Thomas Hobbes en este primer apartado comienza explicando que todos los hombres somos iguales tanto por el cuerpo como por el espíritu

LEVIATAN
THOMAS HOBBES

GLORIA HERNANDEZ RODRIGUEZ
SOCIOLOGIA.

Del hombre capítulos 13 y 14.

Thomas Hobbes en este primer apartado comienza explicando que todos los hombres somos iguales tanto por el cuerpo como por el espíritu, pero esto no significa que la persona que es más fuerte es superior al débil, por el contrario, el débil puede de igual forma defenderse a base de su fuerza e incluso podría ser triunfador dependiendo en la situación en la que se encuentre. Los hombres suelen ser tan iguales, que de esa igualdad surge la desconfianza y dudan de sus capacidades para lograr lo que desean. Si ambas personas desean y disfrutan de lo mismo se vuelven enemigos, esto trae consecuencias graves pues tratan  de a aniquilarse y algunas veces tratar de despojarse de sus pertenencias. Esta desconfianza trae como consecuencia la guerra y la anticipación es importante, el tratar de dominar por medio de la fuerza, siendo astuto a las personas que lo rodean hasta que nadie más sea capaz de amenazarle. Esta estrategia se utiliza para la conservación de cada quien y está permitido. Se debe de aumentar la fuerza por medio de la invasión ya que si no se hace esto, no se podrá subsistir y se debe de pensar antes que nada la conservación del hombre

Los hombres sienten un desagrado al reunirse cuando no hay un poder que tenga dominación de ellos, esto trae como consecuencia que quieran ser valorados por los otros como se valoran a sí mismo, además de que gracias al desprecio que tienen por el otro y sin un poder que los limite a destruir al otro arrancan una mayor estimación de sus contendientes.

Hobbes por medio de este análisis demuestra que hay tres tipos de discordancia en el hombre: La competencia es aquella que impulsa a los hombres a lograr algo que los beneficie y hace uso de la violencia, la desconfianza la cual utilizan para ganar seguridad y la gloria para atribuirse reputación utilizando la fuerza con motivos insignificantes.

 Dice también como lo he mencionado antes, que cuando los hombres viven en un tiempo en el cual no tienen  un poder común que les atemorice se encuentran en estado de guerra y por lo tanto los hombres viven de su fuerza y de lo que su condición pueda darles. En la guerra donde todos se atacan contra todos no hay injusticias, las leyes y los derechos se encuentran fuera de lugar, en la guerra el fraude y la fuerza se vuelven virtudes cardinales. También cuando están los hombres en este estado, no existe el dominio ni propiedad. Es posible que las condiciones en las que estas personas viven se puedan superar y esto sería gracias  a las pasiones y el uso de la razón.

En el siguiente capítulo nos habla de que la libertad es el derecho por naturaleza que los hombres tienen para usar su propio poder como mejor les convenga para la conservación de sí mismo. Define a la libertad como: “ La ausencia de impedimentos externos, impedimentos que con frecuencia reducen parte del poder que un hombre tiene al hacer lo que quiere, pero no puede impedirle que use el poder que le resta de acuerdo con lo que su juicio y razón le dicten.” (pp 106). Habla de la ley de la naturaleza la cual es una norma establecida por la razón, prohíbe al hombre el destruir su vida. Menciona que  el derecho natural es la norma que le permite hacer o dejar de hacer algo que sea perjudicial para la preservación de su vida de aquí resulta la ley general de la razón (de la naturaleza)  la cual busca la paz y seguirla, por consiguiente se predica la segunda ley la cual es defendernos a nosotros mismos, por cualquier medio. A veces es necesario renunciar a un derecho, como la libertad de hacer lo que quieran, para llegar a un estado de paz. Se renuncia o se transfiere un derecho para lograr el bienestar del otro. Hobbes más dice que si impide el beneficio de aquellos a los cuales les transfirió su derecho, es injusticia.

Nos habla acerca del contrato, la cual dice que es una mutua transferencia de  derechos entre hombres, se crea por el temor de que alguna de las dos partes no cumpla su palabra y que el estado civil ejerza. Hay de dos tipos: expresos y de inferencia. El contrato no  se puede romper porque quien transfiere un derecho también cede los medios para disfrutarlo mientras esté bajo su dominio y solo hay dos formas de liberarse de un contrato: Por cumplimiento o por remisión.  

Habla también del pacto a cual dice que es donde uno o ambos contratantes entregan su derecho un tiempo después de realizado el acuerdo. A menos que exista una fuerza común a ambos para obligar al cumplimiento, cualquier sospecha razonable es motivo de nulidad del acuerdo. No se pueden realizar pactos con las bestias. Ni con Dios, a menos que sea a través de sus representantes.

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