EL LABERINTO DE LA SOLEDAD

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EL LABERINTO DE LA SOLEDAD

Brandon Eduardo Martínez Martínez

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El pachuco y otros extremos.

Al analizar el primer capítulo de “El laberinto de la soledad” me encontré en pocas palabras con un ensayo del autor hablando sobre los pachucos, personas sin identidad propia a mi forma de ver, que no pueden conectar ni con México ni con Estados Unidos, personas que carecen de identidad, al querer encajar siempre y no lograrlo. Recuerdo que en el 2019 me fui a vivir dos años a Estados Unidos, ahí me encontré con este tipo de gente, que no logra conectarse con ninguna raíz, que buscan ser rebeldes, querer hacerse notar pero solo por cosas malas, como cometer crímenes, vender drogas, etc. Al carecer de cultura intentan crear su propia cultura así sea de música, vestimenta o forma de hablar, ya que combinan los dos idiomas, el inglés y el español, en el estado de Texas que era donde yo residía les llamaban “chicanos”, llegue a convivir con diferentes familias con estas costumbres y todos tenían eso en común, un ligero odio hacia los mexicanos y los “gringos”.

Dentro del lenguaje del “pachuco” nos damos cuenta de que se quieren hacer notar, pero no de una forma amistosa o más bien pacifica, crearon este movimiento de la nada y ¿para qué? ¿para hacerse notar? Solo por no sentirse parte de algo, al tener dos culturas mezcladas tienden a tener estos sentimientos de soledad.

En cambio, el gringo ve a los “pachucos” como comenta el autor como seres míticos y por lo tanto virtualmente peligroso, esto pasa porque al tener raíces de otro país el ciudadano estadounidense se asusta al ver a una persona diferente a este, ya que ellos tienen una cultura muy básica si se pudiera decir, socialmente viven bien, culturalmente carecen de esta misma y su vida solo es estudiar, trabajar y jubilarte para vivir la tercera edad retirado de la sociedad, o en mi caso eso es lo que percibí de estos ciudadanos al convivir también con ellos, ellos carecen de empatía, ven a la gente diferente a ellos como personas que no merecen sus mismos derechos, talvez estas acciones han hecho que el “pachuco” se sienta excluido al resto de las personas, me pongo a pensar en lo difícil que debe ser para ellos no contar con una identidad y por consecuencia crear este movimiento solo para intentar encajar o más bien hacerse notar.

Mascaras mexicanas

Este capítulo nos habla de cómo el mexicano en su intento de que las personas no lo vean débil usa máscaras, como la frase “el mexicano no se raja” como dice el libro, el mexicano puede ser humillado, sobajado, pisoteado etc, pero jamás se raja, esto también hace referencia al machismo, el como el mexicano suele a esconder sus sentimientos en una cobija de superioridad.

Desde pequeños nos enseñan a no mostrar ninguna debilidad, como en los libros de historia que nos muestran a héroes nacionales como Francisco Villa, Emiliano Zapata, Morelos, los niños héroes, enseñándonos que ellos no se “rajan”, crecemos con esta mentalidad de no mostrar ninguna debilidad ante nadie pero al mismo tiempo escondemos las personas que realmente somos, este capítulo también nos habla de la mujer mexicana como alguien inferior, que si muestra debilidad al mostrar sus sentimientos, que la mujer debe ser una persona que sirva solo para complacer al hombre, esto lo vemos desde nuestros abuelos, bisabuelos, etc. El mexicano se me superior a la mujer y hace alusión al machismo, pero tomemos en cuenta también que este libro fue escrito en la década de los 50, ¿Qué tanto ha avanzado el mexicano en este tiempo? En esta época moderna hemos visto mayor poderío entre las mujeres, desde los 80 que se manifestaron para poder votar hasta la actualidad, han hecho marchas feministas, levantamientos por el feminicidio y el machismo, demostrándonos que la mujer no es realmente débil como se nos dice en el libro, la mujer mexicana nos ha enseñado que ellas también pueden hacer los trabajos del hombre, así como mantener una familia y tener voz y voto, y poco a poco el hombre mexicano comienza a aceptar todo eso, en mi experiencia personal yo fui criado con la mentalidad de que el hombre debe mantener a la mujer y a sus hijos, y la mujer debe encargarse de la educación de los hijos, la limpieza del hogar y las comidas para la familia, sin embargo, al ir pasando el tiempo, no me cierro solo a esa idea, también debemos entender en que la mujer es fuerte y puede lograr lo mismo que el hombre.

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