Trabajo Del Neoclasicismo

NEOCLASICISMO: 1770-1830

Es un arte profundamente racional, conformado a la Ilustración y se convierte en el arte oficial de la Revolución y permanecerá como referente estético prestigiado por largo tiempo. Es un arte a servicio de los ideales y de la moral de la misma Revolución Francesa y de la era napoleónica. Es el gran lenguaje, un engranaje de la empresa política que quiere promover y consolidar los cambios sociales radicales auspiciados por la burguesía que no se quiere aristocratizar y que ve en la Nobleza su gran adversario. El burgués que trabaja viene a cobrar sus derechos ante la Nobleza que seguía confiada a sus derechos por la sangre. El burgués francés del periodo es ilustrado, lector y que debate sobre arte, política…la instrucción crea el ciudadano juez que origina la crítica artística. Aquí se cristaliza el ideal del artista autónomo moderno y surgen los museos de arte, que ahora pasa a ser un patrimonio público y ya no de una única clase privilegiada. Las colecciones de los nobles son ahora patrimonio de todos los ciudadanos. La arqueología como ciencia metódica y sistemática recupera la Antigüedad con nuevos descubrimientos (1737: Herculano y 1748: Pompea). El relato histórico del arte como discurso emerge. Wilckemann escribe la primera historia del arte sobre el mundo antiguo (1764). La academia francesa dirigida por David monopoliza todo el control de lo que se refiere al arte. Se crean los salones, que son la instancia de discusión y reconocimiento público del arte. París es el gran referente artístico en Occidente. La Academia decreta la jerarquía de los temas y las pinturas históricas (épicas) son la cabeza de la lista.

DAVID, El juramento de los Horácios, 1784/85

La estética de la obra es económica, con rigor formal y frialdad para resaltar la claridad en la observación. La fuga es el juramento mismo (las tres espadas distintas). Habría sido considerado en su época el cuadro del siglo y es una grandiosa propaganda política a favor de la Revolución que se anunciaba. Los trillizos que quieren pelear para evitar el derramamiento de sangre (lucha entre tres emisarios de cada lado) y que aceptan defender Roma con su propio sacrificio es una señal absoluta de su patriotismo. No hay nada más importante que la república (la familia está abandonada en segundo plano); es un discurso de la moral ciudadana, política. La composición es lógica y sobria y las dimensiones son monumentales para lograr un impacto visual. El colorido remite a lo contemporáneo (Francia) en una composición de biometría y detalles exactos y sin ambigüedades.

DAVID, La muerte de Marat, 1793

Esa es una nueva concepción de pintura, gracias al nacimiento de una nueva moral generada por la propia Revolución. La pintura histórica, como se sabe, era un gran tema para la Academia Francesa desde tiempos de Louis XIV. El ahorro de recursos compositivos y plásticos, como el sobrio colorido, se aplica al presente político del pintor que es el gran iconógrafo de la Revolución, jacobino como su amigo muerto en la escena. El periodista del pasquín “El amigo del pueblo” era un ardoroso y hábil convocador de las masas; engañado por Charlotte Corday (girondina) es victimado durante uno de sus baños medicinales, a los que se sometía a diario. El apuñalamiento ocurre mientras el famoso periodista trabajaba en el escritorio improvisado. Marat se vuelve un mártir de la Revolución en la pintura, con el cuerpo idealizado – que evoca una PIETÀ política. La eliminación de elementos superfluos a su mensaje visual hace con que David logre resaltar e impresionar el espectador con el “sacrificio” de su amigo.

DAVID, Marte desarmado por Venus y las tres gracias, 1824

Con la derrota de Napoleón, también David, su pintor, es exiliado y pinta esa escena en Bruselas. El tema es meramente formal

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