Suicidio

Suicidio

“Suicidio, etimológicamente el término deriva del verbo latino "caedere" y del pronombre "sui", 'darse muerte a sí mismo'.”Para considerarse suicidio, la muerte debe ser un elemento central y el motivo del acto, y no sólo una consecuencia casi ineludible, por ende, el suicida debe causarse la muerte de manera consciente y adrede, infringiéndose el mismo un daño físico irreversible, que por consiguiente cause la muerte.

Así pues los mártires no pueden ser considerados suicidas puesto que lo hacen en nombre de sus creencias mas generalmente religiosas, tampoco se les puede llamar suicidas a aquellos que se sacrifican por otras personas en caso de emergencias, como es el caso de los soldados que mueren en plena batalla, o los que arriesgan su vida salvando otra, el suicidio heroico, en estos casos los muertos no llegan a ser proscritos por la ley.

Cabe mencionar que existen dos tipos de suicidio, el suicidio en el que el individuo muere por iniciativa y medios propios y el suicidio asistido que significa proporcionar en forma intencional y con conocimiento a una persona los medios, procedimientos o ambos, necesarios para suicidarse, en lo que al derecho concierne, en algunas jurisdicciones tanto el suicidio como el suicidio asistido están penalizados por la ley.

En el caso del suicidio, hay algunos países donde los suicidas que han fallado en su cometido, son procesados legalmente, faltando con tal acato a las leyes, siendo México una excepción del caso, puesto que aquí no se castiga el intento de suicidio, si no que los individuos son protegidos con medidas de seguridad para salvaguardar sus vidas, y se exige el que sean valorados por un psicólogo o por un psiquiatra, para poder determinar la causa de dicho acto, y si aquella causa tiene algún tratamiento médico, sin embargo en nuestro país si es castigado por la ley un suicidio asistido o en el caso de no evitar dicho acto, pudiendo hacerse, podría ser considerado como una omisión del deber de socorro.

He escogido el tema del suicidio ya que es considerado un problema, tanto social, moral, religioso y científico del que no se suele hablar con mucha frecuencia debido a los índices tan altos de descensos, dicho asunto constituye un problema de salud publica muy importante pero en gran medida prevenible, que provoca casi la mitad de todas las muertes violentas en nuestro país, esto es algo a lo que debemos como seres sociales que somos, prestarle un poco mas de atención, puesto que si lográramos averiguar, lo que lleva a estas acciones suicidas, podríamos prevenir cientos de muertes.

El suicidio es un acto moral, debido a que es un hecho consiente, voluntario y que presenta consecuencias tanto para el suicida como para quienes lo rodean, según el criterio de la sociedad, el suicidio es una acción inmoral o moralmente mala, por parte de quien lo lleva a cabo, siendo así una conducta autodestructiva, sin embargo, en algunas culturas, más específicamente culturas provenientes del oriente, lo consideran una manera honorable de morir, de poder escapar de algunas situaciones humillantes o sumamente dolorosas. Nuestra sociedad juzga severamente a quienes llevan a cabo dicho acto, tachándolos injustificadamente, de “locos” o “cobardes”, puesto que tiende a criticar lo que no comprenden.

El suicidio también se puede considerar un problema científico, interviniendo asi la sociología, la psiquiatría y la psicología. Dentro de la sociología, Durkheim (sociólogo francés), en la obra Le suicide (1897), distinguía tres tipos de suicidio: suicidio egoísta, señal de debilitamiento de los lazos sociales; es decir, al no estar lo bastante vivo o presente el sentimiento de solidaridad, con lo que se debilita la intensidad y la vitalidad de los grupos, se sigue una afirmación excesiva del yo individual.

El suicidio altruista, donde el exceso de integración del individuo puede causar la muerte voluntaria, como en el caso de la esposa que sigue la suerte del marido difunto o del anciano que se deja morir. Suicidio anómico: corresponde a momentos de profundo cambio, en los cuales la existencia colectiva se quiebra en un estado de exasperación ilimitada de las necesidades. En sustancia, según Durkheim, el suicidio está en relación con el grado de integración social de un determinado grupo o de una sociedad.

Por su parte, Gibbs y Martin han modificado la teoría de Durkheim en el sentido de la teoría de la integración en el status. En la sociedad una persona desempeña roles diversos; cuanto más fuerte es el conflicto que surge entre esos roles en la fase de integración en una imagen de status, tanto más elevada es la probabilidad de un caso de suicidio. Conflictos entre roles, choque entre posiciones diversas, contradictorias y no integrables tienen como efecto favorecer el suicidio.

Así pues, existe una profunda relación entre el yo la sociedad, entre el cuerpo propio y el cuerpo social. "El cuerpo marginado, privado de compromiso social en un intercambio social, afectivo; el cuerpo patológico, es decir, el cuerpo que sufre, constituye una condición de vida insoportable, manifiesta la dificultad de un paso que no puede darse en un marco social. Paradójicamente -pero el suicidio es indudablemente un proceder eminentemente paradójico- es posible que se trate de matarse para conquistar un reconocimiento corporal. Se ve aquí la ambivalencia de una práctica que, morbosa en apariencia, quizá sea la expresión interna de un deseo de vivir" (BAUDRY, 29).

Baudry nos habla de la influencia de la sociedad sobre nuestra persona, y como esta llega a afectar nuestros pensamientos y acciones en algunas circunstancias, pero no debemos olvidad que como seres humanos escogemos nuestro propio camino" ya sea en sociedad o como individuo, escogemos un camino.

Así pues otra rama científica que aborda el tema del suicidio es la psicología de donde viene una notable contribución al conocimiento de la realidad del suicidio. Habitualmente el suicidio está motivado como fuga y liberación de un estado de angustia debido a sufrimientos presentes o previstos, como acto de desesperación por una resistencia estimada imposible, como gesto de expiación o como último acto de libertad.

Otras veces el suicidio se entiende como gesto agresivo contra personas a las que se está ligado sentimentalmente -como padres, el hijo o hija propios-, presuntos culpables del sufrimiento. Otras de las causas más frecuentes se debe a los trastornos psiquiátricos, que comúnmente se acompañan de depresión o ansiedad, como por ejemplo, el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de pánico, el trastorno bipolar, la esquizofrenia

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