SAN AGUSTÍN METAFÍSICA (CONOCIMIENTO)

SAN AGUSTÍN

METAFÍSICA (CONOCIMIENTO)

Fe y Razón

No se planteó como problema la relación entre fe y razón. Ambas debían colaborar con el esclarecimiento de la única verdad que no podía considerar otra que la verdad cristiana. Razón y fe al igual que filosofía y religión se funden en un único concepto de búsqueda de la verdad, a la sabiduría y a la felicidad. La filosofía conduce al hombre desde el conocimiento de sí mismo al conocimiento de Dios, desde la inquietud de la búsqueda, a una paz. La filosofía no tiene otra función que enseñar cuál es el principio de todas las cosas, es decir, Dios. El objetivo del hombre es la comprensión de la verdad cristiana y a ello colaboran la razón y Fe. Primero la razón ayuda al hombre a alcanzar la fe; después, la fe orienta e ilumina a la razón, finalmente, la razón contribuye al esclarecimiento de los contenidos de la fe. La felicidad no consiste en placer, sino en llenar las aspiraciones de su alma: la verdad es buscada por todos los hombres, ya sea a través de la razón o a través de la fe o religión. Pero estos dos caminos no se excluyen más bien se complementan, la razón no anula a la revelación, sino más bien la revalida, le da sentido. Dos aspectos de una unidad de armonía: “El hombre que piensa es un cristiano, y el cristiano es un hombre que piensa”. Pero no basta sólo la razón, ni la fe como acto del entendimiento, para poseer la verdad, es necesario el amor. Estas tres facultades del alma se recogen en la Trinidad.

Gnoseología

La razón de profundizar en el conocimiento no es meramente abstracta, sino existencial: la búsqueda de la verdad como única manera de ser feliz. Así, solamente el sabio es feliz. Los escépticos no tienen razón porque se contradicen es su mismo escepticismo,, ellos están seguros de algunas verdades. De este modo el escepticismo radical es siempre imposible. Es importante señalar que del “Si me equivoco, es que existo”, llega Descartes con el “Pienso, luego existo”.

La iluminación

La verdad es la meta que el hombre debe alcanzar, de esta forma adquiere la felicidad. Se distribuyen niveles de conocimiento:

-Sensible: Captación de los objetos, no se puede decir que exista conocimiento porque los sentidos lo impiden.

-Racional: Nivel propio del hombre, y le diferencia de los seres inferiores.

-Contemplación: Consiste en ver las ideas eternas tal cual son, es la auténtica sabiduría. En ella se llega a contemplar la verdad. Existe el conocimiento sensitivo, pero el alma racional consigue la verdadera certeza. Las sensaciones son privadas, pero las verdades universales son comunes a todos. Estas verdades universales se integran como pensamientos de Dios. Pero no podemos conocer la verdad inmutable a menos que esté iluminada por Dios. La iluminación divina hace visibles a la mente las verdades eternas. La mente humana, no puede captar la verdad inmutable, ni ninguna criatura puede iluminarse por sí misma. Las verdades no las podemos conocer por la experiencia. Lo único que nos puede hacerlas conocer es la luz divina.

La interioridad

El punto para buscar la verdad no está fuera, sino dentro. La verdad habita en lo más profundo del hombre. El pensamiento que busca la verdad ha de comenzar por sí mismo. Lo que encuentra el hombre en su interior indica que su propia naturaleza es mudable. Si los objetos no suministran estabilidad, hay que buscarla en el interior del espíritu. En su interior encuentra verdades inmutables. Estas verdades no pueden tener su fundamento sino en la inteligencia divina. Dios ilumina al hombre para que pueda conocer la verdad.

DIOS

La existencia de Dios no viene probada por un razonamiento. Dios aparece “demostrado” en el alma misma. El alma es capaz de captar adiós cómo verdad necesaria e inmutable. Este dios no es cualquier Dios filosófico, es el Dios cristiano revelado. El argumento gnoseológico señala a dios como consecuencia inmediata de la teoría del conocimiento, existe la verdad, porque es Dios su fundamento. El Argumento cosmológico señala que la creación apunta a Dios cómo verdad que está por encima de todo. Pero la verdad prueba de la existencia de Dios está en las verdades eternas, en las ideas a partir de su inmutabilidad y

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