HOBSBAWM, Eric., LA ERA DEL CAPITAL, 1848-1875., Ed. CRÍTICA, Barcelona, 1998
Enviado por elis • 24 de Abril de 2014 • 6.006 Palabras (25 Páginas) • 846 Visitas
1. INTRODUCCIÓN:
En 1860 entró una nueva palabra en el vocabulario económico y político del mundo: “capitalismo”. Triunfaba, así pues, una sociedad que creía que el desarrollo económico se encontraba en la empresa privada competitiva y en el éxito de comprarlo todo en el mercado más barato para venderlo en el más caro. Los años que fueron de entre 1789-1848 estuvieron dominados por una doble revolución:
-la transformación industrial iniciada en Gran Bretaña.
-la transformación política y limitada a Francia.
El año 1848, “la primavera de los pueblos”, fue la primera revolución europea en sentido literal, se realizaron los sueños de la izquierda, las pesadillas de la derecha, el derrocamiento de los viejos regímenes de la mayor parte de Europa Continental, pero fracasó universal y rápidamente. El triunfo burgués fue breve e inestable.
2. RESUMEN:
PRIMERA PARTE:
-PRELUDIO REVOLUCIONARIO:
1. “LA PRIMAVERA DE LOS PUEBLOS”:
A principios de 1848, Tocqueville, pensador político francés, se levantó en la Cámara de Diputados para decir que soplaba aire revolucionario. Al mismo tiempo, Karl Marx y Engels perfilaban los principios de una revolución proletaria. En ese mismo año se publicó el Manifiesto del Partido Comunista, a las pocas horas, las esperanzas y temores parecían hacerse realidad. La insurrección derrocó a la monarquía francesa, se proclamó la república y comenzó la revolución europea. La revolución que empezó en Francia, llegó rápidamente a Alemania, Hungría, Italia. Esta revolución afectó tanto a las zonas desarrolladas como a las que no lo estaban del continente, aunque fracasó a los 18 meses.
La revolución triunfó en todo el gran centro de Europa pero no en la periferia. La zona revolucionaria comprendía a Francia, Confederación Alemana, Imperio Austriaco hasta el sureste de Europa e Italia (Calabria), Transilvania, Renania, Sajonia, Prusia, Sicilia, etc, zonas gobernadas por monarcas absolutos.
En Occ. Los campesinos eran libres, pero en Or. Eran siervos y los nobles terratenientes.
En Occ., la clase media eran los banqueros autóctonos, comerciantes, empresarios capitalistas, los que practicaban profesiones liberales y funcionarios (profesores). En Or. El equivalente a la clase media era el sector educador y de mentalidad negociadora.
Entre el verano y el final del año, los viejos regímenes recuperaron el poder en Alemania y Austria. En el invierno solo dos regiones seguían aún en manos de la revolución (zonas de Italia y Hungría), aunque fueron reconquistadas en 1849. Con la excepción de Francia, todos los antiguos gobiernos habían recuperado el poder. Se abolió la servidumbre en el Imperio de los Habsburgo.
Las revoluciones de 1848 fueron revoluciones sociales de los trabajadores pobres, los que murieron en las barricadas urbanas. La revolución solo mantuvo su ímpetu allá donde los radicales eran lo bastante fuertes y se hallaban vinculados al movimiento popular como para arrastrar consigo a los moderados o no necesitados a éstos.
Entre 1848-1849, los liberales moderados hicieron 2 importantes descubrimientos en Europa Occ. : que la revolución era peligrosa y que algunas demandas podían satisfacerse sin ella. Las clases medias bajas radicales (artesanos descontentos, pequeños tenderos, agricultores, etc) constituían una fuerza revolucionaria, eran la izquierda democrática.
Las fuerzas de los pobres de la clase obrera eran desproporcionalmente efectivas. Entre ellos, el grupo activista más consciente eran los artesanos preindustriales. Las revoluciones de 1848 demostraron así, que en los sucesivo, las clases medias, el liberalismo, la democracia política, el nacionalismo y las clases trabajadoras, serían los rasgos permanentes del panorama político.
SEGUNDA PARTE:
-DESARROLLOS:
2. EL GRAN “BOOM”:
La etapa que va desde 1848 hasta la década de 1870 se caracteriza por la rápida transformación y expansión económica, período en el que el mundo se hizo capitalista y una significativa minoría de países “desarrollados” se convirtieron en economías industriales. Las exportaciones británicas aumentaron con gran celeridad. Los artículos de algodón británicos incrementaron su índice de crecimiento por encima de las décadas anteriores.
La exportación de hierro desde Bélgica se dobló entre 1851-1857. Los puestos de trabajo aumentaron a pasas agigantados, tanto en Europa como en ultramar. Para los capitalistas, la abundante mano de obra resultaba “barata”.
En medio de esta expansión económica había un vacío político, que resurgió a partir de 1859.
En el mundo del capitalismo, las grandes ferias internacionales iniciaron y sufragaron la era de su victoria mundial. Cada certamen se celebró en un monumento dedicado a la riqueza o al progreso técnico, como el Palacio de Cristal de Londres (1851), en el que 14000 firmas exhibieron sus productos.
En la primera mitad del S.XIX, la industrialización capitalista creció de manera espectacular, pero fue incapaz de ampliar el mercado para sus product5os. La temprana economía capital descubrió lo que Marx denominó como su “largo supremo”: el ferrocarril. Debido al ferrocarril se logró también el buque de vapor y el telégrafo (medios de comunicación adecuados para los modernos medios de producción.
El comercio mundial entre 1800-1840 no se había doblado por completo, entre 1850-1870 aumentó un 260%. El proceso de liberalización estimuló la empresa privada, además contribuyó a la expansión económica.
El libre comercio internacional era para los británicos vender libremente a precios bajos en todos los mercados del mundo, además ellos estimulaban a los países subdesarrollados para que les vendieran a precios económicos y en grandes cantidades, sus productos (alimentos, materias primas), así con ese dinero compraban manufacturas británicas.
Las economías industrializadas vieron dos ventajas: -espectacular expansión del comercio mundial en general, benefició enormemente a los británicos y resultó ventajosa para todos.
-Fue muy útil para Gran Bretaña la ventaja de contar con el equipo adecuado, los recursos y el conocimiento de cómo llevarlo a cabo.
El S.XIX será el siglo de los caballos de vapor y de los productos asociados al carbón y al hierro. La introducción de los ferrocarriles y de los barcos de vapor estaban introduciendo la potencia mecánica en todos los continentes.
Al principio del período eran Gran Bretaña y Bélgica los únicos paciesen donde la industria se había desarrollado intensamente.
La industrialización alemana también fue un hecho histórico de
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