ADMINISTRACION DEL CAPITAL DE TRABAJO Y DE ACTIVOS CORRIENTES.

FINANZAS I

UNIDAD III. ADMINISTRACION DEL CAPITAL DE TRABAJO Y DE ACTIVOS CORRIENTES.

1.- INTRODUCCION.

Según la definición contable, los activos corrientes o circulantes son aquellos que se convierten en efectivo dentro de un año. Suele decirse que la administración del capital de trabajo representa la administración de estos activos, es decir; el efectivo y valores realizables, las cuentas por cobrar, los inventarios y los pasivos corrientes.

En esta unidad buscaremos brindar una visión global conceptual para juzgar las decisiones de capital de trabajo con relación a la valuación de la empresa.

2.- OBJETIVOS

a- Analizar los fundamentos básicos de la administración del Capital de Trabajo y su impacto en la liquidez de la empresa.

b.- Aplicar las técnicas e instrumentos generales para el análisis y gestión del capital de trabajo y su efectividad en las operaciones y situación financiera de una empresa

c.- Valorar la importancia de la administración del capital de trabajo en la toma de decisiones y el manejo responsable y ética de la información.

3.- FUNDAMENTOS DEL CAPITAL DE TRABAJO NETO

La mayor parte del tiempo, el director financiero de una empresa se la pasa administrando activos y pasivos circulantes que constituyen la fuente de financiamiento a corto plazo, para garantizar el funcionamiento y las operaciones normales de una empresa. Las empresas para generar las utilidades y su desarrollo, requieren de una combinación óptima de los activos y pasivos de corto plazo que le brinden la liquidez necesaria, que posibilite la producción de bienes y servicios, que proporcionen la satisfacción del cliente, un eficiente nivel de competitividad, la permanencia de la empresa en el mercado y el cumplimiento de sus obligaciones ante sus acreedores.

En unidades anteriores de estudio de la materia, determinamos que los activos de las empresas se clasifican y registran, los primeros; en función del grado de liquidez (facilidad con que el activo se convierte en dinero) y, que los pasivos se deben corresponder con su grado de exigibilidad (nivel de exigencia en el tiempo para cumplir el pago de una obligación) ante él o los acreedores. Es por ello, que el dinero en caja, los saldos en las cuentas de bancos y los valores negociables (disponibilidades) constituyen los activos más líquidos, seguidos de las cuentas por cobrar, los inventarios (materia prima, productos en proceso y productos terminados) y las inversiones temporales de corto plazo o menores a un año, conformando así, los activos corrientes de la empresa.

Por su parte los pasivos corrientes están constituidos principalmente, por las cuentas de proveedores, cuentas por pagar, documentos por pagar, impuestos por pagar, otros pasivos y las obligaciones bancarias de corto plazo. Cuando a los activos corrientes les restamos los pasivos corrientes, establecemos los fondos de Capital de Trabajo Neto de la empresa (CTN = AC – PC), constituyéndose así en los recursos propios de corto plazo de financiación de las operaciones de la empresa.

4.- CICLO DE CONVERSION DEL EFECTIVO, LA LIQUIDEZ Y SUS FUNCIONES.

Al inicio de estudio de la materia (Introducción a la Administración Financiera), recordemos el principio No.7 de las Finanzas que nos define del Ciclo del Negocio y que nos habla del buen uso de los recursos, para la generación de ganancias y, se establece:

                 DINERO                      MATERIA PRIMA             PRODUCCION          VENTAS[pic 2][pic 3][pic 4][pic 5]

Por definición el dinero es en si mismo es el mas liquido de todos los activos; los demás tienen diversos grados de liquidez, de acuerdo con la facilidad con que puedan convertirse en efectivo. Para los que no sean dinero, la liquidez tiene dos dimensiones: 1) el tiempo necesario para convertir el activo en dinero y 2) el grado de seguridad asociado con la razón de conversión, o precio obtenido por el activo.

La Administración del efectivo es de principal importancia en cualquier negocio, porque el dinero es el medio para obtener mercancías y servicios. La administración del efectivo generalmente se centra alrededor de dos áreas: el presupuesto de efectivo y el control interno de contabilidad.

El control de contabilidad es necesario para dar una base a la función de planeación y además con el fin de asegurarse que el efectivo se utiliza para propósitos propios de la empresa y no desperdiciado, mal invertidos o hurtados. La administración es responsable del control interno es decir y de la protección de todos los activos de la empresa. Por ser el efectivo el activo mas liquido y por ello; se necesita un sistema de control interno adecuado para prevenir robos y evitar que los colaboradores utilicen el dinero de la empresa para uso personal.

Los propósitos de los mecanismos de control interno en las empresas son los siguientes:

1. Salvaguardar los recursos contra desperdicio, fraudes e insuficiencia.
2. Promover la contabilización adecuada de los datos.
3. Alentar y medir el cumplimiento de las políticas de la empresa y,
4. Juzgar la eficiencia

Un buen sistema de control interno debe contemplar que todas las recepciones de efectivo deben ser registradas y depositadas en la cuenta de bancos en forma diaria y todos los pagos de efectivo se deben realizar mediante cheques.

La Administración eficiente del efectivo presupone la disponibilidad de efectivo suficiente para pagar el pasivo corriente y al mismo tiempo evitar que haya saldos excesivos en las cuentas de cheques. Los motivos de mantener efectivo en las empresas según Keynes son básicamente tres:

1. Transacción y Compensación a los bancos
2. Precaución
3. Especulación

El primero se relaciona con la necesidad de efectivo para hacer frente a los pagos que se presentan en el curso normal de los negocios: pagos por compras, pago de mano de obra, pago de dividendos, por compensación de préstamos y servicios proporcionados por los bancos. El segundo obedece a la necesidad de mantener un colchón o amortiguador para hacer frente a eventualidades inesperadas y, el tercero se relaciona con mantener efectivo a fin de aprovechar los cambios estimados en los precios de los valores (aumentos en las tasas de interés y disminución en los precios de los valores).

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