El arte de la prudencia de Baltasar Gracián

El arte de la prudencia de Baltasar Gracián

El arte de la prudencia te menciona diferentes formas con las cuales puedes vivir con prudencia (como lo dice el mismo título).

El libro fue creado en 1647, hace 372 años aproximadamente de la época actual; y cada uno de los aforismos que explica se pueden llevar o se llevan a cabo hoy en día, para poder vivir en este mundo que está lleno de competitividad.
Reduce la conducta humana en tan sólo 70 páginas, expresa que tenemos que ser mejores, pero no mejores que nuestros superiores; tenemos que ser inteligentes, pero no mostrar todo lo que tenemos dentro.

Nos enseña a cómo movernos en la selva de la vida, basándonos en la inteligencia, prudencia y la virtud. Teniendo que aprender a conocernos a nosotros mismos, para que no vivamos una vida monótona, ya que al conocernos podremos manejar mejor nuestras relaciones sociales, cuidándonos a nosotros y a las demás personas.

Tenemos que ser un punto medio de todo, saber cuándo llevar a cabo ciertas acciones, debido a que la gente mira sólo lo que quiere mirar y acepta lo que quiere aceptar, lo cual en cierto punto está bien, pero hay veces donde se dejan llevar, donde prefieren cerrarse y apuntar a la gente que no satisface sus deseos. Una persona prudente lleva con ella tantos puntos buenos que el mismo autor lo llama “santo”, una persona que es valerosa, feliz, verdadera, sabia; a la cual tres eses la hacen dichosa: sabio, santo y sano.

Considero que para llevar a cabo todo lo que menciona el autor, necesita de una buena inteligencia emocional, ya que al saber del porqué de cómo se siente, sabrá cómo manejarlo. Normalmente toman más en cuenta el CI (coeficiente intelectual) que la IE (Inteligencia Emocional), y eso está mal, porque no sirve de nada un sujeto muy inteligente que no sepa relacionarse con alguien o que no sepa cómo manejar sus emociones, entonces al no saber cómo manejarlas tendrá problemas para relacionarse lo que ocasionara distancia y eso hará que la persona no sea prudente, debido a que no tendrá una buena forma de expresarse y pues no podrá llevar a cabo los puntos que dice el autor.

 Para fortalecer el punto de que la IE es un factor importante relacionado con la prudencia haré una comparación de lo que comenta el autor con la vida digital.
Es este tiempo donde la tecnología la tenemos justo en nuestras manos y nos permite interactuar con un ser humano a través de una pantalla sin conocerlo de cerca y sin saber lo que sucede en su vida, donde es TAN fácil criticar, insultar y dejar que las emociones te controlen, tanto en la manera de expresarte como en la manera de recibir la información, donde la mayoría cree tener la razón, pero muy pocos se toman el tiempo de empatizar y analizar lo que el otro dice. Esto nos permita darnos cuenta que la prudencia unida con la inteligencia emocional permite ponernos en los zapatos del otro y aceptar un cambio en nuestra opinión, ya que todos los días nos encontramos en evolución de aprendizaje sin perder nuestra esencia y maximizando quienes somos

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