ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Invariantes De Celestine Freinet


Enviado por   •  14 de Junio de 2013  •  2.626 Palabras (11 Páginas)  •  415 Visitas

Página 1 de 11

Las invariantes pedagógicas

La naturaleza del niño

Invariante no. 1: El niño es de la misma naturaleza que el adulto

El niño se nutre, siente, sufre, busca y se defiende exactamente como nosotros, sólo que con ritmos diferentes que proceden de su debilidad orgánica, de su ignorancia, de su inexperencia, y también de su incomensurable potencial de vida, a menudo peligrosamente alcanzado en el adulto. El niño actúa y reacciona en consecuencia, y vive exactamente según los mismos principios que nosotros. Entre nosotros y él no hay una diferencia de la naturaleza, sino solamente una diferencia de grado.

Invariante no. 2: Ser mayor no significa forzosamente estar por encima de los demás

Ponernos al nivel de nuestros alumnos, así penetraremos de lleno en la pedagogía moderna. Empezar nosotros mismo a reflexionar y reconsiderar nuestras actitudes y nuestro comportamiento pedagógico.

Invariante no. 3: El comportamiento escolar de un niño está en función de su estado fisiológico, orgánico y constitucional

Existe la tendencia a considerar inhumanamente que el niño que trabaja mal o se comporta de un modo reprensible lo hace de forma intencionada y por malignidad. Algunos de estos hábitos son a veces adquiridos, soportando nosotros las consecuencias, lo cual no quiere decir que el niño sea totalmente responsable de los defectos que se manifiestan en él. Los niños son sencillamente igual que nosotros. Frente a las deficiencias de comportamiento que constatemos, tratar de preguntarnos si no existen motivos de salud, equilibrio, de dificultades ambientales que habría que revisar en primer lugar. Tratar de corregirlas. Si no se puede, al menos actuar con mucha más razón y humanidad, y a la vez mejorar el clima de nuestra clase.

Las reacciones del niño

Invariante no. 4: A nadie le gusta que le manden autoritariamente; el niño, en eso, no se distingue del adulto

Por principio, todo mandato autoritario es siempre un error. El niño no tiene suficiente experiencia y que hace mucha falta que le orientemos y que a veces le impulsemos hacia donde quisiera ir. Nos corresponde a nosotros buscar una pedagogía que permita que el niño escoja al máximo la dirección por la cual deba ir y donde el adulto mande con la menor autoridad posible. Ofrezcámosle la libertad de escoger y todo se hará ordenadamente. Mandar autoritariamente es un error. Evitar el error siempre será saludable.

Invariante no. 5: A nadie le gusta alinearse, porque alinearse es obedecer pasivamente a un orden externo

Existe una cierta disciplina necesaria para la convivencia de los grupos más o menos bien organizados. Los niños la comprenden, la aceptan, la practican, la organizan ellos mismos si sienten su necesidad. Es esta disciplina la que debe buscar. Pero es preciso desterrar todas las alineaciones cuya necesidad no sea sentida por el niño, pudiendo realizarse por medio de la organización cooperativa. Puede existir orden y disciplina sin la autoridad embrutecedora.

Invariante no. 6: A nadie le gusta verse obligado a hacer determinado trabajo, incluso si este trabajo no le desagrada particularmente. Es la obligatoriedad lo que paraliza

La primera reacción del niño o del adulto al que se le da una orden autoritaria es decir automáticamente: ¡No! La oposición sistemática es una fase de esta lucha. El niño se adaptará en seguida si se disciplina. Hay aquellos que no aceptan esta autoridad brutal, y que serán los insumisos, los cabezotas, los inadaptados, con todas las complicaciones individuales y sociales que se desprenden. Esta oposición da como resultado que ciertas actividades se recubran con una especie de velo maléfico, puesto que son ordenadas. Así resulta que se olvida lo aprendido, nacen las fobias, las anorexias y los complejos graves que una buena pedagogía evitaría.

Invariante no. 7: A cada uno le gusta escoger su trabajo, aunque la elección no sea la más ventajosa

Dar a los niños la libertad de escoger su trabajo, de decidir el momento y el ritmo de este trabajo y todo habrá cambiado. Dejarles la libertad de escoger, como lo hacemos mediante el texto libre, y el trabajo se realizará entonces en un clima mucho más favorable.

Invariante no. 8: A nadie le gusta dar vueltas en el vacío, comportarse como robot; es decir, actuar, someterse a pensamientos inscritos en rutinas en las que no participa

Sustituir el trabajo escolástico por actividades motivadas, que constituyen la razón de ser de nuestra pedagogía. En este caso nos veremos obligados con mucha frecuencias a amoldarnos a la realidad, a adaptarla, lo mejor posible, a nuestras técnicas, y a crear, en ese ambiente que condenamos, elementos de libertad y progreso,

Invariante no. 9: Es preciso que motivemos el trabajo

Lo que hemos aportado de nuevo a la pedagogía es esta posibilidad técnica de realizar eficazmente en nuestras aulas un trabajo animado, un trabajo de marido cariñoso. Los niños comprenderán en seguida cuáles son las actividades motivadas y las que sólo están presentes en función de la escuela.

Invariante no. 10: Basta de escolástica

La escolástica es una regla de trabo y de vida particular de la escuela que no es válida fuera de ella, en las diversas circunstancias de la vida para las cuales no sabría preparar.

Invariante no. 10 a: Todo individuo quiere conseguir éxitos. El fracaso es inhibidor, destructor del ánimo y del entusiasmo

Hacer siempre que nuestros niños tengan éxito. Practicar una pedagogía que permita que los niños tengan éxito, presenten trabajos hechos con amor, realicen pinturas o cerámicas que sean obras maestras, den conferencias aplaudidas por la audiencia. Hace falta que cambiemos toda la fórmula de la escuela, así como el papel del educador que, en lugar de ser tan sólo un censor, sabrá promover su papel ante todo de ayuda.

Invariante no. 10 b: El juego no es lo natural en el niño, sino el trabajo

Nosotros vamos contracorriente de la psicología y de la pedagogía contemporánea afirmando esta invariante de la primacía del trabajo. Nuestra pedagogía es justamente una pedagogía del trabajo. Nuestra originalidad es la de haber creado, experimentando, difundido instrumentos y técnicas de trabajo cuya práctica transforma profundamente nuestras clases.

Invariante no. 11: La vía normal de la adquisición no es de ningún modo la observación, la explicación y la demostración (que constituyen el proceso esencial de la escuela), sino el tanteo experimental, procedimiento natural y universal

Parecer ser que para una cultura verdadera se requiere el tanteo experimental. Los trabajos científicos experimentales son el primer reconocimiento oficial de este proceso universal.

Las técnicas educativas

Invariante

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (16 Kb)
Leer 10 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com