DIDACTICA MAGNA

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UNIVERSIDAD PEDAGOGICA NACIONAL, TOLUCA 151 SEDE REGIONAL TEJUPILCO

DIDACTICA GENERAL

ENSAYO

DIDACTICA MAGNA

CAPITULOS I & II

PROFESOR: MANUEL BARRUETA VENCES

ALUMNA:

JENNIFER FAUSTINO CABRERA

CUARTO SEMESTRE, GRUPO “A”

INTRODUCCIÓN

El siguiente trabajo, es un ensayo que realice  a partir de la obra del autor Juan Amos Comenio, Didáctica Magna. Se destacan tres apartados importantes, basándose en Didáctica General, Didáctica Especial y Organización Escolar, claro partiendo desde un punto de vista de las ideologías de uno de los filósofos más importantes como lo es Jesus y sus escrituras, en estos primeros capítulos vamos a abordar un poco de lo que es el hombre y la perfección de su creación basado en las especulaciones de este antes mencionado.

Básicamente Comenio da a conocer cuál es su concepción acerca de la enseñanza, a partir de esto se puede rescatar una frase del autor que nos dice "enseña todo a todos", sobre esto podemos comentar que como futuros pedagogos, esta frase nos pude decir muchas cosas, es muy intrigante ya que al decir enseña todo a todos, uno como maestro en nuestros días sabemos que no es posible "saberlo todo" o alcanzar una “perfección” absoluta.

CAPITULO PRIMERO
EL HOMBRE ES LA CRIATURA POSTRERA, LA MÁS ABSOLUTA, LA MÁS EXCELENTE DETODAS LAS CRIATURAS

¿Hay alguna criatura ni en el cielo ni en la tierra que pueda gloriarse de tener a Dios revelado en su carne y mostrado a los Ángeles no sólo para que estupefactos vean al que deseaban ver sino para que adoren a Dios, manifestado en carne, al hijo de Dios y del hombre?

En este capítulo nos habla de la perfección con la cual fue creado el hombre, “. Te elegí como compañero mío en la eternidad, dispuse para tu uso el cielo, la tierra y todo cuanto contienen, reuní en ti solo cuanto brilla en cada una de las demás criaturas: la esencia, la vida, el sentido y la razón. Te elegí sobre todas las obras de mis manos; subyugué a tus plantas todas las cosas: ovejas, bueyes, bestias del campo, aves del cielo y peces del mar; por igual razón te coroné de gloria y honor”

Este capítulo realmente es corto pero sin duda deja mucho que reflexionar, ya que pone en balanza un ser espectacularmente perfecto como Dios, con uno tan idéntico para tan diferente, ya que nunca alcanzara la perfección con la que fue creado, aunque disponga de todas las maravillas, nunca estará conforme con lo que es por querer alcanzar una perfección que nunca tendrá.

CAPITULO II

EL FIN DEL HOMBRE ESTÁ FUERA DE ESTA VIDA

“Dios nos ha representado en esta vida nuestro último fin”

Nuestra misma constitución demuestra que no nos es bastante todo lo que en esta vida tenemos. Vivimos aquí una vida triple: vegetativa, animal e intelectiva o espiritual, la primera de las cuales jamás se manifiesta fuera del cuerpo; la segunda se dirige a los objetos por las operaciones de los sentidos y movimientos; la tercera puede existir separadamente, como ocurre en los Ángeles. Es evidente que este supremo grado de la vida esté en nosotros oscurecido y como dificultado por los demás, y debemos suponer que ha de existir algo donde esta vida intelectiva alcance su mayor desarrollo. Todas las cosas que hacemos y padecemos en esta vida demuestran que en ella no se consigue nuestro último fin, sino que todas ellas tienden más allá, como nosotros mismos. Cuanto somos, obramos, pensamos, hablamos, ideamos, adquirimos y poseemos no es sino una determinada gradación, en la que, lanzados más y más allá, alcanzamos siempre grados superiores, sin que jamás lleguemos al supremo. En un principio, nada es el hombre, como nada existió en la eternidad; tiene su iniciación en el útero de la madre, de la gota de sangre paterna.

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