TREBOL DE CUATRO HOJAS
Enviado por ackley • 23 de Noviembre de 2015 • Trabajo • 2.321 Palabras (10 Páginas) • 164 Visitas
TREBOL DE CUATRO HOJAS
GUILLERMO -----------------------------DIEGO ALEJANDRO NOVOA
JUANITO-----------------------------------------------------
MARTÍN ----------------------------------------------------
MADRE---------------------------------BRENDA
SOLDADO CUALQUIERA------------------------------------
NEGRO--------------------------------------------------------
PIRAÑA-----------------------------------------------------
MARTÍNEZ--------------------------------------------------
SOLDADO 1------------------------------------------------
ESCENA 1
LOS TRES HERMANOS, HAN LLEGADO A UN PUEBLO, ESCAPANDO DE LA MISERÍA QUE LA GUERRA DEJA A SU PASO.
MARTÍN: Buenos días.
JUANITO: Hola
MARTÍN: ¿Cómo estás?
JUANITO: Mejor. ¿Guillermo?
MARTÍN: Salió a buscar trabajo
JUANITO: Quería contarle que soñé con mamá.
MARTÍN: Estaremos bien.
JUANITO: ¿Y mamá estará bien?
MARTÍN: Ella ya no sufre.
JUANITO: Me hubiera gustado que venga con nosotros
MARTÍN: Ella está con nosotros. Aquí llega guille. ¿Cómo te fue?
GUILLERMO: Mal, no hay nada, los negocios están vacíos, aquí la miseria se pasea igual. Hola pequeño. Ten, estas papas servirán, las halle botadas, hay que quitarle las raíces y podremos comerlas.
MARTÍN: En donde si no tenemos ollas.
JUANITO: Guillermo, soñé con mamá.
GUILLERMO: ¿Cómo estás?
JUANITO: Mejor, mamá me dijo que nos quería mucho, dice que no hagas caso a los adultos, porque el azul del cielo, caerá sobre el rojo de nuestra piel.
GUILLERMO: Así que mamá sigue pintando, por la noche cuando la sueñes, dile de nuestra parte, que la amamos mucho.
MARTÍN: Podemos vender esto.
GUILLERMO: No Martin, es el único recuerdo que tenemos.
MARTÍN: Ella lo aprobaría.
GUILLERMO: Pero nosotros no.
MARTÍN: ¿Qué es eso?
GUILLERMO: Un volante, el ejército están pidiendo soldados.
MARTÍN: Qué tontería pide carne para cañones. Qué te pasa, no estarás…
GUILLERMO: Creo que es necesario.
MARTÍN: Pero que dices Guillermo, mamá ya nos ha hablado de esto.
GUILLERMO: Mírate, míranos, tres almas vacías sin alimento, una enfermedad que llega con el hambre. Están ofreciendo comida para los familiares
JUANITO: No vayas, dejaremos de comer.
GUILLERMO: No puedo hermanito, debo hacerlo o moriremos los tres.
MARTÍN: Escúchate, eso sí que no lo permitiría mamá.
GUILLERMO: Lo que no me permitiría mamá, es dejarlos morir.
ESCENA 2
MADRE: Soy la raíz del trébol, su sangre es la mía, les lloro, les pienso, me culpo por no estar con ellos ahora, me gustaría ser la cuarta hoja para darles la suerte. Una tarde la guerra llegó a nosotros, y nuestras sonrisas no volvieron a salir, el pueblo era un silencio móvil, la vida opaca, las armas abusivas, el frio más cruel que el enemigo. Un trébol de cuatro hojas para mis hijos, mis niños, mis penas aún en este paso por la muerte, volvería a sufrir las ulceras por darles de comer una y mil veces.
ESCENA 3
GUILLERMO: Ha sonado la sirena
MARTÍN: ¿Enserio te tienes que ir?
GUILLERMO: El hambre no perdona, somos muchos.
MARTIN: Ayer tuve un sueño malo, la luna era enorme. Pero solo alumbraba pedacitos pequeños de tierra. No vayas
JUANITO: Escríbenos a diario.
GUILLERMO: Los sentimientos no llegan a la guerra.
JUANITO: ¿Puedo ir?
GUILLERMO: La infancia debe quedarse, mis ojos ya están duros, pueden ver ya la muerte.
JUANITO: Me gustaría que tres hojas de trébol viajaran juntas.
MARTÍN: Eso sería como encontrar una de cuatro.
GUILLERMO: Sonó nuevamente la sirena, ya es la hora. Usen esto para pedir las raciones.
MARTÍN: Ahí se va nuestra suerte.
JUANITO: No comeré hasta que vuelva.
MARTÍN: Adiós.
(EL HERMANO SE VA A LA GUERRA, LOS OTROS HERMANOS INTENTAN DECIRLE QUE NO VAYA)
Soy uno que murió, uno cualquiera, me pusieron donde la muerte festeja. La bandera flameaba, que bonito se veía, pero era falso orgullo, me pusieron aquí porque ellos no eran capaces, me engañaron. Me siento como esos soldaditos de juguetes, usado por los niños, destruidos por partes, olvidados ahora. Nos creen seres desechables, pero no, tenemos corazón, sentimos, pero nos enseñan a ser soldados, y sentimos como soldados, y morimos como soldados, ¿Y qué es un soldado? Un títere, un objeto, una piedra, un sentimiento reprimido en la vida, eso somos.
JUANITO: ¿A dónde vamos?
MARTÍN: Donde la guerra no nos alcance.
JUANITO: Si nos alejamos, Guillermo no nos encontrará.
MARTÍN: Lo hará, él nos encontrará.
JUANITO: Mira, un trébol. ¿A dónde vamos?
MARTÍN: Subiremos la colina, en lo alto hay tierras fértiles, pondremos estás papas a sembrar.
JUANITO: Mira, una casa.
MARTIN: Ojala viva alguien.
JUANITO: El camino está lleno de tréboles, a lo mejor encontramos uno de cuatro, me pondré a buscar.
MARTÍN: Juanito ¿A dónde vas?
JUANITO: Buscaré la suerte. ¿Qué fue eso?
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