Cardiovascular
Enviado por e3p3ranza • 17 de Junio de 2013 • 1.972 Palabras (8 Páginas) • 304 Visitas
El corazón es un órgano muscular hueco que actúa en el organismo como una doble bomba: impulsa la sangre hacia los pulmones para su oxigenación, y bombea la sangre oxigenada hacia todas las zonas del organismo. La fibra muscular cardíaca posee automatismo, excitabilidad y conductibilidad eléctrica. Y sus válvulas son la bicúspide, tricúspide y semilunares.
Las arterias poseen paredes más anchas y elásticas que las venas, pero estas últimas poseen válvulas y un sistema de exclusas.
La sangre es un liquido rojo, espeso circulante por el sistema vascular sanguíneo, formado por un plasma amarillento compuesto de suero y fifrinógeno y de elementos sólidos en suspensión: Eritrocitos, leucocitos y plaquetas.
Las funciones de la sangre son: el transporte de elementos nutritivos, oxigeno, dióxido de carbono y además protege al cuerpo.
Estas funciones en la sangre son desarrolladas por los glóbulos blancos, glóbulos rojos, plaquetas y el plasma.
Las vías aéreas respiratorias altas son las Fosas Nasales, Cornetes nasales, Coanas nasales y Laringe. Cumplen la función de calentar, purificar y humedecer el aire que inspiramos. Y las bajas son la Traquea, Bronquios y Pulmones. Cumplen la función de intercambiar los gases.
Cuando el aire inhalado llega a los alvéolos, el oxígeno de este se difunde hacia la sangre y el dióxido de carbono de la sangre se difunde hacia el aire, que luego es exhalado.
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Alveolos pulmonares y el intercambio de gases entre el aire y la sangre
Las paredes de los alvéolos pulmonares son muy delgadas y están rodeadas por una red de capilares sanguíneos.
En los alvéolos se realiza el intercambio de gases (O2 y CO2) entre el aire que hay en el interior de los alvéolos y la sangre que circula por los capilares sanguíneos. El intercambio de gases ocurre mediante un proceso físico llamado difusión, que consiste en que las moléculas se desplazan desde donde hay más concentración a donde hay menos.
El oxígeno es transportado en la sangre por una molécula muy conocida, la hemoglobina, de intenso color rojo. En ella hay hierro y es a él al que se une el oxígeno. La hemoglobina está dentro de los glóbulos rojos o hematíes.
El dióxido de carbono se transporta disuelto en el plasma sanguíneo (la parte líquida de la sangre).
Circulación mayor o sistemática
La circulación sistémica transporta el oxigeno y los elementos nutritivos hasta los tejidos del organismo y elimina el anhídrido carbónico, los demás residuos y el calor de los tejidos. Todas las arterias sistémicas derivan de la aorta. La porción de aorta que sobre pasa el tronco pulmonar cuando sale del ventrículo izquierdo recibe el nombre de Aorta Ascendente. Da origen a dos arterias coronarias para el músculo cardíaco. A continuación, gira hacia la izquierda formando el Cayado Aórtico, que desciende hasta el nivel de la cuarta vértebra dorsal, punto en el que comienza la aorta descendente. Ésta se encuentra en la proximidad de los cuerpos vertebrales, cruza el diafragma y se divide a la altura de la cuarta vértebra lumbar en dos arterias iliacas primitivas, que transportan la sangre a las extremidades inferiores. La parte de la aorta descendente situada entre el cayado aórtico y el diafragma recibe el nombre de aorta torácica; la parte comprendida entre el diafragma y las arterias ilíacas primitivas es la Aorta Abdominal. Cada porción de la aorta da origen a arterias que siguen ramificándose y formando arterias de distribución que van hasta los organos y por último dan lugar a las arteriolas y capilares e irrigan todos los tejidos sistemicos (salvo los alveolos pulmonares), la sangre vuelve al corazón a través de las venas sistemicas todas las venas de la circulación sistemica drenan en la vena cava superior, la vena cava inferior o el seno coronario, que a su vez acaban en la aurícula derecha.
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Circulación menor o pulmonar
La circulación pulmonar lleva la sangre desoxigenada desde el ventrículo derecho a los alvéolos pulmonares y devuelve la sangre, ya oxigenada en los pulmones, a la aurícula izquierda. El tronco pulmonar sale del ventrículo derecho y se dirige hacia arriba, hacia atrás y a la izquierda. A continuación, se divide en dos ramas: la arteria pulmonar derecha, que se dirige hacia el pulmón derecho, y la arteria a pulmonar izquierda hacia el pulmón izquierdo. Las arterias pulmonares son las únicas arterias postnatales que llevan sangre desoxigenada. Al entrar en los pulmones, estas arterias se dividen y subdividen hasta que finalmente forman capilares alrededor de los alvéolos (sacos aéreos) de los pulmones. El anhídrido carbónico pasa de la sangre a los alvéolos y es exhalado. El oxigeno inhalado pasa de los alvéolos a la sangre. Los capilares pulmonares se reúnen, forman vénulas y venas y acaban dando lugar a las venas pulmonares, que salen de cada pulmón que transportan la sangre oxigenada hasta la aurícula izquierda.
Las venas pulmonares son las únicas venas postnatales que transportan sangre oxigenada. Las contracciones del ventrículo izquierdo envían la sangre de nuevo hacia la circulación sistémica.
Las circulaciones pulmonar y sistémica tienen varias diferencias. Una de ellas consiste en que la sangre de la circulación pulmonar no es bombeada tan lejos como la de la sistémica. Además, en comparación con las arterias sistémicas, las pulmonares tienen diámetros mayores, paredes más finas y menos tejido elástico. Por tanto, su resistencia al flujo de la sangre es muy escasa.
Esto significa que basta una presión menor para que la sangre llegue a los pulmones. La presión sistólica máxima que alcanza el ventrículo derecho es sólo un tercio de la del ventriculo izquierdo.
Como la resistencia en la circulación pulmonar es baja, la presión hidrostática capilar pulmonar normal, fuerza principal que hace que el liquido salga de los capilares hacia los espacios intersticiales, es de sólo 10 mm hg. Sin embargo, la presión capilar media sistémica es de 25 mm hg. Esta presión hidrostática capilar pulmonar relativamente baja tiende a evitar el edema pulmonar.
Sin embargo, si la presión en los capilares aumenta (debido a un incremento en la presión de la aurícula izquierda, como puede suceder en el caso de una estenosis de la válvula mitral) o aumenta la permeabilidad capilar (lo que puede ser provocado por toxinas bacterianas), puede producirse edema el edema pulmonar reduce la velocidad de difusión del oxigeno y del
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