REGLAS RELATIVAS A LA OBSERVACION DE LOS HECHOS SOCIALES

a).- La postura epistemológica de Durkheim.

En el momento en que un orden nuevo de fenómenos deviene de una ciencia, se encuentra ya representada en el espíritu, no solo por imágenes sensibles, sino también por conceptos groseramente formados; la reflexión es anterior a la ciencia, que no hace sino servirse de ella como un método mejor. El hombre no puede vivir en medio de las cosas, sin formular sus ideas sobre ellas.

La regla principal es tratar los hechos sociales como si fueran cosas. Tratar los hechos sociales como cosas es para Durkheim una regla metodológica; no un principio de filosofía social. Se trata de no ceder a la tentación de la sociología espontánea ni de la especulación. La investigación en el campo de las ciencias sociales exige extremar la rigurosidad puesto que tratamos con u objeto huidizo. La introducción del método empírico y el esfuerzo por objetivar lo que se investiga tratan de investigar ese peligro. En esto consiste el paso de la “filosofía social” a una ciencia social. Tras esta regla se halla el esfuerzo de Durkheim por investigar los hechos de la vida social según el método de las ciencias positivas.

Para que una idea suscite bien los movimientos que reclama la naturaleza de una cosa, no es necesario que exprese fielmente esta naturaleza, sino que basta con que nos haga sentir lo que las cosas encierra de útil o de desventajosa, aquello en que nos puede servir y aquello en que nos puede contrariar.

Los hombres no han esperado a la ciencia social para forjar sus ideas respecto del derecho, de la moral, de la familia, del Estado y de la misma sociedad, pues estos hombres las necesitan para poder vivir. Las cosas sociales solo se realizan por los hombres; son un producto de la actividad humana. Estas cosas no parecen tener más misión que la de poner en práctica determinadas ideas, innatas o no, que llevamos en nosotros, su aplicación a las diversas circunstancias que acompañan a las relaciones de los hombres entre sí.

Durkheim se daba cuenta de que las observaciones, asimismo, las ciencias naturales, incluye un observador y sus sentidos, y por consiguiente las observaciones pueden “contaminarse” con la subjetividad de este. Aquí la recomendación es que, para que una observación sociológica sea objetiva es separar los hechos de la manifestación individual, de la experiencia y de la obviedad.

b).- Construcción del conocimiento científico a partir de la ruptura con el conocimiento de sentido común, con las ideologías y valores.

Los fenómenos sociales son cosas y deben ser tratadas como tales. Tratar los fenómenos como cosas, es tratarlos como datos que constituyen el punto de partida de la ciencia. Los fenómenos sociales presentan de una manera incontrolable este carácter. Lo que se nos da, no es la idea que los hombres forjan el valor, pues ésta es inaccesible, sino los valores que se cambian realmente en el curso de las relaciones económicas.

Es posible que la vida social no sea más que el desarrollo de determinadas nociones; pero suponiendo

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