Tarea.
Enviado por zapato1599231 • 3 de Junio de 2013 • Práctica o problema • 3.237 Palabras (13 Páginas) • 221 Visitas
1.- Elabora fichas de trabajo sobre los siguientes aspectos de Platón.
Vida.
Platón nació en Atenas en el año 427 a. de C. y murió en su plenitud intelectual, en 347 a. de C. Pertenecía a una familia noble y antigua.
Vivió su vida en el mejor momento de la cultura ateniense y se educó en casa de su padrastro, que pertenecía a una clase distinguida, formándose seguramente en la tradición del gobierno de Pericles, y es probable que Platón interviniera durante la última parte de la guerra del Peloponeso.
Su nacimiento y vocación lo llamaban a la política, pero su atracción por Sócrates lo llevó a dedicarse a la filosofía. Pero después de la muerte de Sócrates se alejó de ella y regreso a los temas políticos y esto le hizo dar un puesto principal en su sistema de la teoría de los Estados o intentar por varias veces que su discípulo Dión realizara el ideal Estado platónico.
Siendo joven, recibió influencias de Crátilo, filósofo identificado con la doctrina de Heráclito, aprendiendo de él que el mundo que se percibe está en perpetuo movimiento, que fluye en forma permanente y que no se puede conocer objeto alguno de este mundo sensible en forma cierta; compartiendo con Sócrates la idea de que el conocimiento verdadero sólo puede ser conceptual.
Estos proyectos se frustraron y la actividad de platón se ciñó a su genial meditación filosófica que fundó, hacia 387, en una finca con arboleda dedicada al héroe Academo, y por eso la llamo Academia. Esta escuela perduro, aunque con profundas alteraciones, hasta el año 529 de nuestra era, cuando la mandó clausurar el emperador Justiano, por miedo de que fueran más los pensadores que se dieran cuenta de la situación que vivían en ese entonces. Platón ejerció en ella su magisterio hasta su muerte, en colaboración estrecha con su discípulo, Aristóteles.
Escritos.
La obra de Platón se conserva casi completa. Es incalculable la aportación Platónica a la formación del lenguaje filosófico.
Platón escogió como género literario para expresar su pensamiento el diálogo, que tiene una relación profunda con su doctrina de la dialéctica como su método filosófico. El personaje principal en sus diálogos es siempre Sócrates. Entre sus diálogos más importantes están: Los diálogos de juventud, la Apología, el Critón, el Eutrifón. En su madurez se sitúan entre los más importantes el Protágoras, el Gorgias, el Eutidemo (sobre los sofistas),
el Fedón (sobre la inmortalidad del alma), el Symposion o Banquete (acerca del amor), el Fedro (la teoría del alma) y la República (sobre la injusticia y la idea del Estado). Por último, el Teeteto, el Parmenides, el Sofista y el Político; y en los años de la vejez, Timeo, el Filebo y Leyes, el único diálogo donde no aparece Sócrates.
El pensamiento de Platón muestra una evolución que parte de la doctrina de Sócrates, llega a su genial descubrimiento de las ideas y culmina en la discusión de las dificultades y de los problemas que las ideas plantean, en dialogo con Aristóteles.
Ideas.
Platón se encontraba con el problema que la metafísica tenía planteado desde Parménides: con el problema de ser o no ser. El descubrimiento. Durante más de un siglo, la Filosofía helénica había luchado por resolver la aporía de hacer compatible el ente-uno, inmóvil y eterno-con las cosas-múltiples, variadas y perecederas-.
La Filosofía presocrática anterior a Parménides había sido una serie de intentos de solución de este problema central. En cambio, Platón da a la cuestión un giro decisivo, en el que descubre nada menos que la idea.
Platón busca el ser de las cosas, sobre lo que es y no es, o lo que es lo mismo, no es plena y verdaderamente. A este ser verdadero, distinto de las cosas, es lo que Platón llama idea.
Sócrates intenta decir que es lo que es, o sea, definir, descubrir y fijar las esencias de las cosas. En este punto concreto inicia Platón su filosofía.
La definición del sentido socrático y platónico parte del supuesto de la identidad y permanencia de los entes.
El ser de las ideas. La palabra “idea” quiere decir: aquello que se ve, en suma. La idea es, el supuesto del conocimiento y de la visión de las cosas como tales.
El ser verdadero, que la Filosofía venia buscando desde Parménides, no está en las cosas, sino fuera por ellas: en las ideas. Éstas son, unos entes metafísicos que encierran el verdadero ser de las cosas.
Platón inicia la división de la realidad en dos mundos: el de las cosas sensibles, que queda descalificado, y el de las ideas, que es el verdadero y pleno ser. El verdadero ser está en las ideas.
El mito de Fedro, que es uno de los diálogos más importantes de Platón explica, el origen del hombre, el conocimiento de las ideas y el método intelectual del platonismo. Así mismo, compara al alma con un carro tirado por dos caballos alados, uno dócil y otro díscolo, que circula por el mundo de las ideas, que el alma contempla así, pero no sin dificultad, los caballos pierden las alas y el alma queda encarnada en un cuerpo. El cual también explica que el recordar se llama el método del conocimiento.
Las cosas según Platón es lo que dice que son sombras de las ideas, por tanto las sombras son signos de las cosas.
Otro de sus diálogos más famosos es El mito de la Caverna, en el que representa la situación del hombre en su relación con la Filosofía; el cual simboliza que la caverna es un mundo sensible, con sus sombras, que son las cosas.
El esquema de los dos mundos. Platón distingue dos grandes regiones: el mundo sensible, que es el de las cosas y el mundo inteligible, que es el de las ideas. El cual tiene varios vínculos, uno de ellos es el Bien, que es el fundamento ontológico del ser de ambos mundos. De los cuales habla el Mito de la Caverna, cuyo tema es la esencia de la Filosofía, que queda inconclusa ya que Platón se queda en el mundo inteligible, retenido por sus problemas internos, para lo cual tiene que regresar a la caverna.
La estructura de la realidad.
En el libro VII de la Republica cuenta Platón un mito de fuerza sobrecargada, en el que representa simbólicamente la situación del hombre en su relación con la filosofía, y a la vez la estructura de la realidad.
Este procedimiento de Platón recuerda, con una esencial alteración del orden +, la técnica habitual de hacer comprender una verdad mediante una representación poética que esclarece y precisa de modo intelectual; por esta inversión de los términos revela que no se trata de un simple ejemplo metafórico,
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