La Sociedad De Los Individuos

Elías, Norbert. (1990). La sociedad de los individuos: ensayos. Barcelona: Península. Capítulo I.

Este sociólogo judío-alemán que sería considerado “una de las mentes sociológicas más originales y penetrantes”, solo fue reconocido ya en su vejez, no en Inglaterra donde vivió 40 años después de la toma del poder en Alemania por los Nacional Socialistas, sino en Holanda y en su tierra natal. Sus escritos ejercieron fascinación a mucha gente más allá del estrecho mundo de la sociología profesional (Pontificia Universidad Javeriana Cali).

Elías nos presenta en su trabajo La sociedad de los individuos: ensayos, una propuesta al examinar las categorías de individuo y sociedad y la manera de tratarlos, a la hora de abordar aspectos metodológicos y epistemológicos en las ciencias sociales, una reflexión entorno al individuo y la sociedad, en definitiva: una dialéctica individuo-sociedad.

En este trabajo el autor empieza argumentando que, lo sentimos, al mencionar un término en este caso “sociedad” es pensar que la otra persona que lo escucha siente lo mismo que nosotros, es decir que le da el mismo significado que nosotros le damos al término, Elías plantea que eso no es tan cierto, y que es muy diferente hablar de sociedad, en la sociedad occidental actual, la del siglo XVI o en China.

Esto se debe a que existe para esto y otras controversias dos puntos de vista. En cuanto a hechos históricos y sociales: el autor plantea en primer lugar una visión que coloca al individuo en el centro del análisis de los hechos histórico-sociales; las acciones individuales han formado instituciones como el lenguaje y el Estado, para este punto de vista. En contra parte existe la vía de afirmar que el individuo no desempeño papel alguno en la creación de una sociedad orgánica y es más bien fue una entidad supraindividual en un universo móvil e histórico, con juventud, madurez y muerte. La sociedad sería quien forma al individuo. En los hechos psicológicos también ocurren este tipo de antinomias.

Es claro que existe una relación entre individuo y sociedad. Para comprender y aplicar esta relación, Elías encuentra que faltan modelos mentales y una visión global donde se pueda reflexionar, en qué existe una reunión de personas individuales que forman una sociedad y esta sociedad es capaz de cambiar, de manera determinada y que su historia no ha sido fijada ni planeada por ningún individuo.

Elías continúa la discusión al preguntarse si los seres humanos somos medios para un fin social o la sociedad está mediada para satisfacer al individuo, en este antagonismo plantea que lo importante es, buscar un equilibrio entre las necesidades individuales y las dinámicas del todo social-algo armónico. Superando esta cuestión veremos la verdadera relación existente entre individuo y sociedad.

Aunque la existencia humana no es del todo armónica, la sociedad

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