Guerra Civil Española

La Guerra Civil Española

La caída de la Dictadura del general Miguel Primo de Rivera y el descrédito de la Monarquía habían posibilitado la proclamación de la Segunda República Española. Los años que van desde 1931 a 1936 se convirtieron en fiel reflejo de las contradicciones de la sociedad española. De un lado muchos pedían un cambio social y económico profundo que acabara con el poder oligárquico en España. Del otro, ese mismo poder, apoyado por el Ejército y la Iglesia, luchaba por defender su posición privilegiada.

La Guerra Civil Española, comenzó en julio de 1936, a raíz de la sublevación del un sector del Ejército contra el gobierno de la Segunda República española, y concluye el abril de 1939 con la victoria de los rebeldes. El triunfo de éstos permitió la instauración de un régimen dictatorial encabezado por el general Francisco Franco, principal político y dirigente militar de derecha, que sustituyo al sistema parlamentario republicano.

En febrero de 1936 se celebraron elecciones en España, participaron distintos partidos tanto de izquierda como de derecha. La victoria del Frente Popular, representada por Manuel Azaña, trajo una serie de acciones que pretendían movilizar a la población en contra del gobierno electo, así estallaron diversas huelgas y violencia urbana.

Los intentos de derribar la República, dirigido por militares, se iniciaron en el momento en que se dan los resultados de las elecciones. En julio del mismo año, estalló la Guerra Civil en España con el alzamiento de los generales Mora y Franco. El bando sublevado representaba a las fuerzas de derecha y derecha extrema, es decir, a la España conservadora, rural y católica tradicional de los grandes propietarios agrarios; quienes se autodenominaron “nacionales”.

Ambos bandos al no contar con los recursos necesarios para la guerra, recurrieron inmediatamente a la ayuda extrajera. Es así que los nacionales recibieron el apoyo de las tropas Italianas y de Alemania. Mientras que por otro lado, el bando republicano contó con la simpatía de la URSS. Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña permanecieron neutrales a la guerra.

Son apoyados con armamento y municiones. Mussolini envía 30 bombarderos a Franco quien se encontraba en una posición difícil de desventaja. Hitler envía la legión Cóndor, escuadrilla que bombardeo la Guernica.

La sublevación por parte de militares, se dio porque estaban convencidos de que España sería comunista en pocos meses, ellos habían sido quienes en 1917 habían salvado a la Península del comunismo, por lo sentían el deber de volver a salvarla. El general Franco declaraba en estado de guerra en Tenerife y ahí explico los motivos del alzamiento:

Declaró que la anarquía y las huelgas revolucionarias estaban destruyendo a la nación; que la Constitución estaba suspendida; que ni la libertad ni la igualdad sobreviran en tales circunstancias; que el regionalismo estaba destruyendo a la unidad nacional.

El alzamiento se había propagado ya en varias regiones para finales de abril, el ejército se sublevaba bajo la justificación de llevar la justicia, la igualdad y la paz a toda España.

La nación española se encontraba dividida en dos zonas. Una vez que el gobierno de las diversas localidades se encontró en manos de los rebeldes, se formo una Junta de Defensa Nacional, que actuó como dirección política y en la que Francisco Franco, fue nombrado generalísimo del ejército y tras la muerte del General Sanjurjo, ocupó el mando con el cargo de jefe de gobierno de Estado. De esta manera se configuraba un nuevo Estado de corte autoritario, similar a los de Alemania e Italia.

Para febrero de 1939 la primera preocupación del jefe de Gobierno, era acabar con la guerra sobre la base de que no hubiera represalias. Se tenía así, tres condiciones para lograr la paz:

La independencia e integridad territorial es España tendrían que ser garantizadas; el pueblo habría de tener libertad para escoger la futura forma de gobierno; los soldados y oficiales republicanos habrían de recibir garantías de que no sufrirían represalias.

Para finales de febrero de ese mismo año, Francia e Inglaterra reconocieron al Gobierno nacionalista, asegurando así la victoria de Franco. El 1° de abril de 1939 Franco anunció al mundo su victoria, proclamando el final de la guerra.

La guerra civil española y su influencia en el arte

“No pinté la guerra, después de la Liberación,

porque no soy de esa clase de pintores que

van como un fotógrafo en busca de un gran

tema. Pero no hay duda de que la guerra

existe en los cuadros que entonces pinté.”

Picasso

La Guerra Civil Española reflejó el enfrentamiento ideológico entre la izquierda y la derecha europea, esto incidió sobre el pensamiento de los principales artistas de la época y se convirtió en un instrumento más de lucha entre ambos bandos, con ideologías distintas. Joan Miró, Salvador Dalí y Pablo Picasso son los principales y más reconocidos pintores españoles del siglo XX.

Durante la guerra, estos artistas, se mantuvieron fuera de España, no obstante esto les permitió expresar sus ideas de una manera más libre sin temor a represalias. La postura de cada uno frente al conflicto es distinta y tiene que ver con su propia ideología, carácter, vivencia personal e incluso en su concepción que tienen sobre el arte.

La actividad artística durante la Segunda República y la Guerra Civil, no cesa y se ve reflejado en las vanguardias que poco

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