolle habilidades debido a que se encontrará en la práctica constante, perfeccionando así su forma de expresar ideas, su capacidad crítica, la forma en que escribe y que lee entre muchas otras.

Si es que es verdad lo que digo y la filosofía como tal y en esencia no se acerca nada a la forma en que se aborda en las universidades, lo que yo propongo desde mi plan para los niños, es una forma de acercarse a la filosofía que pueda servir no solo para ellos sino de manera general ya que lo que pretende es mostrar formas. Empezar desde los primeros años es crucial, los cimientos son de suma importancia ya que en estos recae todo el peso del futuro edificio de ideas que pretendemos construir y es necesario formarlos de manera sólida y firme, para que no llegue a derribarlo cualquier viento.

Uno simplemente no puede aventar la semilla y esperar de inmediato los frutos, con el desarrollo de las facultades intelectuales y la constante práctica llegaremos a saborear esos frutos, el plan esta apegado a una consigna que ya se leía en el templo de Delfos hace muchos ayeres “Conócete a ti mismo” eso es lo que pretendo. Y se logra mediante

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