Paráfrasis de Aristóteles.

Paráfrasis de Aristóteles

Aristóteles decía que toda investigación y toda arte lo mismo que toda acción y elección parecen tender a algún bien, también con esto que dijo pudieron definir con toda pulcritud es el bien de todo aquello que dijeron a todas las cosas que aspiran también porque son gran número de acciones de las artes y ciencias como dio el ejemplo de que la medicina es la salud, el de la construcción naval que dijo que era la estrategia, la victoria y creo que el de la ciencia, la riqueza y economía también dijo algo que me encanto y era que si existe el fin de nuestros actos querido por uno mismo y que los demás por él, y que si era verdad que no siempre elegimos una cosa en vista de otra que teníamos en claro que el fin de lo último será entonces no solo lo bien, si no lo bien soberano y eso fue lo que me encanto de lo que dijo Aristóteles que lo que creemos lo bien de lo que hablamos es toda aquella competencia de la ciencia política. Este efecto tiene como propósito de cuales ciencias son necesarias en la ciudad y también cuales son las de cada ciudadano debe aprender y también hasta donde. Y lectura decía que en un momento la política se sirve de las demás ciencias y así como cada asunto demandan una idea adecuada y quien juzga en conjunto es porque posee una cultura general. Y dijo que esa es la causa de la que un joven no sea oyente de lecturas de la política pues decían que no tenían ninguna experiencia de las acciones de la vida de las que extrae la política de las propuestas y las cuales se aplica cada una de ellas. Y como el adolecente es acompaña sus pasiones escuchara estas escuelas vanamente y sin ningún provecho todo el fin de la política no es el conocimiento sino la acción. La política es la más excelso de todos los bienes en el orden de la acción del humano. También suponía que como la mayoría como los espíritus se llaman a ese bien de la felicidad, y se supone que es lo mismo vivir bien y obrar bien que ser feliz eso es lo que supone Aristóteles. Se hizo la pregunta de lo que buscamos y preguntémonos cual pudiera ser, por encima de todo y se di como respuesta la felicidad que eso es lo que creía ese efecto que tenía la escogerían por sí misma y jamás por otra cosa y que podías elegir cualquier otra cosa más tentadora, pero seguirías la que te tentara más felicidad por sí mismo y que nadie escoge la felicidad por causa de aquellas cosas ni en general de otra ninguna.

Y se manifestó Aristóteles en suma de que la felicidad es algo final y autosuficiente y que es el fin de cuanto lo hacemos. Por ejemplo, muy sencillo de que una golondrina no pase primavera ni tampoco un día el sol, de la propia suerte ni un día ni un corto tiempo hacen a nadie bienaventurado y feliz. Pensaba que el fin quedaba incluido con los bienes del alma y no entre lo exteriores porque estemos en lo justo por el hecho de afirmar que el fin consiste en varios actos y operaciones. También creo o creía que si el hombre era feliz es el que vivía bien y obra bien que, porque nosotros hemos definido la felicidad como una especie de vida dichosa y conducta buena, de que si la felicidad es cosa de aprendizaje o de costumbre o ejercicio o bien si nos viene por fortuna. También hay una solución del problema se desprende con toda claridad de nuestra definición de felicidad la cual han dicho de cierta especie de actividad del alma conforme a toda la virtud al paso que otros son por su naturaleza y útil por modo instrumental. Que cuando asentamos al fin de la política es el bien supremo, pero ahora bien la política pone su mayor cuidado en hacer a los ciudadanos de una condición que sean buenos y obradores de buenas acciones. Para la felicidad es menester una virtud perfecta y una vida completa. También que en ninguna obra humana encontraremos firmeza comparable a la que tienen los actos virtuosos más estables aun por lo que puede verse que nuestro conocimiento de las ciencias particulares. Por lo tanto, lo que buscamos es la estabilidad de cierto se encontrara en el hombre feliz que será tal por toda su vida pues siempre o casi siempre obrara y contemplara las cosas que son conformes con la virtud y llevara los cambios de fortuna con sumo decoro y guardara en toda una perfecta armonía ante todo como un barón verdaderamente esforzado y cuadrado sin reproche. Que parece así mismo ser así por la felicidad un principio pues por causa de ella hacemos todo lo demás y a lo que es principio pues por causa de los bienes lo reclamamos algo venerable y divino. Y dijo que había un verdadero hombre de estado y a parte parece que ha de estar ocupado de la virtud más que otra cosa alguna desde el momento que quiere hacer de sus conciudadanos hombres del bien y obedientes de la ley. Por virtud del humano la entenderemos no la del cuerpo, si no la del alma, y por felicidad de una actividad del alma.

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