La Convivencia Entre Culturas

Históricamente existieron cinco núcleos, reinos, en la península Ibérica, donde al final de la alta edad media, coexistían diferentes culturas y religiones, de las cuales tres religiones fueron las mas trascendentes, la religión cristiana, judía y musulmana. En las zonas musulmanas se destacaba la existencia de un estado unitario bastante poderoso, primero el emirato y luego el califato, pero después de los años de pugnas, este se disuelve formándose pequeños reinos llamados taifas. Desde este entonces las zonas cristianas comienzan un proceso expansivo y evolutivo, donde los núcleos comentados se reducen a cinco reinos, el Reino de Castilla, el Reino de Portugal, el Reino de Navarra, el Reino de León y la Corona de Aragón.

A continuación se presentaran los hechos más relevantes de estos reinos, con el fin de poder analizar y comprender la diversidad cultural que existía en la península ibérica y como esta influyo en la formación de España, por lo que cabe preguntarse ¿Es posible hablar de convivencia pacífica entre judíos, cristianos y musulmanes? Los núcleos de identidad señalados ¿convivieron o sólo se enfrentaron? ¿Cuál es el papel de la Iglesia católica al interior de una sociedad multicultural? ¿Qué diferencias hubo en estas relaciones? ¿Depende de cada grupo la manera en que se establecerán estas?

Las circunstancias nos daban a suponer que la conquista, o reconquista, de los territorios que aun eran musulmanes se lograría antes de que finalizara el siglo XIII. Pero los constante enfrentamientos sociales entre los distintos reinos cristianos y los estallidos de conflictos, se origino un periodo de turbulencias entre cristianos y musulmanes, lo que permitió al islam se instalara en el nuevo reino de granada, aunque como tributario del reino de Castilla.

Por otro lado tenemos a Alfonso X, quien a pesar de su condición de estadista fue un promotor de una política literaria y cultural, fue el primero en redactar una “Estoria de España”, siendo así uno de los grandes beneficiarios de una gran cantidad de corrientes culturales que influían en Castilla en el siglo XII, pero que habían tenido su centro en Toledo, donde coexistían, hombres de letras de las tres culturas y las tres religiones

Una de las grandes pruebas señaladas en el documental, es que a pesar del constante sentimiento de enfrentamiento, debido a las diferencias culturales que existían en aquella época, existe una prueba de una convivencia pacífica de las tres culturas, donde se ve reflejado en el epitafio del sepulcro de Fernando III el Santo, en la catedral de Sevilla, el cual está redactado en árabe, hebreo, castellano y latín.

Por otro lado las conquistas realizadas por el pueblo cristiano, se lograron gracias a la simultaneidad de haber traído pobladores del norte para ocupar las tierras. Lográndose establecer cambios jurídicos para que no se abandonaran aquellas tierras. Con esto se originó tanto una mejora de sus condiciones materiales como el impedimento desplazamientos hacia el sur. Este proceso de poblar fue en base a una organización político-administrativa, que aseguraba la existencia estable de un poder dominante.

A medida que transcurría el tiempo, los núcleos urbanos fueron perdiendo una buena parte de su fuerza económica, pero con la entrada de los burgos, aquellos le suministrarían los productos necesarios para un comercio activo. Por el lado de Castilla y León, la ganadería comenzaba a adquirir un papel importante, debido a la insuficiencia demográfica y a las especiales condiciones que hacen que los pastores sean al mismo tiempo guerreros. Donde las agrupaciones de ganaderos se crearían para encontrar nuevas tierras, a costa de los concejos vecinos o de los propios musulmanes.

En cuanto a la lengua latina y su descomposición aparecieron las lenguas romance, donde el mozárabe, el galaico-portugués, el castellano y el catalán fueron las más importantes de la Península. Cabe mencionar que los primeros textos no se ajustaban a una única norma ortográfica y sería a partir del rey Sabio, se produjo una cierta uniformidad en los documentos, publicando sus obras en castellano en vez de en latín.

El nombre español fue dado por quienes percibían como conjunto una tierra dividida entre musulmanes y cristianos, y subdividida entre éstos en gallegos, castellanos, aragoneses, catalanes, etc. Con estos avances castellanos coincidieron con la expansión de la corona de Aragón. De esta forma, el territorio hispánico en poder musulmán quedó dividido entre Castilla y la corona de Aragón. “si no podía mantener unida a él a toda la gente de su reino, que retuviera por lo menos a dos clases, la Iglesia y las villas y ciudades de su tierra, porque son gente que Dios ama más que a los caballeros; los caballeros se sublevan contra el señorío más pronto que los otros, y contando con los eclesiásticos y con el pueblo, cabe destruir a los caballeros...”

Análogamente tenemos la influencia del derecho romano, el cual intentó poner orden en la vida pública, con regulaciones y leyes que eran iguales para todos, ya que se revelaban caminos distintos en relación a las corrientes ideológicas. Además, fruto del mestizaje de culturas surgen figuras universales Ramón Llull, el cual redacta tratados filosóficos en el cual se uniría ambas verdades al declarar que la verdad de la fe puede ser probada por la razón. En su obra el “Libre del gentil i els tres savis”, se hace referencia a la convivencia de un cristiano, un musulmán y un judío platican amistosamente, sin utilizar la menor acritud mientras exponen los contenidos de sus respectivas creencias.

La relación tanto de los monarcas cristianos como de los califas musulmanes, su espíritu tolerante, se fragmentó en la Baja Edad Media debido a las discrepancias y múltiples problemas internos y las desgracias de campesinos y menestrales. Algunas medidas “racista” que surgieron en aquella época, se dirigieron preferentemente contra la minoría judía, quizá por su demasía y su especialización bancaria y también por el lado de los pobres agricultores musulmanes quienes sorteaban mejor la anarquía.

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