Guzman Blanco
Enviado por ajmc • 28 de Septiembre de 2011 • 6.533 Palabras (27 Páginas) • 1.028 Visitas
Gobierno de Antonio Guzmán Blanco.
El ascenso al poder del General Antonio Guzmán Blanco se caracterizó como una etapa de dominación por los caudillos surgidos de la Guerra Federal (1859-1863). Este período se le llamó Período del Liberalismo Amarillo. En los períodos intermedios la presidencia fue ocupada por Francisco Linares Alcántara y por Joaquín Crespo. Antonio Guzmán, al asumir la presidencia, se dedicó a pacificar el país.
Guzmán, personalmente, dirigió el ejército y recorrió gran parte del territorio nacional para dominar a los guerrilleros azules. Esta medida era un escarmiento que Guzmán Blanco quería dar a todos los que pretendieran desconocer su autoridad absoluta.
Para 1870, la estabilidad política y social que necesitaba el país para recuperarse de la penuria en que se encontraba a causa de la Guerra Larga no se logró, a pesar de la estrategia política que impulsó Antonio Guzmán Blanco. Por varios años el gobierno tuvo que luchar contra fuertes levantamientos armados en distintas zonas del país y atender a las presiones sociales, muchas de las cuales se lograron controlar a través de acuerdos y negociaciones.
Sin embargo, en otras ocasiones recurrió a la violencia y a la represión. Para este momento el país era dirigido por algunos militares, un grupo de propietarios agrícolas, un reducido grupo de comerciantes y algunos políticos e intelectuales liberales.
Ninguno de estos sectores influyentes logró imponerse sobre el resto de la sociedad. Sólo las fuerzas militares representadas en el caudillismo, que por el consenso entre los caudillos locales reconocen la autoridad de Antonio Guzmán Blanco. Esta situación la va logrando poco a poco debido a sus tácticas políticas, ya que gobernó al país a través del caudillismo en tres períodos presidenciales no consecutivos, distribuidos en lo que se ha llamado, por el tiempo de duración, el Septenio (1870-1877), el Quinquenio (1879-1884) y el Bienio (1886-1888).
Aunque son catorce años en realidad, se consideran dieciocho, ya que en el tiempo transcurrido entre estos períodos las presidencias son ocupadas por hombres impuestos por el General Guzmán Blanco, quienes siguen fielmente su voluntad e imponen su continuismo. Durante dicho período los esfuerzos del gobierno se centran en dos objetivos: la creación del Estado Central y la transformación de las fuerzas productivas.
El Estado Central:
implicaba un cambio del sistema político venezolano en todos los aspectos. Estos cambios se lograron con una serie de políticas que implementó esta administración, en la búsqueda de crear un Estado capaz de implementar eficazmente su poder en todo el país, con capacidad de concentrar la toma de decisiones políticas y económicas e imponerlas al resto de la población.
Decretó la instrucción primaria obligatoria y gratuita, el matrimonio civil y la subordinación total de la Iglesia al Estado.
El mecanismo ideológico para conformar el Estado Central siguió siendo el liberalismo, apoyado en la idea de progreso, a diferencia de la ideología liberal de comienzos de la República.
Esta idea buscó hacer un llamado a la conciencia nacional y para ello se promulgó del decreto del 27 de junio de 1870, en el cual se establecía gratuitamente la instrucción primaria, así como la constante exaltación de los héroes de la Independencia, las fechas y valores patrios.
Otro mecanismo fue la publicación del periódico "El Venezolano", el cual fue el instrumento de propaganda oficial del gobierno. Igualmente, para crear este Estado, toma algunas políticas estratégicas, como el Situado Constitucional.
A través de esta política, Guzmán Blanco, logra incorporar a los caudillos locales al sistema político formal. Los vinculó económicamente al gobierno central para así restarles autonomía, pues al centralizar los recursos económicos estos no podían disponer de los fondos económicos que generaría la localidad bajo su control, y los mismos pasarían a formar parte del Fisco Nacional.
De esta manera se impuso una autoridad central que regularía el orden público en el ámbito nacional y así lograr cierto orden social. Los caudillos locales no contaban con recursos para levantarse contra el gobierno central ya que formaban parte de él.
Transformación de las fuerzas productivas:
El gobierno de Guzmán Blanco buscó estabilizar y centralizar los recursos económicos para financiar la estrategia política y económica que asumió como Estado Central. Para conseguir parte de este financiamiento se asoció con la Compañía de Créditos, fundada en 1870, la cual es formada por acaudalados comerciantes exportadores e importadores de Caracas. El gobierno recibió inmediatamente las cantidades que necesitaba con urgencia para cubrir los gastos corrientes. El gobierno, por su parte, puso a disposición de la Compañía para que tuviera capacidad de acción sobre el 85% de los derechos de importación de aduana en el Puerto de La Guaira, así como lo recaudado en las demás aduanas terrestres. Se impuso el Impuesto General al transporte y el Impuesto de Tránsito sobre los productos nacionales y sobre las mercancías y víveres que salieran del país en sustitución del impuesto de peaje.
El 11 de septiembre de 1872, la Compañía de Crédito se convierte en el Sistema de Juntas de Fomento, encargada de administrar las obras de infraestructura y el presupuesto asignado para ello. Una parte de esos ingresos se destinaron para transformar la arquitectura de las principales ciudades del país, especialmente Caracas, copiando formas arquitectónicas francesas. Se construyeron bulevares, inmensos edificios públicos, monumentales arcos y estatuas conmemorativas, incluyendo algunas en honor al mismo Guzmán Blanco. Se dotó a las principales ciudades de cloacas, alcantarillas, servicios eléctricos y una red de teléfonos para Caracas y otras ciudades.
En 1874 se sancionó una nueva Constitución. Esta nueva se diferenció de la de 1864 en sólo tres aspectos: el sufragio directo, público y firmado; el período presidencial de dos años, iniciándose el 20 de febrero, la supresión de los designados y la prohibición de la reelección.
En ese mismo año (1874), Guzmán Blanco enfrentó la oposición armada de sus antiguos aliados, los generales José Ignacio Pulido y León Colina, quienes criticaron las reformas constitucionales propuestas por el Presidente.
La pacificación del país en 1877 permitió la elección del candidato guzmancista Francisco Linares Alcántara. Una vez elegido, se distanció de Guzmán y trató de hacer un gobierno autónomo, popular y apegado a las normas constitucionales, liberando a los presos políticos y permitiendo igualmente
...