Arquitectura Barroca

BARROCO, LA ARQUITECTURA Y EL URBANISMO

D. La diversidad europea

D1. Francia o el barroco clasicista

El barroco francés busca sus fuentes en el siglo XVI, por lo que no sigue el ejemplo del barroco italiano. Esto tiene como consecuencia el uso de los ordenes arquitectónicos según las normas clásicas, especialmente en las manifestaciones del poder real. Un claro ejemplo de este tipo de corriente arquitectónica, es la fachada exterior del palacio del Louvre, de Claude Perrault, en ella, las columnas, que sostienen un entablamento continuo, dejan de lado las funciones decorativas propias del barroco italiano, para cumplir las estrictamente estructurales de soporte.

Fachada exterior del Louvre

D1.1. Jules Handouin-Mansart

Mansart (1646-1708) fue un arquitecto de obras reales formado en el clasicismo, emplea los ordenes para organizar las fachadas sin recurrir al ornamento. Su iglesia de los inválidos recuerda el ideal renacentista por la planta de cruz griega inscrita en un cuadrado y con cúpula. La fachada consta de dos sobrios cuerpos de órdenes superpuestos y entablamento sobresaliente en la calle central, resaltada además por el frontón superior y la mayor aproximación de las columnas como remate se alza una cúpula, de gran verticalismo gracias a sus dos tambores.

Iglesia de los Inválidos de París

D1.2. El palacio de Versalles

El palacio de Versalles, construido por los arquitectos Louise Le Vau y Mansart, decorado por el pintor Charles Le Brun, y los jardines diseñados por el arquitecto André Le Nôtre, fue símbolo de la gloria ostentación y poder de la monarquía.

El edificio ocupa un gran espacio (casi 600 metros de longitud), y tiene dos alargadas, retranqueadas respecto a la parte central, en la fachada del jardín. Mansart, influido por el influjo italiano, distribuyó esta fachada en tres partes: el primero almohadillado, y una planta noble diferenciada del resto porque no se emplea el orden gigante. En cada ala sobresalen tres secciones de fachada en las que las pilastras se sustituyen por columnas.

Por el lado del palacio que da a la ciudad, se abre, en el cuerpo central, un patio de honor doble, de anchura decreciente, y en él confluyen, desde la ciudad de Versalles, tres largas avenidas convergentes.

Mapa del Paladio de Versalles

Fachada del palacio de Versalles

D2. Europa central católica: el barroquismo supera a Italia

En los países católicos centro-europeos (Austria, el sur de Alemania y Bohemia) barroco se desarrolla más tarde debido a la Guerra de los Treinta Años y sus grabes efectos económicos y demográficos. Ello explica la escasez de obras realizadas en el sigo XVII.

Con la paz y la vuelta a la actividad, en un primer momento trabajan arquitectos italianos, pero desde comienzos de siglo XVIII aparecen personalidades autóctonas importantes, como Johann Bernhard Fischer von Erlach (1656-1723), que se inspiran en la arquitectura de Bernini y Borromini. De Italia se toma el concepto de fusión de las tres artes, los recursos ilusionistas, el gusto por la curva y el movimiento, la columna salomónica, y la elipse como elemento clave para el trazado de plantas variadas y complejas. En cambio, los modelos para la arquitectura palaciega se buscan en Francia pero se conserva el esquema de fachada de Italia. También procede de Francia, en el siglo XVIII, la decoración de rocalla típica los interiores rococó.

La cúspide de este barroco las constituyen las iglesias del sur de Alemania (Baviera) y de Bohemia, cuya carga ornamental del interior llega, en el siglo XVIII, a limites equivalentes a los del barroco hispánico. Aquí se alcanzan algunas de las cotas máximas del ilusionismo Barroco, lumínico y espacial, con efectos pasmosos para el espectador. A veces, se concibe todo el interior de un templo como una imagen ilusionista, como en San Juan Nepomuceno, en Munich, de los hermanos Asam.

Iglesia de San Juan Nepomuceno en Munich

D3. Inglaterra: del gótico al clasicismo

En Inglaterra pervive, durante el VI, el estilo gótico Tudor. Por ello las formas clásicas no se introducen hasta finales de este siglo, a través de los tratados de Palladio y de los arquitectos que estudian su obra directamente en Italia. Este clasicismo de origen Palladiano se mantienen durante el siglo XVIII con el neoclasicismo, incluso en las colonias norteamericanas.

El arquitecto inglés más conocido de esta época es Christopher Wren (1632-1723), que sintetiza, junto a las influencias cincuecentistas, las del clasicismo, las del clasicismo francés. A él se debe el proyecto de la catedral de San Pablo de Londres (1675-1710), concebida como réplica protestante del Vaticano

Christopher Wren

San Pablo, Londres

D4. Arquitectura hispánica: de la sobriedad escurialense al hiperdecorativismo

El barroco hispánico es esencialmente decorativo, ya que el efecto ostentoso y deslumbrante se logra con la exuberancia ornamental y eso en su fase más intensa, ya

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