Presentacion a la semiótica desde sus orígenes hasta la ciencia en su complejidad.

EL ÉXTASIS DE LOS SIGNOS

OBJETIVOS

Objetivo general:

• Presentar a la semiótica desde sus orígenes hasta la ciencia en su complejidad.

Objetivos específicos:

• Conocer el ambiente, época, en la que se desarrolló Charles Sanders Peirce y en cómo influyó en sus escritos.
• Exponer las ideas de semiología (Saussure) y semiótica (Pierce) para encontrar la diferencia y entender más el contexto del tema específico.
• Esclarecer los términos semióticos desde el punto de vista de Pierce.

DESARROLLO DEL TEMA

Charles Sanders Peirce retomó el concepto de semiótica de John Locke, pero fue más allá y se comprometió tanto con el tema que llegó a tomarlo como una pasión. Se deleitaba nombrando áreas del saber con nombres nuevos. El éxtasis mayor lo alcanzó con la clasificación de los signos. De esta clasificación se desprenden teorías acerca de los íconos, los índices y los símbolos que hoy son de incuestionable valor. Afirmaba que el pensamiento puede llegar a ser pasión y que sólo se puede conocer algo cuando se lo ama. Además buscó sentido al origen de la vida y del universo: inicio, desarrollo  y evolución. Creyó que, a pesar del caos, existe un orden.

La ciencia y el conocimiento son sociales, no hay individuos aislados que realizan este proceso sino son producto de mecanismos colectivos.

En general Peirce tuvo una vida desdichada, marginal. Con carácter volcánico. Siempre quiso ser alguien que en realidad no fue. Buscaba reconocimiento en lo que hacía, pero terminó siendo visto como un arribista, arrogante. Esta marginalidad de Peirce se entiende en dos puntos:

Primero porque toda su vida fue un encadenamiento de errores que lo llevaron a la exclusión de los lugares a los que había accedido.

Segundo, fue un marginal porque propuso la creación de una disciplina, la semiótica. Donde habla de la interpretación ilimitada que es “semiosis infinita”. Hay una comunidad de interpretadores e interpretantes y estos a su vez producen nuevos interpretadores e interpretantes, y estos a su vez vuelven a producir más y así la cadena sigue infinitamente.  

La Hermenéutica ya adelanta el pensamiento de que la verdad es el fruto de la interpretación, pero Peirce señala un fin inalcanzable e inagotable. No se cerró, como en su tiempo, en que las interpretaciones eran únicas sino que había infinidad de ellas. Se juega por la libertad en un país donde a la hora de ejercerla se la escamotea.

La semiótica perciana es fija y precisa pero también se basa de recursos prestados de otras disciplinas. Puede interpretar, reinterpretar y tratar fenómenos tanto abstractos como concretos y complejos. La semiótica habla del sentido, la significancia, los significados sociales, interpretaciones individuales y sociales. La clasificación de los signos deben ser vistas como mecanismos de organización del pensamiento y no como enumeraciones que solo le sirven al especialista.

Peirce conoce los movimientos característicos de la modernidad pero responde en clave de otro momento histórico, esto lo convierte en marginal.

Es importante aclarar que la semiología y semiótica tienen diferencias.

Semiología es planteada por Saussure, desarrollada en Europa en el siglo XIX, destinada a estudiar los signos dentro de la vida social que parte de la psicología social. El modelo de análisis para Saussure es la Lengua. Afirma que el hombre es lo que nombra; es su capacidad de nombrar. Desarrolló la diferencia entre lengua (social) y habla (ejecución individual). El signo para él es la entidad psicológica que une dos planos: significado y significante, y como resultado de ellos está la significación.

Semiótica es planteada por Peirce, desarrollada en EE.UU y Gran Bretaña en el siglo XIX, destinada a estudiar el estudio del signo. Para Peirce no es la lengua el modelo de análisis, sino es parte de un sistema mayor como el pensamiento y razonamiento (permite reconocer la existencia de signos). El lenguaje es el resultado de saber que las cosas nombradas han sido signos que desencadenan mecanismos de razonamiento en donde “algo” está en lugar de otra cosa y un nombre ocupa el lugar de la cosa y ene nombre a su vez permite que se lo interprete, traduciéndolo en otros signos y así infinitamente. Peirce ubica a la semiótica dentro de una clasificación de la ciencia, otorgándole una función similar a la lógica. Detalla tres sitios de trabajo: gramática, lógica, retórica. Produce que aparte de la noción del signo, cada uno tiene perspectiva distinta. En cuanto a la significación, su postura es pragmática en la que los signos definen acciones y conductas. El significado se extrae no internamente sino externamente a partir de la acción provocada por el signo. Contempla las conductas no desde el deseo de los protagonistas sino desde el efecto.

1. Escenarios y escenas de una vida

Básicamente se refiere a la vida de Pierce, ya que en este caso las circunstancias por las que atravesó permiten comprender mejor el conjunto de su obra y de su teoría. Pierce nació en Estados Unidos en 1839 y murió en 1914. Fue considerado casi un genio en su juventud, ya que dominaba la química y lógica. A los 20 años ya sabía que poseía una personalidad era su enemiga. Su vida adulta fue un ciclo de autocompasión y autorreproche. Su formación básica fue de matemáticas, física, astronomía y química pero dedicó más tiempo de su vida a la lógica. Como ya mencioné antes, la vida de Peirce fue trágica, marginal. En su época no le dieron la importancia merecida. Sus aportes fueron recopilados póstumamente. El filósofo Paul Weis, en referencia de Peirce, lo llamó “el lógico más original y versátil de los filósofos americanos y el más grande lógico”. Mumford también se refirió a Peirce y deploraba el hecho de que no hubiera sido publicado su trabajo, a quien consideraba entre los más grandes pensadores.

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